Capitulo 9.

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Ya no eres solo Ava


Una Reina debe ser:  justa, sabia, desinteresada, comprensiva, debe hacer todo por y para su pueblo, ser valiente, aguerrida, con modales impecables, una líder, ser suspicaz, tener, demostrar y transmitir seguridad, y al parecer, debe saber cómo manejar una M60, rifles de asalto, y ser experto en el cuerpo a cuerpo o eso me a estado explicando Sasha, en partes lo esperaba pero aún así me sorprendió

Aún sigo pensando que estás personas están mal de la cabeza y que mi estancia aquí es algún error, esto es tan ilógico e irreal y hasta fantasioso que cuando termine planeo vender mi biografía a HBO, no es juego, sería una historia tipo "Del orfanato al trono rojo de Gavell" terrible . También sigo Intentando procesar lo que le pasó a mis padres, si de verdad soy lo que dicen que soy claro, es decir ¿Esto es real? La madre superiora que me crío en Griaze me repetía que mis familiares no eran más que personas poderosas que no deseaban dificultades que arruinaran su vida, y por eso me habían dejado ahí para maldecir las de ellas, escuchaba eso a diario.

Ahora que lo mencioné, les cuento que todo esto me sirvió para disminuir mi rencor hacia aquella mujer, no deseo volver a verla en mi vida, de solo recordarla me dan ganas de esconderme en un viejo closet a chillar como cría, pero si me hizo darme cuenta que talvez no decía aquello de "la maldición" solo por decirlo, si parezco ser una maldición, lo más probable es que ese orfanato fue obligado a cargar conmigo, el error de un reino en guerra, pero en fin prefiero no pensar mucho en eso, ya es demasiado que llevar como para atormentarme con... Eso, con esa verdad

Tampoco me siento cómoda totalmente, todos (menos la bestia) parecen armables, pero no es fácil aceptar tanto en una noche, sigo sin aceptar que mi sufrimiento fue planeado, sin embargo decidí quedarme, igual, no parece que tenga otra opción, si vuelvo a mi casa lo más probable es que me terminen asesinando y irme a otro país es básicamente lo mismo que quedarme aquí, tomar lo que soy y adaptarlo a otro ambiente completamente diferente, y no me apetece vivir huyendo de asesinos el resto que de mi vida

Después del drama de la oficina del rey, estuve un par de horas sola en mi alcoba antes de que Alex me llevará a las afueras del palacio, donde abordamos una camioneta igual a la de ayer pero totalmente nueva y luego de un rato llegamos a lo que parece una clase de comando policial enorme

—Este es el cuartel del E.E.G — informa Esteban  cuando bajamos del vehículo — . Aquí te enseñaran todo lo que necesitas saber sobre armas, tácticas militares, estrategias, defensa personal  etcétera, etcétera. También es el lugar donde se llevan acabo las reuniones del consejo real, el consejo de guerra entre otras cosas que mantienen nuestro reino próspero y seguro, además es uno de los edificios más resguardados de la nación, por eso las emergencias se tratan aquí

La estructura es de varios pisos ancho y de techo ovalado cubierto en su totalidad por placas metálicas de color negro, sobre las puertas automáticas que se abren y cierran se encuentra una enorme G dorada con el escudo de Gavella a los lados, un enorme estandarte hace ondear la bandera con la brisa fría típica de esta nación. A los alrededores de la estructura hay militantes vestidos igual que nosotros algunos trotando otros simplemente conversando entre ellos pero justo cuando el brillante zapato del rey toca el camino de entrada detienen todo para hacer una sorprendente reverencia organizada a la perfección, tan rápido que me asustan arrancando de mi garganta un pequeño gritito

—Acostumbrate verás eso amenudo — informa Sasha apretando mi hombro para que continúe caminando

Entramos al edificio donde los presentes hacen la misma muestra de respeto cuando pasamos por el centro de la sala. Este primer piso es una oficina parecida a  mí antiguo lugar de trabajo, solo que super más moderno y sin un solo cuadro feo en las paredes, veo filas de escritorios, distintas herramientas de oficina, una pantalla que abarca casi toda la pared izquierda donde muestran información del reino, todo en negro, rojo vino y uno que otro detalle dorado. Dejando eso atrás, nos adentramos directamente en el elevador con el cuarto piso como meta, al llegar la vista cambia por completo, ahora solo hay una mesa larga con el emblema del reino tallado en el centro, nueve sillas una en cada punta, tres del lado derecho y cuatro del lado izquierdo, una de las sillas de las puntas es considerablemente más grande que las otras y tiene rubíes adheridos a la madera, algo como un trono, la de la punta contraria también es algo así pero más pequeña y menos ostentosa. La pared de fondo cuenta con una pantalla igual o más grande que la de antes.

Voldigoard (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora