Capítulo 13: Batcave

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La habitación donde los dejaron era extraña, no había ventanas por ningún lado, se encontraban solos luego que el hombre que los escoltó les pidiera que fueran pacientes.

NamJoon resopló fuertemente mientras dejaba caer su cuerpo en uno de los sillones que tenía la pequeña habitación.

—No entiendo qué está pasando— dijo con desesperación el castaño mientras veía la tranquilidad de NamJoon.

—Siéntate, no creo que tarde demasiado.

—¿Le habré agradado o ya estoy perdido? ¿Debo correr? Debería buscar como salir del país con poco dinero... ¡Ya sé! ¡Iré a la costa, buscaré algún barco pesquero y me iré con ellos...!— divagó en un ataque de nervios.

NamJoon ya sin saber que hacer se levantó y caminó hacia él para abrazarlo. Lo rodeó fuertemente para que sintiera que no estaba solo. La respiración de SeokJin era incontrolable. Parecía que se esforzaba por hacer que el aire entrará a su cuerpo, pero con cada bocanada le faltaba más el aire.

—Hyung... tranquilo.— susurró— ¿a caso no lo oíste? Prácticamente se enamoró de ti
—bromeó— si aceptó conversar con nosotros es porque confía en que venimos en paz.

—Pero entonces por qué nos trajo a un lugar tan extraño y oscuro.

—Hyung, has estado en peores lugares— lo molestó para bajar la tensión del ambiente.

La mirada de ambos por fin conectó una vez SeokJin levantó el rostro, NamJoon lo veía fijamente tratando da darle tranquilidad. El pecho de Jin era una tragedia bombardeada de tantos sentimientos en ese momento que no creyó jamás ser capaz de hacer tal maniobra.

De pronto sus labios estaban unidos con los del moreno. Tenía la necesidad de más contacto que un abrazo. NamJoon le correspondió y presionó más contra él, lo sostuvo con más fuerza tratando de guiar ese beso que sorpresivamente estaba compartiendo junto con él castaño.

—Dime que todo va a estar bien... por favor— susurró sobre sus labios y NamJoon sintió un puñal en su pecho.

— Claro que sí, hyung— respondió mientras volvía a juntar sus labios.

El sonido de la puerta abriéndose los hizo separar casi al instante. De manera inconsciente SeokJin se coló tras NamJoon para ser protegido.

Sunan había entrado por la puerta dejando a sus dos hombres fuera de la habitación.

—Vaya... — dijo con suavidad— Creí que todo era un truco. Hwasa me dijo algo por lo que supuse que el chico lindo solo era una ilusión.

Sunan cerró la puerta y les indicó que acercaran junto con él a los sillones algo maltratado.

—Lamento si no es el mejor lugar, pero es lo más discreto que puede haber en este hotel, es el lugar de descanso de la servidumbre así que podemos hablar tranquilamente.— se disculpó mientras sus dos acompañantes se sentaban frente a él.

—¿Qué querías decirme sobre Kang?

—Ah, mi viejo amigo.— comentó con algo de nostalgia— viendo como ha evolucionado la situación creo que es conveniente que lo sepas de un modo u otro.

— Qué sucede.

— Mi querido ChungHo, ha sufrido tanto. Ese maldito bastardo que decidió cuidar, lo tiene casi en la agonía.

— ¿Es grave?

— Los médicos dijeron que podría recuperarse, pero es complicado, ahora se encuentra en la lista de transplantes de corazón. Lo último que supe fue que sus riñones estaban comenzando a fallar poco a poco y sus pulmones por poco colapsan hace un par de semanas.

Zaino [NamJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora