Mine | Sanzu Haruchiyo | +18 (Terminada)

04

Que Koko me llevara a mi habitación luego de la cena hizo que me calmara un poco, de todos los lugares que me habían enseñado, sin duda ese lugar era en el que más segura me sentía, quizá porque el albino la había preparado para mí o porque ingenuamente creí que sería mi lugar seguro en la casa

Después de tomar uno de los pijamas que había en el armario me vestí con él para meterme en la cama, donde me recosté en el centro cubriendo mi cuerpo para observar el techo fijamente, me sentía perdida y desesperada, quería vivir, aun me faltaban tantas cosas por hacer, ¿Pero a que costo me mantendría viva? ¿Podría cumplir con todo lo que siempre había soñado? "Una vez que entras en Bonten ya no puedes salir" esa frase se repetía en mi cabeza, ¿Había hecho bien en aceptar esa propuesta de Koko? Sabía que tanto él como mi hermano solo querían que viviera ante todo, ¿Pero valía la pena el costo que estaba pagando?

Tenía miedo, por primera vez después de tanto tiempo, tenía miedo de lo que me esperaba en el futuro

No sabía cuándo, pero me había quedado dormida luego de que mi cerebro prácticamente se quemara de tanto pensar

Había tratado con gente bastante inestable en mi trabajo, pero jamás había estado sola, siempre había alguien cerca y eso me hacía sentir segura, pero en Bonten debía lidiar sola contra Sanzu Haruchiyo, quien estaba completamente loco y lo comprobé antes de lo que me hubiera gustado

Me desperté agitada cuando algo helado impactó contra mi cuerpo haciendo que gritara aterrada, sentándome en la cama jadeando mientras el frio comenzaba a invadir mi cuerpo

Miré mis manos antes de bajar a mis piernas, estaba mojada, todo mi cuerpo y cama lo estaba...

Levante lentamente mi cabeza para ver a Sanzu frente a mí con una cubeta a sus pies mientras me observaba con los brazos cruzados y lucia realmente furioso

¿Qué parte de "Comenzamos temprano" no entendiste? ¿Quién demonios te crees que eres para hacerme esperar?- gruñó

Tomé con mi mano temblorosa el celular de mi mesa de noche para ver la hora, eran las cuatro de la maldita mañana ¿Qué sucedía con ese sujeto?

No me dijiste la hora a la que querías que fuera contigo, pensé que sería a las siete como mucho- negué confundida, estaba en shock, me había despertado de golpe y aun me encontraba algo aturdida

Me importa una mierda lo que pienses- caminó hacia mi recorriéndome con la mirada- aquí mando yo, si te digo salta, saltas, si te digo que abras tus malditas piernas para mí, lo haces- tomó mi rostro con su pulgar e índice obligándome a mirarlo a los ojos- ¿Lo entiendes?

Jamás me entregaría a alguien como tú- me solté de su agarre molesta, ese sujeto era un imbécil y ya no tenía dudas de ello

¿En verdad?- rió bajando su vista a mis pechos- tu cuerpo parece decir otra cosa ¿Acaso te excita que te denigre, gatita?

Creo que no sabes nada del cuerpo de una mujer cerdo- me cubrí mis pechos, ya que gracias al agua helada que me había tirado encima, no solo mi pijama se transparentaba, sino que mis pezones se habían endurecido y resaltaban mucho más- antes de excitarme contigo, me tiraría del lugar más alto de esta casa para morir de la forma más dolorosa posible

¿¡Aoi estas bien!? Te escuché gritar...- vi a Koko entrar a la habitación agitado, deteniéndose al ver la escena frente a él- ¿Qué demonios hiciste Sanzu?

No te metas- lo señaló antes de girarse hacia mí- cinco malditos minutos, si no estás abajo, créeme, te arrepentirás

Lo vi salir de la habitación y pasé mi mano por mi cabello quitándomelo del rostro frustrada, ya me sentía arrepentida, completamente arrepentida de haber aceptado la propuesta de Hajime