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Sanzu había preparado todo para que pudiéramos comenzar a vivir en esa hermosa casa que él mismo había hecho construir y que se había tomado el tiempo para vigilar que todo saliera bien, que quedara como lo había soñado siempre

Debía admitir que cuando me había llevado por primera vez a la casa, al ser de noche no había podido observar todo con detalle, el exterior apenas lo había visto, y el interior solo había llegado a ver al comedor donde habíamos cenado y luego la habitación, pero a la mañana siguiente, apenas había despertado me había pasado horas y horas recorriendo el lugar

La casa era grande, no una mansión claramente, pero si grande para dos o tres personas como seriamos, tenía cuatro habitaciones contando la nuestra, un baño en cada una de ellas y la recamara principal, que tenía aparte del único baño que aparte de tener una ducha también tenía una gran bañera y un hermoso vestidor, el cual ya estaba lleno de mi ropa, pero eso no era todo, nuestra habitación también tenía un enorme ventanal que nos dejaba salir a un pequeño balcón con una increíble vista al mar

Las otras tres habitaciones eran un poco más chicas al igual que los baños de cada una de ellas, según Sanzu, serian para nuestros futuros niños, la cocina y el comedor estaban uno junto al otro, siendo separados por una isla enorme que contenían varias sillas altas, y aunque no era de cocinar, debía admitir que ese era uno de mis lugares favoritos, claro que luego de nuestra habitación.

También tenía una enorme sala con sillones, chimenea y un gran televisor, y para terminar una oficina no muy grande donde Sanzu solía trabajar cuestiones del bar, ya que él era el que llevaba las cuentas y aunque a veces lo atendía conmigo, mayoritariamente no tenía contacto con los clientes porque aún no tenía mucha paciencia

El lugar era increíble y el pelirrosa se había encargado de no solo de cumplir con todo lo que alguna vez había dicho que me gustaría tener en mi casa de ensueño, sino que había superado incluso todas mis expectativas, dándome un hogar increíble e inigualable

Y no solo me había dado eso, sino también un bar a solo unos pasos de nuestro hogar, un bonito y tranquilo bar que a pesar de haber pasado solo dos meses desde que lo habíamos inaugurado, era muy concurrido ya que por la zona no había muchos y mucho menos tan cerca del mar

Mi embarazo iba muy bien, con seis meses de embarazo me sentía increíble, y todo era gracias a las personas que me rodeaban, pero sobre todo a Sanzu, que siempre estaba pendiente de nosotras, consintiéndonos y sobre todo, amándonos

Me encontraba en esa enorme cocina caminando de un lado hacia el otro mientras leía un libro de cocina e iba agarrando todo lo que decía en la lista que estaba en esa hoja, llevaba varios días practicando como cocinar, y debía decir que con mucha practica y ayuda de Kakucho a quien llamaba a cada rato para que me diera su ayuda, había mejorado bastante, lo cual me emocionaba mucho

La navidad se estaba acercando, cuando era niña esa esa era mi fecha favorita porque con mis hermanos podíamos comportarnos como niños, salíamos a la nieve, jugábamos, armábamos muñecos de nieve y comíamos tantos dulces como quisiéramos a escondidas de nuestros padres, por lo cual acercarnos a esa fecha me emocionaba bastante, no sabía si era por el embarazo o porque sería la primera vez que lo festejaría luego de la muerte de mi hermana, pero por primera vez después de tantos años, me sentía emocionada por esa fecha y por ello quería organizar una cena navideña en la casa con el alto mando de Bonten y mi hermano

De haber mandado a Koko al hospital años atrás, a incluso poder comer yo la comida que preparaba sin poner en riesgo mi vida o la de mi bebé, era un gran avance

Mmm ¿Huevo?- leí en la receta y levanté mis hombros, ¿Quién era yo para cuestionar lo que decía en el libro? Jamás lo había comido con eso, pero a Sanzu le encantaba, así que mucho mejor- huevos y más huevos- reí poniéndolos sobre la encimera para volver a acércame al libro- ¿Qué más?

Mine | Sanzu Haruchiyo | +18 (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora