En la escuela no solo estaba la hija de un pianista privilegiado si no también alguien que podría descongelar el corazón de cierto metalero. Hasta aquel día, luego de que Dee humillara a una de sus compañeras por estar mirándolo se escuchó el grito del profesor hacia la esquina del salón.
—¡Señorita Ivanov! —gritó el profesor llamando a atención de la chica que estaba dormida en su escritorio —si tanto sabe como para dormir en mi clase ¿cuando inicio la revolución industrial?
La pregunta que le hizo iba todo lo contrario a el tema que estaban viendo en el salón, Dee al verla le alzo m una ceja al verla bostezar antes de contestar.
—inició en Inglaterra durante la segunda mitad del siglo XVIII, siendo uno de los eventos más decisivos de la humanidad, lo primero que se inventó fue la máquina a vapor y a medida de ese invento se fueron inventando más —respondió con facilidad haciendo que el profesor aún molestó la mirara.
Al sonar el timbre la chica que se había vuelto a dormir despertó para recoger sus libros y poder irse a casa, mientras tanto Dee la miraba maldecir a el profesor desde afuera, la chica que vestía de manera elegante caminaba furiosa cuando por error chocó contra Dee. Cientos de <<lo siento>> salían de sus labios mientras recogía sus libros, su vergüenza no la dejaba ver su rodilla raspada el cual estaba sangrando.
—estas sangrando —fue lo que contestó el chico mientras la ayudaba recoger sus cosas, al ver su cabello largo y oscuro carraspeo, se le había hecho linda.
—lo siento, soy algo distraída —respondió arreglando su camisa de botones color blanco que se había ensuciado y arreglando su chaleco tejido color negro, dee miró más abajo y su falda color negro seguía intacta a excepción de sus medias blancas a la rodilla que ahora estaba color rojo.
Dee iba a responder algo pero se escuchó una corneta y la chica algo nerviosa volteo para ver la limosina detrás de lla.
—Nos vemos luego —se despidió la chica mientras caminaba adolorida y el chofer del auto se bajo para ayudarla a subir, Dee al ver correr a su hermano junto a él quitó la pequeña sonrisa que tenía para caminar junto a él a casa. Al llegar a su gran mansión (mejor dicho de su padre) una de las mucamas limpiaba su rodilla mientras ella almorzaba junto a su padre antes de practicar. Su madre había muerto hace años, por lo tanto solo eran su padre y ella. Su padre empezó a drenar toda su ira en su hija al forzarla a ser la mejor prodigio del piano a los casi17 años, el violín era un extra pero ahí estaba.
La castaña de cabello color casi negro tocaba rápidamente las notas, una gota de sudor corría por su frente mientras sus dedos adoloridos tocaba de do a do. Pero falló una simple nota que intentó dicimular pero que su padre notó.
—las manos ¡ahora!
Las chica aterrada extendió sus manos y cerró los ojos antes de sentir la regla de madera contra sus nudillos repetidasmentes.
—mañana repetimos, ve a bañarte y a dormir, hoy no cenas.
Ella se fue caminando hacia el baño mientras lloraba del dolor en sus nudillos. Mientras se bañaba con ardor en sus nudillos evitaba mojar su rodilla también adolorida.
Al entrar a su habitación cerró la puerta y se empezó a vestir, pero no con su pijama. Dee caminaba por las calles oscuras y frías, se terminaba de escapar cuando escuchó música proveniente de un club. Por mera curiosidad se acercó a ver y ahí fue cuando la vio. Estaba como guitarrista principal en una banda. Dee puso una sonrisa de lado al ver que era todo lo contrario de lo que vio en la tarde. Se veía muy distinta, más confiada de sí misma y tocando canciones de Slipknot.
—¡Está fue nuestra ultima canción por hoy! —gritó el vocalista en el micrófono haciendo que la gente se desilusionara —pero viene un grupo después de nosotros pero nos vemos mañana —dijo el vocalista despidiéndose con la mano —o tal vez podemos vernos en el backstage, si saben a lo que me refiero —el vocalista guiño el ojo a el escenario a Dee le pareció que se veía mucho más mayor a como se veía su compañera de clases y los demás integrantes de la banda.
En el backstage le daban dinero a la integrante de la banda para que se comprara algo para cenar. Mientras caminaba hasta llegar a un puesto de hamburguesas Dee la iba siguiendo, se sentía como un acosador pero se le hacia interesante como alguien en la mañana tenía típica ropa de niña rica y ahora vistiera mallas, una falda de cuero, una camisa. Con una calavera gigante y delineador en casi todo el párpado, como el.
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Llámame Noroc (dee y tú)
FanfictionDee por vueltas de la vida conoce a un chica un tanto peculiar con una vida bastante opresora y complicada, la atención Dee aumenta cuando la empieza a conocer más a fondo, desarrollando sentimientos nunca antes vistos. La historia contiene groserí...