Llámame Noroc (dee y tú)

19

Esa tarde noroc llegó a la casa de la familia de Dee, no incomodaba en lo absoluto, almorzaron e incluso ayudó en las tareas del hogar ella y glam se dedicaron a pulir los cubiertos y vasos de cristal, ambos tenían  paciencia para eso que pareciera que Noroc era hija de Glam.

—¡maldito animal! —gritó Dee hacia Heavy ya que estaba trapeando y Heavy pasó con sus zapatos por el suelo húmedo —¡de esta no te salvas Heavy! —grito Dee antes de perseguir a Heavy.

Vicky regaño a ambos pero Noroc y Glam ni se inmutaron, solo seguían puliendo con pañuelos blancos.

—Hey niña —llamó vicky con su tono algo grosero a lo que Glam rio un poco nervioso, no sabía si su tono de voz podía alterarla pero no lo hizo.

—¿si?

—voy a llevarme a Dee y Heavy al taller, deberías acompañarnos.

Noroc sonrió contenta y asintió varias veces con la cabeza.

—pero vas a tener que cambiarte o al menos ponte una camiseta, dee o heavy te pueden prestar algo, esa ropa es muy cara —Dijo vicky mientras sonreía de lado y Noroc asintió emocionada con la cabeza.

Noroc miró a dee y el agarró su mano para llevarla a su habitación para ir a cambiarse. Noroc confiaba más en la ropa de Dee que en la de Heavy, temas de higiene.

—vas a tener que quitarte las pantimedias y quedarte solo con tus shorts y mocacines, la camisa y chaleco lo podemos quitar dijo dee antes de pasarle una de sus camisetas negras, el cual le quedaba larga.

Noroc se tuvo prácticamente tener que quitar todo y estaba en panties cuando miró algo en la habitación que le fascinó y corrió a verlo.

—¡tienes un nuevo libro de la teoría de gravedad de Aristóteles! —chilló algo emocionada mientras sostenía el libro en sus manos, son tal para cual.

—lo conseguí en internet, ahí consigo muchas cosas.

—por cierto, un pajarito me contó que decidiste ponerte hasta atrás con un amigo mío.

Dee empezó a reír nervioso y se acercó a noroc.

—¿te sientes bien?

—si, ¿por que no lo haría?

—te desmayaste en la escuela, tengo que asegurarme que te sientas bien.

—estoy bien Dee, lo prometo.

—si te llegas a sentir mal solo dímelo.

Noroc se empezó a vestir nuevamente mientras que dee la miraba fijamente.

—es más cómodo cuando no te miran mientras te cambias.

Dee de un cajón sacó unas pulseras y las puso en las muñecas a noroc

—no quiero que se ensucien las vendas, igual al llegar voy a limpiar tus heridas, conseguí unos cicatrizantes, costosos pero efectivos.

Los cuatro estaban en el taller, las manos de noroc estaban llenas de aceite al igual que rodillas pero estaba aprendiendo mucho. Heavy por su parte estaba feliz, no tenía mala relación con su hermano pero le hubiera gustado tener a alguien como Noroc junto a él, se entendían bien y tenían una relación bastante fraternal. Vicky por su parte estaba siendo paciente, noroc no era preguntona ni contestona y hacía todo lo que ella decía además tenía buena memoria para memorizar qué herramientas pasarle cuando se las pedía.

Al hacerse un poco más de noche dee se llevó a noroc, debía ayudarla a limpiarse y además ella debía ir a casa. Glam estaba ocupado en su oficina así que no notaría que dee estaba en el baño ayudando a su novia a quitarse las manchas negras de suciedad de aceite.

—no tan fuerte Dee —se quejó noroc por la manera en la que le estrujaba la esponja por el cuerpo.

—perdón, es que no termina de salir y no quiero que tu padre te vea en este estado.

Luego de una larga ducha noroc ya estaba junto a dee en su habitación escuchando música mientras se terminaba de arreglar, para su suerte en su bolso escolar siempre tenía panties limpias por si ocurría algún accidente una vez al mes, además estaba algo apurada y no se podía quedar para cenar.

—me gustó pasar el día con tu mamá y heavy —comentó noroc mientras dee limpiaba las heridas de sus brazos.

—estoy seguro que a ellos les gusta estar contigo, mamá sé que en algún punto de su vida quiso tener una niña y heavy una hermana con quien llevarse mejor.

Ya estando en la entrada de la casa dee le dio un último beso suave en los labios.

—¿segura que no quieres que te acompañe? —preguntó dee, ella insistió en irse caminando, según ella ya se sentía mejor.

—estoy perfecta, además tengo la carta de la escuela donde dice que mañana no debería asistir debido al desmayo de hoy.

—bien, si te sientes mal me llamas, si te sientes bien también y por favor avísame cuando llegues.

Noroc sonrio, le dio un beso y se dio la vuelta para irse. Tiempo atrás no hubiera creído que el frío y espeluznante dee con quien compartía clase de historia fuera un muchacho tan tierno en el fondo.