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El domingo en la mañana Dee bajo a desayunar como todas las mañanas.

—anoche no te escuchamos entrar ¿a qué hora llegaste? —soltó Victoria sin preámbulos a Dee.

—a la hora máxima que decidieron darme —respondió en la vista en la pantalla de su teléfono, estaba hablando con alguien en específico y no era un amigo.

—no te escuchamos entrar anoche y creemos que decidiste quedarte hasta tarde en la calle —volvió a hablar victoria algo molesta porque su hijo solo estaba en su teléfono.

—entre en silencio para no despertar a nadie.

—nadie aquí se duerme a las 11 un sábado.

Dee al no responder de vuelta y sonreírle al teléfono su madre levantó una ceja.

—dame tu teléfono a ver qué tanto ocultas para llegar en silencio.

Dee miró a su padre el cual servía el desayuno para que dijera algo con respecto a eso.

—Nuestro hijo ya tiene suficiente edad para tener su privacidad y no creo que nos vemos obligados a eso, además creo que se le puede extender su hora de llegada, tiene 17 años y sabe cómo cuidarse en diversos sentidos —respondió Glam con su típico acento para calmar la situación.

Vicky refunfuñó y Dee siguió tecleando en su teléfono con una pequeña sonrisa.

—de lo que no estoy de acuerdo es que se use el teléfono en la mesa —dijo Glam cuando todo estaban sentados y dee seguía en el teléfono. Dee dejó el teléfono por un momento en la mesa para comer su avena, mientras comía se resistía a agarrar su teléfono vibrante encima de la mesa.

—contesta rápido y si que está desayunando —dio el permiso Vicky a lo que Dee no dudo un segundo en agarrar su teléfono.

Dee: estoy algo ocupado, en realidad estoy desayunando, te respondo cuando termine ya que me regañaron por eso y prometo escribirte cuando termine

Heavy al ver el corazón al final y el nombre agendado de arriba que estaba como Sofía 🖤 no aguantó un segundo más y exclamó pataleando de la emoción meintras se aguantaba la risa

—¡Dee tiene novia!

Su madre se atragantó con al avena a tal punto que le fue por la nariz meintras que su padre suspiró algo frustrado por sus hijos, las mejillas de Dee estaban rojas como tomates y soltó el teléfono antes de saltar a su cuello bastante molesto.

Sofía soltó su teléfono, desayunaba en su habitación ya que amaneció con resaca pero aún así le dijo a su padre y sus empleadas que a lo mejor contrajo un virus y por eso pasó toda la mañana vomitando con dolor de cabeza. Para su suerte su padre salió por toda la tarde por asuntos de trabajo.

Se ahogó con la sopa de caldo de pollo que le habían preparado al ver el corazón de dee "♡", se emocionó  tanto que evitó gritar al ver esa muestra de afecto de la persona más seria que había presenciado en su vida.

Al terminar de comer retiraron su plato y verificaron que no tuviera fiebre, con cuidado se acostó nuevamente en su cama y miró su teléfono, otra vez. Esperaba señales de dee y segundos después las tuvo.

Dee: perdón que haya interrumpido nuestra plática es que mis padres me regañaron por usar el teléfono y bueno,  luego me castigaron porque ahorqué a Heavy y ahora estoy en mi habitación.

De casualidad no te puedes escapar para ir al cine?  Hoy a las 4:00pm
 

Dee: pues, tengo que hacer un esfuerzo sobre humano para que no me descubran

Sofía se lo pensó dos veces antes de mandar el mensaje decisivo

Ni aunque fuera una cita?

Dee tragó fuerte cuando vio que le mandó el mismo corazón que él le había enviado antes y miró su puerta cerrada en su habitación. En eso entró heavy sin tocar la puerta.

—ahora pondré mi música una semana entera, conoces las reglas —dijo dee como siempre.

—¡ay, no!, ahora voy a escuchar tu música pop— la actitud de heavy le sirvió a dee para algo.

—pero se puede anular solo por esta vez a cambio de algo —dee tuvo la mejor idea que se le pudo ocurrir, tendría una cita.

—¿a cambio de que? —preguntó heavy y dee le hizo señas que cerrara la puerta y eso hizo.

—pues, hoy a las 4 tengo que estar en un lugar y tal vez salga como a las 3:40 así que necesito que me cubras, dile a mamá o papá que estoy muy ocupado haciendo tarea para mañana y si no te creen di que me dormí, eso si, si te creen haré tu tarea por una semana.

—bien, pero prométeme que no pondrás tu música pop y que mis tareas estarán bien hechas.

—lo prometo, tratos son tratos.

Ambos hicieron un apretón de manos y dee sornio victorioso.

A las 3:50 Sofía estaba casi llegando a el cine en el que acordaron verse, se había arreglado más de lo normal, aunque la ropa que su padre permitía eran solo faldas por la rodilla, algunos pantalones caros y demás.

Dee aunque no lo admitiría se había lavado doblemente sus dientes, había retocado su maquillaje, peinado y perfumado.

Al llegar a las 3:55 y ver a Sofía arreglar su ropa algo nerviosa sonrió y se acercó a ella.

Sofía al verlo sonrió y aunque ya habían estado juntos antes nunca en una cita, se conocían bastante bien como para que su primera cita fuera en el cine.

Entre los dos escogieron una película increíblemente sangrienta, pero a ambos les divertía el hecho de la trama tan ridícula de la película.

Ambos se espantaron un poco y con nerviosismo evitaban mirarse cuando ocurrió la escena del beso entre los protagonistas. Sofía miró de reojo a dee que miraba algo asqueado a parejas besarse. Fue acercando un poco su mano a la suya, sintió a dee tensarse por lo que se arrepintió inmediatamente y quitó su mano pero luego ella se sorprendió al sentir como dee entrelazaba sus dedos en su mano.

Llámame Noroc (dee y tú)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora