A los primeros rayos del sol, todo el personal del gran palacio imperial estaba despierto, realizando sus deberes.
Dos doncellas llevaban unas bandejas de aseo, caminaron hasta el señorío donde se hospedaban los protectores de la frontera oeste.
Una doncella de piel pálida tocó con delicadeza la puerta — General Xiao Chen, General Xiao Chen.
No tardó en abrir la puerta un Xiao Chen que por su aspecto delataba de se acababa de levantar.
Las doncellas entraron a la habitación y salió de su habitación Yuwen Qing.
— saludos general Xiao Chen, mi nombre es JunTian y seré su doncella — hizo una reverencia la doncella que había tocado la puerta.
— saludos joven ama Wen Qing mi…
— ¿Cómo me llamaste?.
La doncella no puedo terminar se presentase cuando Yuwen Qing la interrupción.
— joven… ama — contesto la doncella un tanto dudosa.
Yuwen Qing la miraba molesta como si hubiera cometido un error, pero ¿Que error había cometido? No lograba comprender.
— no soy ninguna "joven ama" — dijo de mala gana imitando la voz de la doncella que era muy aguda — soy Yuwen Qing, comandante de la frontera oeste, ¿Entendido?.
La doncella rápido agachó la mirada e hizo una reverencia — si joven … si comandante Yuwen Qing.
— no seas tan pesada WenQing — dijo divertido Xiao Chen.
— por favor general Xiao Chen — JunTian hizo una referencia apuntando a su habitación — le ayudaré a vestirse.
— por favor comandante Yuwen Qing — imitó la otra doncella — le ayudaré a vestirse.
— está bien — contesto más relajada — Xiao Chen ¿Has visto mi ropa? No la encuentro.
Xiao Chen estaba apunto de decir que la ropa estaba en su habitación cuando la doncella de Yuwen Qing se apresuró a hablar.
— comandante Yuwen Qing — dijo habiendo una reverencia — ayer mientras desempacamos sus pertenencias, nos percatamos de que solo había ropa del general Xiao Chen.
Yuwen Qing solo pido los ojos sorprendida, mientras que Xiao Chen dibujaba en su rostro una sonrisa divertida.
No era la ropa de Xiao Chen, esa era la ropa de Yuwen Qing.
Xiao Chen y JunTian estaban apunto de irse pero Xiao Chen se detuvo en seco.
— espera un momento, esto se pondrá divertido. — susurro para que solo JunTian lo escuchará.
— tal vez sus pertenencias se perdieron — prosiguió la doncella — le comenté a la emperatriz viuda sobre la situación y ella le a decidido regalar diez vestidos.
La doncella toma la bandeja que había dejado en una mesa cercana y muestra un vestido de la más hermosa tela, de color rosa y con mariposas bordadas en la tela.
El vestido sin duda era verdaderamente valioso y hermoso, ajustado a los gustos y exigencias de la emperatriz viuda.
— también le hemos preparado un señorío por separado que el del general Xiao Chen.
Yuwen Qing se llevó las manos a los sien y los masajeó como si tuviera dolor de cabeza — ¿Por qué?.
La doncella la miro sin comprender la pregunta — una mujer y un hombre no pueden dormir bajo en mismo techo, al menos de que estén casados .— contesto la regla que se sabía de memoria.
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Demonio de guerra,la historia de la comandante Yu WenQing
Historical Fiction¿"Cual deseo es realmente más importante"?. ¿El amor que duele al punto de no poder respirar? o ¿El deseo de venganza que hierve en la sangre?. Huazēi Xiang vivía una vida feliz hasta que conoció a Hu Cheng el general más importante de su estado. Hu...
