OBSESIÓN SEXUAL ☆Yutae/ Taeyu☆

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Pasé del agua caliente a la fría, estuve bajo la ducha hasta que "me calmé". Me negaba a hacérmelo otra vez, y mucho menos por culpa de Yuta...

Me rodeé la cintura con la toalla y me empecé a cepillar el pelo, desenredándomelo. Miré de reojo hacia la puerta. ¿Seguiría él en la habitación? Quizá se molestó por... por lo que vio y se fue.

Agarré mi ropa y salí del baño.

Efectivamente seguía allí, estaba tumbado boca abajo en mi cama, creo que estaba mirando algo en su teléfono. Suspiré cansadamente, no se de que me sorprendía.

—¿Todavía no te has largado? —dije mientras caminaba hacia la mesa donde dejé mi maleta. A los pies de la cama.

—Eh Taeyong, escucha, escucha este "Hola Taeyong, me llamo Hye Mi y estoy loca por ti " Esta si que es directa ¿eh? — me volví rápidamente, el móvil que tenía en las manos no era el suyo si no el mío —"desde que te vi no he podido dejar de pensar en ti, eres el chico más atractivo del planeta" ¿esta chica no tiene ojos en la cara o qué? ¿Cómo puede decirte que eres el chico más atractivo del planeta? Si te viese recién levantado...

Le lancé mi zapatilla, la esquivó riéndose.

—Deja eso estúpido yo no fisgoneo tus cosas —aproveché que no me miraba para ponerme los boxers.

—Espera, espera que ahora viene la mejor parte "te has convertido en algo imprescindible para mí, abarcas cada uno de mis pensamientos, puede que te resulte un poco brusco, pero sueño eróticamente contigo" —Me estremecí ante el comentario... era como si Yuta estuviese relatando mis pensamientos en voz alta. —Diooos ¿te la imaginas Tae? Metiéndose el dedo mientras grita tu nombre, hmmm Tae más, dame más...

Yuta se mordió el labio inferior y se abrazó a si mismo de una forma puramente teatrera. Yo le seguía dando la espalda... me temblaban las manos.

—Yuta basta... —Me estaba abrochando los vaqueros como podía. Era realmente humillante, aunque mi hermano no sabía nada de lo que yo hacía, era como si... como si se estuviese burlando de mí.

—Mira, aquí es cuando ya se vende completamente "me muero por abrazarte y ver que es lo que se siente hacerlo con la persona que amas"

Me entró como un revuelto en el estómago, maldita sea ¿por qué me sentía tan jodidamente identificado con todo lo que me decía esa chica?

Agarré la primera camiseta que encontré y me la puse violentamente.

—Yuta deja eso de una vez, o me voy a enojar.

Él se incorporó quedando sentado en la cama.

—Espera que ya acaba "por favor llámame algún día, estoy dispuesta a hacer todo lo que me pidas, Te quiero"

Apreté los puños y caminé hacia él.

Eso no era cierto, de ninguna manera... ¿yo? ¿Hacer lo que sea por él? ¿Lo quiero? Ni una mierda.

—Dámelo —dije extendiendo la mano. Yuta me miró sonriendo pícaramente.

—Vamos contéstale.

—No.

—¿Seguro? —alzó una ceja y luego me miró descaradamente la entrepierna... en ese momento le odié con todas mis fuerzas.

—Te mataré...

Una macabra sonrisa se extendió por todo su rostro antes de que me abalanzase sobre él dispuesto a arrancarle sus asquerosos cabellos uno por uno.