OBSESIÓN SEXUAL ☆Yutae/ Taeyu☆

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[Pov Yuta.]

Jale el pitillo al váter y tiré de la cadena. Últimamente me entraban unas ganas impresionantes de fumar después de tener sexo, porque sí... Después de haberme follado a Taeyong y no acabar... ¡Que no he podido aguantarme! Estaba tardando muchísimo en sacar al puto perro y ya me dolía el pene de esperarlo....

Pero que eso no quiere decir que no le vaya a dar lo suyo en cuanto llegue, que conste...

Tosí un para de veces y abrí el grifo para beber agua, no me gustaba el regustillo ese que deja el tabaco.

Salí al salón, mamá estaba lavando los platos, me escaqueé de mala manera subiendo las escaleras en silencio. Cuando llegué a la habitación fui directo a mi mesita y encendí la lámpara, dejando la habitación iluminada por una luz tenue.

Me eché en mi cama boca arriba poniendo las manos detrás de mi cabeza.

Empecé a dar golpecitos en la cama con la pierna, otra vez con el tic, no podía evitarlo, cuando estaba nervioso no dejaba la pierna quieta.

Agarre el móvil y miré la hora. Hacia más de 40 minutos que Taeyong salió a pasear al perro... Estaba tardando demasiado.

Busqué su número en las llamadas recientes y le dí a descolgar.

Comunicando, miré la pantalla del móvil

"Usuario ocupado"

Fruncí el entrecejo extrañado, ¿ocupado?

Me encogí de hombros y dejé el teléfono sobre la mesa otra vez. Cerré los ojos y esperé, aparecería enseguida....

[....]

Abrí los ojos de golpe al oír un ruido bastante fuerte abajo.

Me incorporé en mis codos y miré a mi alrededor, seguía en mi habitación con la lampara encendida, Taeyong no estaba.

Cogí el móvil y miré la hora.

—¡Las dos de la madrugada! —grité con la voz tomada, carraspeé al notarlo.

Eran las putas dos de la noche y Taeyong seguía sin aparecer.

Me levanté y bajé.

Estaban todas las luces apagadas, mamá se había acostado ya. Papá estaba trabajando esta noche.

—¿Taeyong..? Susurré al oír otro ruido en la cocina. Me adentré y encendí la luz, estaba de pié en frente del microondas en marcha, estaba calentándose una taza con algo. — Joder, ¿que mierda estabas haciendo? ¿por qué has tardado tanto?

Se oyó el "clin" y Taeyong sacó la taza humeante, llevándosela a los labios enseguida, apoyado en el poyete de la cocina mientras bebía con los ojos cerrados. —Taeyong.. —insistí acercándome a él.

—No es asunto tuyo.

Me echó una mirada que me dejó helado.

Pasando a mi lado se sentó en una silla, poniendo la taza en la mesa.

Me volví y le miré extrañado.

—Oye Taeyong... No entiendo por qué...

—¡Joder Yuta! —dio una palmada en la mesa que me hizo abrir mucho los ojos. —¡que pesado! ¡Déjame solo! No me apetece follar contigo ahora si es lo que vienes buscando.

Hice una mueca con la cara...

Eso me dolió....

Que me dijeses esto cuando empezamos a acostarnos juntos, bien.... Porque era verdad.