C12: Accidente y sobrecarga.

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Derek se quedó literalmente paralizado cuando escuchó la voz de su próxima víctima a través de la puerta.

— ¿Estás ahí? — preguntó Mick ya que Derek no le respondía y necesitaba saber que había pasado con la investigación.

El señor Montblack seguía insistiendo y tocaba la puerta una y otra vez.

Derek, a punto de sufrir un ataque de pánico y presión, colgó el teléfono sin responderle a Mick y se dirigió a abrir la puerta donde se encontraba el señor Montblack esperándolo.

—Nos vamos a cenar con la familia, ¿vienes con nosotros?

—No quisiera incomodar ya que es una cena familiar —respondió él dudando y su nerviosismo se notaba, nisiquiera podía mirar al señor Montblack a la cara, miraba a un punto fijo por encima del hombro del señor.

—Me gustaría que vinieras con nosotros —le reiteró el señor Montblack y a Derek no le quedó más opción que aceptar.

Derek se dirigió a la habitación, se colocó una chaqueta y arregló un poco su cabello con sus manos, luego cerró la puerta de la habitación, bajó las escaleras y salió de la casa directo al garaje donde la familia lo esperaba. La señora Alice cerró la puerta y seguidamente fue a ocupar el asiento del copiloto en el auto. 

El señor Montblack empezó a conducir. La señora Alice encendió el radio, pero de forma inmediata  el señor Montblack posó su mano en el botón de Off y lo apagó.

— ¿Se puede saber dónde se encuentra el auto? —preguntó el señor posando su vista en el espejo retrovisor.

Ninguno de los dos contestó.

—Derek, ya que tu conducías el auto deberías contestar mi pregunta —exigió.

—Está en el taller —farfulló Derek.

— ¿Por qué? —el señor Montblack apretó sus manos contra el volante.

—Ocurrió un problema —contestó.

— ¡Habla! —exclamó enojado.

—Ayer estábamos a medio camino y se ha quedado sin gasolina, por eso llamamos a una grúa que nos trajó a casa y se han llevado el vehículo al taller para llenarlo y reponer una supuesta falla que tiene —informó Derek hablando de forma lenta y pronunciando cada palabra de manera cautelosa, esperó no recibir una mala respuesta.

El señor Montblack respiró hondo e intentó tranquilizarse. Estacionó el auto en frente de una casa color beige, no era tan grande como la del señor Montblack y su señora, pero tenía un jardín. Todos bajaron del auto y la señora Alice tocó el timbre.

Una mujer alta, rubia natural, ojos y tez claros; abrió la puerta. Llevaba puesto un pantalón de vestir blanco acompañado con una camisa y unas sandalias bajas, una sonrisa iluminaba su rostro. Con amabilidad los invitó a pasar y se presentó ante Derek como la hermana de Alice, su nombre era Helena Reese.

La señora Alice se fue a la cocina con Helena, el señor Montblack ya entablaba una conversación con el esposo de su cuñada y Lizbeth había desaparecido de la vista de Derek, dirigiéndose a una de las habitaciones de esa casa.

Derek se encontraba sentado en el sillón café, el cual era muy cómodo, y se dedicaba a mirar todo a su alrededor ya que no tenía nada más que hacer.

La puerta de la entrada se abrió, un hombre que cargaba dos bolsas del supermercado que contenían muchos ingredientes, entró en la casa y fue directo a la cocina para dejar allí las compras.

Luego se dirigió al salón y saludó al señor Montblack, pronunciando un "hola tío" y seguidamente estrechando manos con el mismo. Lizbeth salió también a saludarlo con un abrazo.

Experimento 366Donde viven las historias. Descúbrelo ahora