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Traductor: Sol

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Traductor: Sol

autor: 달달하게

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Cuando el rostro de Alexia finalmente estuvo cubierto, las sirvientas exhalaron lentamente un suspiro. Todos, excepto Vivian, que todavía parecía algo ansiosa mientras que las otras criadas solo esperaban que la joven se fuera de inmediato.

Parecía bastante incómodo tanto para la ama como para la sirvienta usar un sombrero al mismo tiempo, pero al menos sus identidades estaban más o menos ocultas. Como su trabajo estaba completamente terminado, las sirvientas inmediatamente abandonaron la escena. Como no planeaban estar acompañados por muchas personas en primer lugar, nadie más iría, solo excepto ellos dos.

Cuando finalmente pasó el momento crucial, el carruaje que abordaron los dos comenzó a moverse de manera constante. Mientras que los que estaban afuera finalmente pudieron tomar un respiro, había un silencio muy escalofriante en el interior del carruaje.

Estaba Vivian, que se había vestido elegantemente mientras trataba de mantener su postura rígida, en contraste con la relajada Alexia, que simplemente disfrutaba de la vista exterior.

¿Qué diablos estaba pensando Alexia? La razón por la que de repente quería visitar al Gran Duque y además de eso, no como ella misma, sino para ir allí como sirvienta, era simplemente sospechosa.

No era alguien a quien de repente le gustaría visitar al Gran Duque después de todo este tiempo. ¿Quizás esto se deba al sombrero que se enganchó ayer? Vivian apartó con cuidado la mirada de debajo de su propio sombrero.

Sin embargo, la mirada de Alexia seguía fijada en el exterior. En comparación con Vivian, que ya estaba acostumbrada a todo esto, era la primera vez que pasaba por todos estos caminos.

El camino hacia el Gran Ducado era simplemente estéril. No había nada que pudiera atraer la mirada de Alexia, que siempre había estado provista de cosas hermosas cuando era pequeña. A pesar de todo esto, Alexia aún mantenía su mirada fija en el exterior.

Cuando el carruaje finalmente llegó a su destino, Alexia volvió a ponerse el sombrero. Habitualmente, Vivian tenía que descender primero, pero esta vez fue absolutamente diferente. Mientras miraba a Alexia, que se había bajado primero, un sentimiento extraño surgió dentro de ella.

"¿Acabas de llegar?"

"¿Qué tal el Gran Duque?"

Vivian se limitó a hacer una breve pregunta, ya que estaba realmente consciente de Alexia, a lo que el mayordomo inclinó la cabeza cortésmente. Afortunadamente, parecía que en realidad no le estaba prestando atención a Alexia, que estaba justo detrás de Vivian.

El Gran Duque está en su dormitorio.

Fue hasta ayer que había sido alguien que andaba con ella sin pensar. Ella creía que su comportamiento seguiría siendo así cuando regresara al Gran Ducado también, pero ¿cómo podría simplemente regresar a su propia habitación? Cuando el mayordomo se dio cuenta de su mirada inquisitiva, comenzó a explicar en detalle.

"Parece que el Gran Duque ha perdido el resplandor del reciente viaje..."

"¿Está teniendo fiebre otra vez?"

El mayordomo inmediatamente asintió a la pregunta de Vivian.

Vivian, que comenzó a apresurar sus pasos por la preocupación, se detuvo de repente.

Alexia todavía estaba detrás de ella. No había duda de que Alexia estaba observando todos sus gestos con atención.

Vivian hizo un gran esfuerzo para frenar sus pies, que querían caminar apresuradamente, mientras levantaba la cabeza, bastante rígida.

"Por favor, guíame a donde está el Gran Duque".

"Entiendo."

La cortina de la habitación del Gran Duque aún estaba corrida cuando ella entró siguiendo al mayordomo.

Aunque el telón siempre estuvo abierto después de las recientes visitas de Vivian. Con una sensación como si estuviera regresando a su primera vez aquí, Vivian entró lentamente.

“Sobre esa criada……”

"Está bien. Déjala estar a mi lado”.

"Entendido."

Podría haber preguntado por la conducta de Vivian, ya que nunca traía una doncella, pero el mayordomo se limitó a asentir con la cabeza.

Luego, cuando el mayordomo finalmente se fue después de cerrar la puerta como siempre lo había hecho, Vivian dejó escapar un leve suspiro.

Vivian escaneó lentamente a Knox. Su rostro durmiente se parecía al de los muertos, pero se le estaban formando gotas de sudor en la frente. ¿Cuánto has sufrido en tu sueño?

Vivian apenas contuvo su impulso de estirar la mano y secarle el sudor.

"Mi señorita, por favor tome asiento aquí".

Como no había señales de que Knox se despertara, continuó susurrando con cautela. Justo cuando Vivian terminó sus palabras, Alexia ya estaba sentada en la silla en ese instante antes de mirar rápidamente a su alrededor.

"Para alguien de quien se dice que tiene la mayor riqueza y honor entre los clanes ahora, en realidad no hay mucho que ver".

Las mismas voces que se usaban para hablar entre sí sonaban mucho más dudosas de lo que esperaba.

¿Es esto lo que se siente al encontrarse con un doppelgänger(1)? Alexia murmuró con una expresión de disgusto todo porque sentía que estaba hablando consigo misma en el espejo.

"¿Qué diablos haces en esta habitación donde no hay absolutamente nada que hacer que él sigue llamándote todos los días?"

"Eso es... lo estoy cuidando".

"¿Enfermera?"

"Sí. Limpie su sudor o……”

Vivian habló antes de tragarse algunas de sus palabras. Todo se debió al hecho de que ella recordó el momento en que habían mezclado sus cuerpos bajo el pretexto de cuidarlo.

"... alimentarlo o incluso ayudarlo con algo".

"No tengo que hacer eso toda mi vida, ¿verdad?"

“Escuché que su enfermedad es meramente temporal. Además, hoy en día está mejorando mucho”.






Falsa Esposa Del Duque MontruosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora