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Medio mes más tarde, un convoy de mercaderes compuesto por más de treinta personas entró en la Villa Pordere del Imperio Austino. No había ninguna insignia de la casa en el carruaje, pero tenía un símbolo comúnmente usado por los comerciantes rosaianos. Significaba que no eran de una casa noble, sino de una de las muchas asociaciones de comerciantes de Rosa.
Como no tenían antecedentes nobles, su entrada tampoco alarmaría a los nobles locales. Dicho esto, para una aldea remota como la de Pordere, la llegada de un convoy de mercaderes seguía siendo todo un espectáculo para ellos, atrayendo a grandes multitudes.
Y su curiosidad también fue respondida con devoluciones. Pudieron deleitarse con la presencia de dos jóvenes extremadamente hermosos que se parecían a los gráciles elfos de los cuentos.
Se trataba del chico de cabello negro y la chica de cabello plateado sentados en el carruaje ubicado en el centro, que parecían una pareja no casada. En cuanto a la razón por la que la multitud pensó que eran una pareja, había tres razones para ello.
Uno, estaban compartiendo un carruaje después de todo. Dos, a pesar de que los dos eran muy guapos, las diferencias en el color de sus cabellos y ojos insinuaban que no tenían ninguna relación de sangre. Tres, tenían una atmósfera acaramelada entre ellos.
Estaban abrazados o tomados de la mano, casi como si estuvieran pegados el uno al otro. El chico de cabello negro todavía parecía sereno al respecto, pero la chica de cabello plateado tenía una clara mirada de felicidad en su rostro.
No había mujer casada en el pueblo que no estuviera familiarizada con la expresión de su rostro: era la mirada de una mujer en el período de luna de miel de su romance. Los chismes sobre estos dos jóvenes inusualmente guapos se extendieron rápidamente, y la teoría más popular postulaba que el chico de cabello negro era el joven maestro de una asociación de comerciantes y que estaba llevando a su prometida de visita.
Roel no estaba al tanto de todos los rumores que circulaban. Ya estaba acostumbrado a que Alicia se aferrara a él y, sinceramente, tampoco se molestó en explicarle el asunto. Incluso si descubriera que Alicia estaba poniendo intencionalmente ese acto íntimo en público, probablemente habría hecho la vista gorda.
Como un verdadero siscon azul, era inevitable que fuera extremadamente indulgente con su hermana pequeña. Hasta el momento, no había hecho nada por lo que él no pudiera perdonarla. Respecto a los 'asaltos nocturnos', simplemente lo atribuyó a una travesura infantil.
Cynthia y los demás no se atrevieron a hacer preguntas sobre su veredicto (después de todo, era un asunto privado de Roel), pero las miradas escépticas en sus ojos fueron más que suficientes para mostrar lo que pensaban sobre el acto de Alicia de subirse a su cama.
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El pequeño tirano no quiere encontrarse con un mal final - Parte 2
RandomComo lo dice en el titulo esta es la segunda parte, por lo que si no aun no viste la primera parte, te recomiendo que lo leas. Pero de todas manera pondré la sinopsis. En el momento en que el pequeño tirano de los nobles, Roel Ascart, vio a su herma...