𝗣𝗮𝗽𝗮́ 𝗦𝗵𝗶𝗺 ⟣ 𝗝𝗮𝗸𝗲𝗛𝗼𝗼𝗻 ⟢

🎀 : 𝖮𝗇𝖼𝖾𝖺𝗏𝗈 𝖣𝗂𝖺

─ ¿Me cuentlas un cluento? Pofavo papá. ─ JungWon jaló la manga de Jake, después de que éste le diera un beso en su frente y pensara en retirarse. El moreno se le quedó viendo y suspiro resignado a su tierno hijo.

─ ¿Un cuento? Hmm...veamos. ─ Jake pensó un poco. ─ ¡Ya sé!

Se volvió a sentar a un lado de JungWon. ─ Es un cuento sobre príncipes, y un reino muy muy lejano.

El pequeño azabache sonrió.

─ Vivía un rey mi gruñón. ─ Won le puso atención. ─ El reino se encontraba en un bosque, pero en aquel bosque no existía nada, el príncipe se encontraba solo...

─ ¿Sholo? Poblechito. ─ cerró sus ojitos en forma de comprensión.

─ Los animales se habían ido ya que estos encontraron otro dueño...el rey se enfureció, más, luego comprendió que su amargura los alejaba, así que trató de cambiar. ─ se recargó en el respaldo de la cama.

─ ¿Losh animalitos tambem? Oh...

─ Sí. Conforme los meses paraban, el rey se dio cuenta que algo faltaba en su gran pasillo... ─rio. ─ Él ya estaba viejito.

─ ¡Wow! ¡Qué glueno!

─ Así que salió de su castillo y emprendió una búsqueda por bosques encantados, ríos y mares, hasta llegar hacia un pueblo...era un lugar muy colorido y había dragones...así que, el rey feliz de haber encontrado por fin algo, empieza a socializar con las personas, algunas desconfían de él y... ─ su sonrisa desapareció. ─ Otras lo ignoraban, el rey muchas veces cayó en batalla, sin embargo, era como un balancín, un sube y baja en sí...

─ ¿De eshos jueguitos del parque? ─ preguntó el niño

Jake asintió. ─ Sí, pero tú sabes que tienes que jugar con otra persona ¿No? ─ JungWon asintió. ─ Bueno, el rey no tenía con quien hacerlo, y su vida dependía de su otra mitad, la parte que le ayudaría a levantarse del suelo e ir alto...

─ ¡Yo lo puedlo ayudlar! ─ soltó un pequeño chillido. El castaño solo de dio un pequeño beso en la frente.

"Lo hiciste"...

─ Y lo encontró, pero tuvo que pasar por muchas cosas...primero una guerra, luego otra, tuvo que esperar la aceptación, hasta que llegó ese día y encontró a la persona más hermosa sobre la faz de la tierra...tenía pómulos grandes y lindos, ojos que enamoraban y su corazón era muy grande, tanto que podría caber mucho, pero mucho amor... ─ soltó un suspiro enamorado. Jake no era así, sin embargo, se estaba poniendo un poco cursi con el cuento. 

─ Papá SungHoon es comlo él ¿Celto? ─ sus ojitos brillaron. ─ Él tiene unos clachetitos así. ─ estiró sus mofletes y los apretó. ─ ¡Tan bonitos!

─ Sí, así como SungHoon... ─siguió. ─ El rey se enamoró perdidamente de él, y los dos se encontraron, aquellas mitades habían puesto el balancín en un lugar donde el universo no podía conspirar contra ellos, uno donde su gravedad los mantenía en un estado neutro donde yacía amor y paz... Y solo pudieron encontrar lo que ambos querían y poco después, la madre luna les regaló el más hermoso obsequio de su amor; un bebé. El cual era la prueba de que ellos dos se amaban y se amarían.

JungWon tenía sus ojos cada vez más cerrados del sueño. Jake miró con ternura y le obsequió otro beso en su frente, para retirarse del lugar.

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Al entrar a su habitación, se duchó y se puso un pijama de decorados de gatitos. Se sentó en la cama y miró su celular, viendo las nuevas fotos que SungHoon había subido a su Instagram del tour con HoSeok. Jake sintió celos al ver la foto del rubio abrazando al alfa, sin embargo, se sintió más orgulloso de tener un omega tan valiente. Sin dudarlo, SungHoon era su otra mitad.

"El universo no puede simplemente conspirar contra
Nosotros, eres mi penicilina, mi balancín, mi otra mitad."