<<Capítulo Dos || En Problemas de nuevo>>

39 1 0
                                    

(La estrellita se ve mejor en naranja)

La semana pasó rápida y, en su transcurso, acordamos con Nahir para convencer a Mary de que corra con nosotras.

Ella se negaba, y casi me castra la noche en que salí con Harry y acepté su propuesta. Las pistas eran parte de nuestro pasado y, por consiguiente, del pasado de Marie, quien quería dejar todo atrás, y decía que ese lugar no iba a ayudarla, que le trae muchos recuerdos. A mí también me los trae y no son esa clase de los que quisiera recordar, es más, son el punto amargo de mis pesadillas pero vamos eso es pasado, yo lo he superado.

Fue difícil lo admito pero lo logré. Resumiendo, los días fueron algo duros...

Lunes

— Te doy cincuenta dolares si vas —Ofrezco.

— Suena bien... —Pausa dramáticamente y pone un dedo en su barbilla, como si lo pensara—. No.

Responde secamente.

— Si quieres le tiro este cupcake a aquella señora —Ofrece Nahir.

— Quisiera ver eso —Dice Mare entre risas.

Nahir -sin dudarlo- se lo tira con fuerza, no le pega en ninguna parte pero le cae en su taza de café caliente salpicándola por todos lados, la pobre quedo empapada. A nosotras nos echaron del lugar e íbamos riéndonos a las carcajadas.

— ¿Viste su rostro? —Dice Mare agarrando su estómago.

— Si, ¿Vas entonces? —Pregunto.

— No —Se ataca en carcajadas, mientras que Nahir y yo nos quedamos boquiabiertas.

Martes

— Mare, queridísima amiga mía —Me acerco a ella en clase.

— No voy a correr, Jadie —Dice sin rodeos.

Bufo.

— ¡Oh vamos mierda! —Exclamo cuando el profesor no me escucha por la bulla de la clase.

— ¡No voy a ir! —Pone resistencia.

— ¡Vas a ir así tenga que depilarte a cambio! —Le grito y lo piensa detenidamente.

Ah. Fuck.

Miércoles

— Mary —Se acercó Nahir a ella.

Tenia los auriculares puestos y leía un libro tirada en el pasto del patio escolar.

— Hermosa, tienes que ir, no puedes faltar. Anda, hazlo por nosotras —Dice en un tono dulce.

Pero ella parecía no notarnos.

— Ella no te escucha —Le digo a Nahir—. ¡Es el momento podemos secuestrarla!

— O mejor, podemos entrar a su casa y hurtar a Puddie Dos Orejas para amenazarla.

— Oye eso suena bien, de paso saquemos ese top rosa que me gusta y nunca me lo quiere prestar —Le digo emocionada.

— Las estoy escuchando —Contesta sin despegar su vista de las 50 sombras de Grey—. Y no van a tocar ni a mi peluche ni mi maldita ropa.

— Carajo —Escupo.

— Plan B —Nahir abre su bolso—. Mare, piensa rápido.

Le lanza un pote de nutella y ella lo agarra, yo la miro con ojos angelicales y ella parece convencida.

Niñas Mal (I) EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora