Love of Héroes ( Ziam)

8

Maratón 1/3

— ¡Me niego! — Grito Tony con molestia, Liam paso de ellos, yendo directamente a su habitación

— Amor — Steve intentó hablar acercándose con cuidado

— ¡Amor mis bolas, Steve! — Gruño el contrario — ¿Cómo aceptaron esa misión?

— Liam acepto, y yo iré con él — El rubio suspiro tomando las manos de su esposo — Serán solo unas semanas

— Si no recuerdas — Tony bufo apartando bruscamente las manos de las de Steve — La última vez que Liam estuvo cerca de ese hombre casi lo perdemos — Tony presionó sus labios — No quiero volver a sentir ese miedo, Steve, pero lo siento cada vez que Liam y tu van a una nueva misión — Bufo el moreno pasando lento sus manos por su rostro — No puedo

— Liam es un buen soldado — Steve se acercó tomando las manos de su esposo nuevamente — Él podrá con esto

— No es un soldado — Murmuró Stark — Es nuestro hijo, deberías recordar eso

Anthony se soltó, yendo directamente hacia la habitación de Liam, donde el castaño guardaba la ropa en su bolso, se acercó con cuidado, se dejó caer en la cama, soltando un bajo suspiro.

— Iré aunque no quieras — Murmuró el castaño menor dándole una mirada al mayor

— Es arriesgado ─ Murmuró Tony sentándose en la cama, tomando parte de la ropa de Liam para sacarla del bolso

─ Ustedes se arriesgaban más de una vez siendo yo pequeño ─ Liam se detuvo unos momentos, soltando un suspiro

─ Nosotros lo hacíamos para protegerte ─ Tony habló soltando un suspiro, se levantó con cuidado paseándose por la habitación — Yo creí que te encargaría de la compañía Stark

— La compañía Stark será mía — Liam se estiró soltando un bajo suspiro — Pero estoy siguiendo sus pasos, creí que con eso te pondrías orgulloso

— ¿Eres un héroe porque te gusta o porque de alguna forma te sientes obligado por nosotros? —  Tony preguntó tras un tiempo de pensar, empezó a observar los libros que Liam tenía repartido por la habitación.

Mecánica, ciencias, historia.

Negó lentamente sonriendo levemente, desde pequeño su hijo había sido un chico muy inteligente, un Genio, como él, Liam tenía las mejores características de Steve y él, y a Tony no hacía más que llenarlo de orgullo con el más mínimo esfuerzo.

«— ¿Y papá? — El pequeño Liam de ocho años  se acercó hacia Tony, frotando sus ojos con cansancio, mientras el pijama de Ironman que le quedaba grande se arrastraba a sus pies.

— Acaba de irse a una misión, cielito — Tony arregló su corbata — Happy cuidara de ti, tengo que ir a una reunión

— Yo quiero ir — Liam murmuró  acercándose tomando la mano de su “mamá” — No quiero quedarme con Happy, quiero estar contigo

— No irás conmigo — Negó el mayor — No podrás convencerme

Tras una hora Liam se encontraba en el auto junto a su mamá, movía sus pies contra el asiento, su mochila era llevada por su padre, mientras éste hablaba de algo por teléfono, Liam la verdad no le ponía atención, miraba por la ventana observando el camino.

Tras un largo viaje habían llegado a aquella empresa, el pequeño castaño fue bajado por el mayor, quien lo guío hacia adentro del lugar, se encontró con varias personas en trajes, quienes se acercaron a Tony para poder saber si aquel millonario necesitaba algo.