Mundos

Entre Música y Desmadre

César:

Llegó el gran día del cumpleaños de Alejandro Y… como ambos nos gusta una banda que va a tener tokin en el centro pues ya le pedí permiso a mi jefecita y la del Alex que nos dé chance de ir y pues pasarla chido, namás que ando con el pendiente de que luego si la raza se pone muy loca, pero ni pex me toca de guarura, le doy un beso a mi ama y me lanzó a buscar unas cosas, compré una bolsita de regalo, confeti, una agenda y le hice un dibujo de el y una de nuestras retas de básquet todo para la primera parte de su regalo.

Llegó a su casa muy temprano para que su mamá me abra la puerta, ella también tenía una cajita y subimos despacito a su cuarto su mamá tenía una bocina en una mano y el regalo en la otra cuando nos metimos a su cuarto Alejandro seguía dormido hasta que de la nada se escucharon las mañanitas de "estropajin"

Alejandro se despertó pensando que solo era su mamá y dijo:

- Ay mami, gracias - Alejandro no había terminado de hablar con su mamá
cuando se limpió los ojos y me vio ahí, al instante puso una cara nerviosa y
se volvió a acostar de lado tapándose la cabeza.

- ¡Ay amaaa! ¡¿Por qué no me dijo?! - dijo en tono de berrinche.

- Ay no seas chilletas ándale los dos son amiguitos, párate y dense su
abrazo-le dijo casi regañandolo.
Alejandro se puso de pie y creo que se comió su vergüenza pues traía una playera holgada y unos boxers de pollitos me abrazó, tomó mi regalo y supe que era mejor que saliéramos para que ya no se sienta mal. 5 min después bajó cambiado y su mamá le dió su 3era sorpresa.

- Aver mi amor… a mí me emociona ver a mi bebé crecer aún me acuerdo
cuando estabas todo chiquito y te bañabas en la pileta y ahora eres todo un hombre - dijo muy emocionada casi llorando.

- Ama… - dijo un poco avergonzado pero también emocional.

- Por eso… quiero que tú y César vayan
a ver a esa banda que tanto te gusta,
namás que no se metan en peleas ¿ok? Y tú César te lo encargo ¡eh!
¡Cuidense los dos mis niños! - dijo la señora abrazándonos y dándonos la
bendición antes de irnos.

Salimos de su casa y Alejandro parecía muy emocionado, se vistió muy diferente a lo usual ahora usaba un cinturón más colorido y se veía… un poquito emo la neta pero se veía chido.

- Y en lo que empieza todo este arguende ¿que se antoja carnal? - le pregunté

- Mmmm no se…¿porque no vamos por ahí a babosear?- me dijo muy serio.
Alejandro parecía bastante serio a pesar de estar a unas horas de poder escuchar a su banda favorita en vivo íbamos caminando hasta que encontramos a una señora vendiendo aritos y líquido para hacer burbujas… y recordé mucho cuando mi mamá
me compraba esos.

- ¿Quieres jugar con burbujas? - me interrumpió Alejandro de mi recuerdo.

-Ah… cómo crees haha me acordé namás de cuando estaba niño… antes de todo el despapaye que pasó después - le dije riendo.

Alejandro se puso un poco serio y compró unas.

- Pues yo quiero que juguemos un rato total es mi último día siendo niño
¿no?-me dijo entregándome el arito y el bote con jabón.

Pasamos un rato corriendo y riendo con burbujas incluso riendo porque una me reventó y me entró en los ojos después de lavarme seguimos hasta que el jabón se acabó y fue de las pocas veces en las que Alejandro sonreía.

- Ahora yo quiero llevarte a algo que me recuerda a mi - me dijo con una
sonrisa a la mitad.
Me dió un golpecito en el hombro y fuimos hasta un puesto donde una señora hacía pintacaritas, mis ojos se alumbraron pues era de mis cosas favoritas.