Cicatrices de libertad || Chanbaek

IV

Los ojos de Baekhyun se abrieron poco a poco cuando escuchó el sonido de la puerta siendo abierta; bostezó y se dio la vuelta viendo cómo un omega se llevaba los platos y dejaba una bandeja con nuevos.

En cuanto se fue, quiso levantarse para ir a comer, pero algo lo detuvo y al bajar la mirada vio que el brazo grande del alfa aún seguía encima de su cintura y realmente pesaba mucho así que no podía levantarse.

Frotó sus ojos para luego volver a cerrarlos, se acurrucó debajo de las mantas y sonrió un poco ya que en realidad le gustaba aquel calor del cuerpo del alfa. Era como si nadie pudiera hacerle daño así que lentamente fue quedándose dormido de nuevo.

Por otro lado, Chanyeol comenzó a despertar cuando sus intestinos dolieron por falta de comida; abrió sus ojos y lo primero con lo que se encontró fue con el pequeño omega bajo su brazo muy cómodo.

Lucía tan pequeño e indefenso que parecía que cualquier viento pudiera lastimarlo y algo dentro de él se movió, levantó su mano hacia su pecho ya que desde hace un tiempo no se había sentido de la manera en que se estaba sintiendo.

Nervios, estaba lleno de nervios.

Incluso sentir el pequeño cuerpo bajo su brazo era algo raro, él estaba acostumbrado a sentir cuerpos duros, ásperos y grandes; ahora se sentía fuera de lugar por tocar a un pétalo tan suave.

No supo cuanto tiempo paso, pero fue largo dónde admiró aquel rostro delicado con pestañas largas, labios pequeños color de fresa y una pequeña nariz respingada. Su mano viajo sola hacia la mejilla del omega y de inmediato se apartó al sentir demasiada suavidad.

Fue cuando los ojos del omega se abrieron que Chanyeol se alarmó y sin saber que hacer por haber sido descubierto, simplemente empujó al pequeño provocando que este ruede al suelo.

—¡Que rayos! —protesta el pequeño omega cuando el suelo choca contra su espalda. —Jodido bruto, —gime al empezar a destaparse.

—Come y no hagas ruido, —demanda para luego levantarse y tomar su plato con comida.

—Sí, sí, sin ruido, —rueda los ojos mientras frota su cuerpo adolorido para luego coger su plato.

Con un puchero enfadado se sentó junto a la cama para empezar a comer viendo que ahora ya no estaba más aquella masa blanquecina sino que ahora había granos, pollo y hortalizas con algo de queso.

—Come despacio, —susurra el alfa al ver cómo el omega mete rápidamente la cuchara una y otra vez a su boca.

Baekhyun solo se encoge de hombros, pero igualmente obedece así que se tranquiliza poco a poco y así puede disfrutar el sabor de la comida; por momentos mira de reojo al alfa quien estaba acabándose una pierna de cerdo

—Come despacio, —Baekhyun le dice a Chanyeol atacándolo con sus mismas palabras.

El alfa gruñe al ser regañado y resopla para luego desgarrar otro pedazo de carne mientras ve el pequeño cuenco con comida, el de él omega era mucho más pequeño que el suyo, sabía el motivo y era debido a que no lo consideraban importante.

Si él no hubiera dicho a uno de los guardias que le cambien la comida al omega, aún estuviera comiendo aquella masa de avena con agua que sabía muy desagradable. Tenía sus ventajas ser el peleador estrella de aquella arena.

Cuando acabaron de comer, paso un largo momento dónde estuvieron en silencio, el omega volvió a acurrucarse debajo de las mantas para dormir; Chanyeol por su parte se quedó sentado mirando al frente, el pasillo oscuro que solía guiarlo a una falsa libertad; a un sol radiante del que era preso luego de varias horas bajo él para reforzar su cuerpo a pedido de su amo.