NI LA MUERTE NOS SEPARARA (en Edición)

CAPITULO 32: REGRESO A ITALIA

Esta decidido mi nieta tiene que nacer en Italia- mi madre empezó con lo mismo una vez mas

-Mama...- me quejo ante su terquedad

-¿Que tiene de malo?- se indigno mi madre- tu y Gianluca nacieron allá, no entiendo por que mi nieta no

- Tu madre tiene razón — Gianluca sonreía divertido por la discusión que tenia con mi abuela

-Tu cállate — amenace apuntando mi puño en dirección a su nariz

-Ok no dije nada- sonrió el levantando los brazos en señal de paz

-Ya vez hija el también me apoya- aplaudió mama de forma aniñada- ya esta dicho, regresamos a Italia.

Por mas que grite, patalee o me opuse nos encontrábamos sentados en la sala de primera clase esperando abordar el vuelo de regreso a Italia

-¿Podemos arrepentirnos?- susurre a Gianluca- Ya se puedo escapar, tu la distraes y yo corro

-Ya cállate- susurro divertido

-Te odio- susurre para luego sacarle la lengua

-Me amas lo se- susurro el con la típica sonrisa burlona

-No estés tan seguro- susurre y la pequeña pateadora despertó con un gran golpe

El viaje de cinco horas pareció tan largo que me dolía la espalda de estar sentada, creo que parte de aquel dolor era mi princesa que no había parado de moverse desde que salimos de Londres. Quería golpear a alguien pero no sabia el por que, bueno creo que si te matan los pies y la espalda es justo que quiera hacer pasar a alguien por el mismo dolor para que comprendan que el embarazo no es del todo bonito.

-¿ Te sientes bien?- pregunto Gianluca cuando estábamos por aterrizar

-Si- si gilipollas voy a estar bien con más de dos kilos atados a mi columna

-No parece- volvió a preguntar

-Si no dejas de preguntar te voy a volar los dientes de un solo golpe- amenace apretando los dientes

-YO solo preguntaba- bufo algo molesto- gruñona

-Idiota- susurre observando por la ventana del avión

Llegamos a Italia y la sensación de querer correr aumentaba pero Dios ¿ Como iba a poder correr con aquel vientre que dentro de poco haría que le dijera adiós a mis pies?

-Esta noche nos quedamos en un hotel ya mañana veremos que hacemos- susurro mi madre al ver lo tarde que era

-Mama ¿puedo opinar?- me Trevi a hablar- Quiero ir a Venecia

-¿Venecia?- pregunto mi madre sorprendida, la única que sabía el significado de mis palabras de Camille

-Si mama- finalice- por favor

-Bueno Venecia será- hablo mi madre y sonrió con tristeza

-MI opinión no cuenta...- levanto la mano Gianluca- Yo creo...

-TU cállate- Camille, mi madre y yo hablamos a la misma vez

-YO solo decía- se defendió apenado un tonto Gianluca

Luego de aquello estallamos en risas, mi madre tenia en sus piernas a un inquieto Alessio que luchaba para ser liberado y yo tenia a su inquieta hermana que aunque ya se haba calmado un poco seguía dando guerra.

Llegamos a un bonito hotel en el centro de la cuidad, comí por vivos y por muertos para luego llegar a la cama y caer rendida entre tanto ajetreo del día. Lo poco que supe sobre Jessica fue que intento suicidarte y que se disparo en el estomago pero para su mala suerte esto no había servido ya que seguía viva, según logre saber el medico que la atención no iba a quedar bien ya que al salir la bala daño la medula espinal así que no sabían que consecuencias iba a traer.

Daniel recibió en el pecho, no le hizo daño al corazón ya que al parecer el estúpido que disparo no diferenciaba bien el lado derecho del izquierdo en otra persona que no fuera el, Alicia se lo llevo a Paris para que sea mejor atendido y se recupere lo que quería decir es que no sabría de el en mucho tiempo, cada noche rogaba por su mejoría.

Con respecto a Gianluca buen el seguirá siendo el mismo de siempre así que nada gana peleando con mis sentimientos así que solo me queda tratar de tranquilizar sus estúpidos impulsos, veremos que pasa después.

Alessio, mi amado hijo, el bueno aun actúa con recelo en cuanto a su padre; ambos son igual de celosos ya que si estoy cerca de uno el otro se encabrona y terminan mal liados.

Mi madre, mi sexy y adorada madre, aunque rondaban los cuarenta años parecía mi hermana siempre tan hermosa y sofisticada soportando al idiota y buen mozo de mi padre el cual se parecía tanto a William 

Tenía a mi familia, pero no completa...