Parte 8

1.6K 177 22
                                    

—¿Y? Algo más.

—Sigues siendo un desalmado —dijo con una sonrisa quitándose sus lentes para limpiarse sus lágrimas, Perú vio sus ojos azules tristes para desviar su mirada con pesadez y molestia, esos ojos diamantes eran algo que siempre le gustó ¿USA estaba usando eso para captar su atención?

—Ponte los lentes de una jodida vez —gruñó cruzando sus brazos —¿No crees que estás haciendo mucho lío por un problema ajeno? ¿Desde cuándo te interesa el bienestar de los demás?

—Eso no te incumbe.

—Mmm~ ya veo, ja ¿Qué quieres de Kazajistán? ¿Dinero? ¿Amor? ¿Sacarme celos~?

—Uno no tropieza con la misma piedra dos veces.

—Oh USA~ No me hagas reír —bufó ensanchando su sonrisa —tú has tropezado tantas veces con esa piedra que me es difícil contar todos esos errores~

—Sí... Tienes razón, mi error fuiste tú, si supiera que esto pasaría, que me lastimarías así, créeme que hubiera alejado mi dinero y mis sentimientos.

—El dinero lo es todo, y lo sabes —pronunció mirando sus uñas despreocupado, ignorando la mención de los sentimientos que el estadounidense le tuvo alguna vez.

—Concuerdo contigo en eso pero México no tiene dinero~ ¿Ha él porqué lo querrás?

—Sencillo, la tiene más grande que tú —USA sonrió ante esa respuesta, se la esperaba, pero hablando en serio ¿Qué le veía Perú a México? Físicamente él y el mexicano se parecían, económicamente él era mejor, en lo romántico se podría decir que ambos estaban empates, entonces, cuál era la diferencia...

—Sí, sí, sí lo que digas, me tengo que ir, no pienso escucharte más, ya te advertí y con eso me es suficiente.

—Ay por favor USA ¿Qué me harás si no me alejo de Kaz, ¡Eh!?

—Yo no haré nada —respondió dejando confundido al peruano —Adiós.

[...]

—¡Japón! —gritó el mexicano, la japonesa dejó su taza de café en su mesa, caminando hacía la puerta con pesadez y sueño, tenía unas ojeras horribles, conformando su cara de pocos amigos.

—¿Quéeeee? —preguntó de mala gana abriendo la puerta —Oh... eres tú, ladrón.

—¿Puedo pasar? —habló sonriente.

—Sí te digo que no, igual pasarás ¿Verdad?

—Estás en lo cierto, Japón —dijo el latino.

—Sí se trata de Perú o alguna cosa relacionada a él no quiero saber nada —respondió frunciendo ligeramente su nariz. El mexicano asintió sin dudar, Japón soltó un suspiro pesado haciéndose a un lado para que el tricolor pasara a su hogar, dentro de este todo estaba oscuro y habían por su suelo un montón de embaces de fideos instantáneos vacíos.

—Vaya, tienes una bonita sala.

—Se me pegaron las costumbres americanas, me da flojera limpiar.

—Graciosa.

—¿Para qué viniste?

—Bueno, quiero que me ayudes en algo.

—¿Qué cosa? Si está fuera de mi interés te puedes ir yendo de aquí.

—Quiero conquistar a alguien.

—Primero, dije que no quería saber nada de Perú, segundo, ¿Por qué recurrir a mí? Y tercero, la puerta sigue abierta, te puedes ir largando después de responder.

—Escucha Japón —el mexicano le interrumpió, sorprendiéndola —Perú es lo que siempre quise, solo necesito que de verdad, DE VERDAD me ame.

—No hago milagros, Mex.

—¡POOORR FAVOOOR! —imploró de rodillas ante la mujer.

—AYYY, bien pero me debes una grande.


✧ *。🍙 。* ✧


𝑻𝒖 𝒕𝒆 𝒍𝒐 𝒃𝒖𝒔𝒄𝒂𝒔𝒕𝒆 [🇲🇽 𝒙 🇵🇪]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora