One-shots Marichat

01

La noche era hermosa, las estrellas brillaban al igual que la luna, pero no le preste tanta atención al paisaje, estaba mucho más concentrado en ella. En como su piel blanca resaltaba en la oscuridad de la noche, como sus ojos azules tenían un brillo especial que mostraba ilusión de lo que estaba hablando 

—¿Me estás escuchando?— cuestionó frenando su relato

 —Claro, continua— respondí, pero me resultaba difícil concentrarme en lo que decía.

Estaba admirando como movía sus manos exageradamente para seguir hablando y el como con su dulce voz me arrullaba, era demasiado dulce, tanto que formó una sonrisa tonta en mi rostro. Esa noche me sentía tan confundido al momento de esa visita, Marinette se me hacía cada día más hermosa e interesante, se me hacía curiosa y bastante sincera al igual que frágil, y como sentía que era una de las personas más importantes de mi vida.

Pero yo no quería admitir mis sentimientos hacía ella, tenía miedo de perder a esa única persona que es capaz de entenderme y escucharme de verdad, es muy curiosa la manera en la que me atraía, ya que a pesar de que sabía que algo en mi manera de verla había cambiado, no sabía bien que era, pero me agradaba. Además ella es de las pocas personas que esbozan una sonrisa completamente sincera al verme; No una falsa por compromiso o por temor a que les haga algo por ser una "celebridad" cuando en realidad soy más un esclavo.

Me ponía nervioso cuando de manera accidental rozaba sus manos, o cuando la veía entrar todos los días a la escuela. Era algo completamente nuevo para mí todos estos sentimientos que tenía por Marinette y que cada día se volvían más fuertes. Pero eso no detuvo que frecuentara ir a ese balcón a escucharla o ver una película... o hacer cualquier otra cosa para despejarme y disfrutar de su compañía.

—¡Chat! ¡pensé que hoy no ibas a venir!— exclamó dejando de lado el cuaderno que tenía en sus manos 

—No puedo abandonar a mi princesa ¿O si?— entré a su habitación y me senté junto a ella, pude observar un hermoso diseño de un vestido —¿Lo hiciste tú?— pregunté tomando el cuaderno mirándolo de manera curiosa

—¿A qué se debe la pregunta?— cuestionó con una sonrisa en sus labios, fijando su mirada en mi 

—¿Siempre contestas una pregunta con otra?— bromeé a lo que ella soltó una pequeña carcajada 

—¿Tu que crees?— respondió en el mismo tono

 —¿Podría ser?— ella rió nuevamente tomando el cuaderno y señalando la esquina derecha donde se encontraba su firma 

—Estuve los últimos tres días perfeccionando el diseño— dijo soltando un suspiro, mi mirada se posó en sus manos y luego en sus ojos haciendo que me pierda en ellos y acercándome

—¿P-Pasa algo?— murmuró a lo que me aleje un poco

 —Lo siento, solo estaba pensando— susurré sonriendo un poco al verla un tanto nerviosa