—Tu... ¿Me amas?— dijo anonadó mirándome a los ojos, quede quieta en el lugar, no podía creer que lo había dicho —Yo te amo— respondió para tomarme de las manos —En serio te amo muchisimo princesa, nunca pensé sentir un amor tan grande por alguien— con suma delicadeza tomó un mechón de mi cabello y lo acomodó detrás de mi oreja, él sonreía mientras me acercó a él tomándome de la cintura —Y creo que nunca amaré a otra persona tanto como te amo a ti— susurró cerca de mis labios >>¿acaso estoy soñando?<< me dije en mis pensamientos al sentir que acariciaba dulcemente mi mejilla —¿Puedo besarte?— preguntó en ese mismo tono bajo
—Siempre has tenido permiso para hacerlo— respondí de igual manera, suavemente tomó mi mentón y acerco mi rostro al suyo, miraba mis labios así como yo los de él, la cercanía era tanta que sentí el roce de sus labios con los míos, hasta que pude sentir como se juntaban completamente formando así un beso, uno anhelado, suave y dulce, pero al mismo tiempo ansiado y profundo.
Mis manos se dirigieron a su cuello acercándome aún más a él, de manera lenta se separó de mí, pero no por completo —Te amo Chat Noir— dije mientras lo abrazaba
—Lo sé, ahora lo sé— murmuró mientras acariciaba mi cintura
—¿Entonces, que somos?— cuestione mirándolo a los ojos
—¿Tenemos que definir eso ahora? quiero disfrutar tu compañía— dijo chocando nuestras narices, me limité a sonreír y cerrar los ojos
—Nunca pensé que me enamoraría de ti Chat— mencioné soltando un sonoro suspiro —Pero... Tus lindos ojos verdes me atraparon, tu encantadora sonrisa me cautivo y todas tus cualidades me parecen increíbles, supongo que tenías razón, tarde o temprano iba a caer rendida a tus pies— solté una pequeña risa y sentí como él también lo hizo
—No puedo creer que en serio esto este pasando, princesa— contestó —No puedo creer que correspondas mis sentimientos, los llevo guardando hace tanto, desde que descubrí que era lo que sentía por tí, no pude evitar sentir miedo, miedo de perderte— sus palabras me generaron la necesidad de mirarlo a los ojos —¿Puede esto durar para siempre?— preguntó a lo que le dedique una sonrisa
—Quisiera que este momento nunca acabara— susurré.
A la noche siguiente Chat regresó, venía más animado que de costumbre, sostenía una rosa roja en sus manos, y cuando aterrizó en mi balcón me la extendía
—Una hermosa flor para una hermosa dama— sentí mis mejillas arder ante el comentario, tomé la rosa en mis manos y planté un efímero beso en su mejilla
—Gracias Chat, es hermosa— susurré
—Creo que tú y yo tenemos una conversación pendiente, ¿No es así?— asentí con la cabeza y lo invité a pasar a mi habitación, nos acostamos en mi cama y me acurruque en su pecho
—¿Que somos?— preguntamos ambos al mismo tiempo
—Yo quisiera poder llamarte mi novia, princesa— dijo mientras abrazaba mi cintura
—A mi también me gustaría llamarte mi novio, pero ambos sabemos que esto debe ser un secreto— él sonrío al escuchar eso
—En ese caso ¿Me permitirías tener el honor de ser tu fabuloso, genial, servicial e increíblemente guapo novio?— dijo en un tono un poco burlón
—Si me lo pides en serio, tal vez responda que si— contesté apartandome de él quedando sentada en la cama
—Ok, esta bien ¿Quisieras ser mi novia, preciosa?— sonreí y me acerque a él
—Bien, pero puedes hacerlo mejor— respondí burlona
—¡Vamos Marinette! Es en serio, no me pongas a sufrir ¿quieres?— solté una pequeña carcajada
—Lo siento Chat, ¡pero tú te lo buscaste! siempre estás haciéndome bromas— Chat Noir tenía una cara casi que de fastidio, estaba desesperado por obtener una respuesta —Si sabes que voy a decir que sí, ¿por qué haces la pregunta?— dije sonriendo, sus ojos tenían un brillo especial, uno que creo nunca había visto
—Porque así estás aceptando todos los términos y condiciones, así que responde— contestó
—Sí Chat Noir, quiero ser tu novia— respondí a lo que él sonrío y me acercó a él
—¿Ves? no era tan difícil contestar— susurró de manera coqueta para darme un beso corto en los labios, y a pesar de que ambos queríamos que fuera más largo, el anillo de Chat empezó a emitir el clásico >beep beep< —Me tengo que ir, prometo regresar mañana— dijo para darme un último beso e irse, dejándome con una cara de tonta.
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One-shots Marichat
FanfictionSIGO ACTUALIZANDO A PESAR DE QUE DIGA COMPLETO Estos son one-shots Marichat para calmar el hambre de nuevas historias y de consumir este contenido. Esto es más que todo para calmar el tener mis escenarios ficticios y plasmarlos en un escrito.