Episodio: 8

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EN PASADO DE SIR. FRANCISCO

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Sir. Francisco: -esquiva la espada— ¡Si es pelear lo que quieres. . .


Haddock se sube arriba de un escritorio—. . . estás frente a tu rival.

—¿Pelear con quién? —preguntó Tintín y se agachan antes que lo lastime con la espada.

—A luchar. . .


—. . . Rackaham el rojo.

Empezó la pelea entre espadas, mientras que el oponente tenía la capa de los borde en llamas. Utilizaba dos para lanzar lo hacía el cada movimiento, pero Sir. Francisco lo esquivaba, pero un pesado del mástil casi de cae. 


Al capitán casi se le cae el ventilador del techo arriba de él, pero llegan una personas para detenerlo.

—¡No esperen! —Erica detiene a la seguridad.


Sir. Francisco, lo rodearon de espadas.


Haddock en cambió a el lo rodearon armas.

—Esperen —dijo Tintín frenando a los demás— capitán —aleja las armas.

—Finalmente recuerdo todo, todo lo que dijo el abuelito. El unicornio —dijo Haddock, apoya su mano en el brazo de Tintín— fue conquistado, los piratas tomaron la posición del barco.

—Todos se rindieron —dijo Erica.

—El abuelito dijo que Rackaham el rojo llamo al Francisco el perro del rey. Un perro cazador que recuperara el botín que le pertenecía.


Sir. Francisco los hombres lo ataron en el mástil.

¿Por qué perdería el tiempo? Con ron, tabaco y come lanza táctiles. Cuándo tú lleva una carga mucho más valiosa abordó ¿Dónde está? —preguntó Rackaham.

Tendrás que asesinarme primero.

No, no, no primero —apunta su espada dónde están los demás— antes irán tus hombres.


—Para salvar a sus hombres —se pone de pie y se da la vuelta— y decisión revelar el cargamento secreto.

—¿Dónde estaba? —preguntó Erica.

Haddock se acerca a una biblioteca y mueve un libro.


Sir. Francisco mueve el libro y miran detrás de ellos que una puerta secreta de abre en el piso abajo del barco. Y Rackaham el rojo baja y el gran tesoro.


—Cuatro quintales de oro, joyas y otros tesoros —dijo Haddock.


Rackaham el rojo se agacha para tanto y tocar el tesoro, después apunta con su espada— ¡Mantén a sus hombres!

¡No Rackaham, no! —los tipos lo detienen y mira en un agujero ve como tirana sus hombres al mar— ¡Rackaham me diste tu palabra! ¡Rackaham! ¡Rackaham!

Las Aventuras de Tintín "El secreto del Unicornio"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora