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Wanda POV

Entre a casa y pude escuchar las voces de los gemelos a los lejos, sonreí de inmediato mientras dejaba mis llaves en su lugar correspondiente, pude observar por la ventana cuando el auto de T/N dejó mi calle. Camine hasta la cocina y pude ver a Billy y a Tommy sentados.

— Hola hola — saludé mientras dejaba mi bolso en la silla.

Ambos niños corrieron a mis brazos, mientras me saludaban llené su cara de besos, entre risas pudieron zafarse y regresaron a su lugar inicial en la mesa, ambos se enfocaron en sus tareas.

— Es tarde, ¿no lo crees? — cuestionó Vision.

— Estaba trabajando — pasé a su lado para poder lavar mis manos.

— Que raro, pensé que terminabas de trabajar a las 5 — el rubio miró el reloj que marcaba las 7:41.

— Tengo trabajos que calificar, eso es todo — sequé mis manos e intente regresar con los niños cuando su cuerpo se posicionó frente al mío.

— No recibí un beso de bienvenida —

Rodee los ojos y me acerqué a el apenas tocando sus labios — ¿Ya cenaron los niños? —

— Por supuesto, me encargué en cuanto Tommy me dijo —

Yo asentí y me senté junto a los gemelos — Bien, cariño, dijiste que tenías problemas para terminar esto —

Tommy asintió — Pero esta bien mamá, Billy me explicó y pude entenderlo —

Miré a Billy y el pequeño me sonrió, pasé mi mano por su cabello y dejé un beso en su mejilla, hice lo mismo con Tommy.

Subí a mi habitación y comencé a cambiarme por algo más cómodo para poder dormir y de alguna manera en mi cabeza no estaban mis increíbles hijos, que sin duda alguna eran lo más maravilloso que le había sucedido a mi vida. Tampoco estaba mi estupendo trabajo, la paga era buena, grandiosa podría decir, además de que tenía un horario bastante flexible, estaba ubicada en un gran vecindario y tenía colegas muy amables. Ni mucho menos pasaba por mi cabeza el hecho de que mi matrimonio estaba siendo un completo fracaso, conocí a Vision cuando empecé la universidad, era un joven tan amable y me hacía sentir como si fuera la única mujer en el mundo, de algún modo estar con el era una completa seguridad y me sentía bien con el, comenzamos a progresar en nuestra relación y al poco tiempo ya vivíamos juntos, en ese momento de mi corta vida sentí que Vision era el indicado, así que la posibilidad de formar una familia con el ya había sido planteada en mi cabeza, por supuesto que cuando me enteré que estaba embarazada no creí que las cosas cambiarían tanto, al principio Vision estaba emocionado con la idea de ser padre y todo salió justo como lo había imaginado, nos casamos cuando los gemelos tenían un par de meses y desde entonces hemos pasado los últimos 8 años juntos. Las cosas no estaban mal antes, todo empezó cuando decidí que quería continuar con mi carrera, Vision siempre fue un gran apoyo, sin embargo me recriminaba el hecho de que los niños tenían que pasar algunas tardes con alguna niñera o en casa de algún amigo, después de eso las cosas se pusieron tensas, el pasaba menos tiempo en casa y más tiempo en la oficina, yo ocupaba mi mente en dedicarme a la docencia y a mis hijos, a veces cuando las cosas por hacer se me acababan me encontraba llorando por las noches en una cama vacía. Era claro que Vision y yo ya no estábamos en la misma sintonía, algo dentro de mi me decía que Vision ya había encontrado a alguien más, pero nunca tocamos el tema y yo simplemente deje de culparme por eso. Pero a pesar de todo esto, aún tenía un cierto cariño por el, siempre lo haría y estaba agradecida con el por darme lo más preciado que tengo. Sin embargo algo había cambiado y todo había empezado desde que T/N Strange me miró, con sus mejillas sonrojadas y la particular seguridad con la que hablaba, me gustaba pasar tiempo con ella y cuando no era así, me encontraba deseando encontrarme con ella, quizá era el hecho de que por primera vez en años me sentía escuchada, T/N era un misterio que ansiaba poder descifrar.

[...]

Las siguientes semanas tomaron su curso normal y por supuesto T/N se había presentado todos y cada uno de los días a nuestras citas.

— Te felicito T/N, hemos terminado la semana con éxito — le sonreí a la joven que estaba sentada frente a mi.

—¿Sabes? Odio tu trabajo, la mitad de estos adolescentes no tienen ni idea de lo que la palabra creatividad significa, ¿así esperan un 10 de mi parte? — T/N me mostró el trabajo que estaba revisando.

Yo me reí y me incliné hacia ella para quitar la hoja de sus manos — Que bueno que no son tus alumnos, serías una maestra malvada —

— Solo estoy siendo honesta — se encogió de hombros.

— Debes darles tiempo, muchos de ellos ni siquiera creen que tengan algo poético dentro de ellos —

T/N me miró curiosa — ¿Crees que todos tenemos algo poético? —

—Por supuesto que si, está oculto en la mayoría de casos, solo los que son afortunados pueden conectar con esa parte de ellos. Mi trabajo es hacer que todos puedan encontrar esa parte — explique con tranquilidad.

T/N suspiró y dejó caer su cabeza en el respaldo — No entiendo como lo haces... —

Fue mi turno de mirarla con curiosidad — ¿Qué cosa? —

—Eso, siempre tener algo bueno que aportar y saber exactamente qué decir —

Comencé a reír — No lo sé, no siempre acierto en lo que tengo que decir, pero supongo que con el tiempo comienzas a descubrir cómo encajar en el momento —

T/N me regaló una encantadora sonrisa e inmediatamente aparte la mirada, me enfoqué en el papel que estaba sobre la mesa sin embargo no logré concentrarme, podía sentir a la joven mirándome.

—¿Sabes? Aún no he revisado los ensayos de Moby- Dick, estaba pensando que quizá podrías revisarlos junto a mi, sé que me dijiste que te gusta Moby-Dick — dije sin levantar la mirada.

— Eh... yo — el celular de T/N vibró y yo decidí mirarla. — Me encantaría pero tengo planes con Romanoff... —

Fruncí ligeramente el ceño, claramente había notado que T/N y Natasha pasaban mucho tiempo juntas, la pelirroja siempre estaba a su lado y gran parte del tiempo tenía sus manos sobre alguna parte del cuerpo de T/N, era posible que quizá ellas estuvieran en una relación.

Asentí con tranquilidad — Muy bien —

— Pero podría cancel... — la interrumpí.

— No, está bien, no te preocupes, acabo de recordar que también tengo planes con mi esposo —

T/N bajó la mirada y asintió — Debo irme, profesora Maximoff — se levantó — gracias por su tiempo, la veré el lunes —

—Hasta el lunes, señorita Strange —

Con eso T/N salió de mi oficina y en cuanto cerró la puerta me dejé caer por completo en la silla, ¿por qué había hecho eso? Vision estaría de viaje todo el fin de semana, Billy y Tommy estarían en un campamento, era obvio que no tenía ningún plan con ningún esposo. Intente llevar mis manos a mi cara pero la imagen del brazalete en mi muñeca hizo que me detuviera. ¿Qué demonios estaba pasando conmigo?

Teacher's Pet [Wanda Maximoff]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora