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Sam

Comence a abrir mis ojos lentamente gracias al sonido de la alarma, maldición como odiaba esa cosa, iba a apagarla pero alguien se me adelantó, pasando por sobre mí y apretando el botón callando ese aparato del infierno.

Bostece ligeramente estirando mi cuerpo y cuando pude abrir bien mis ojos pude ver a Sun sentado a mi lado mirandome fijamente.

Caí en cuenta de que era Sun asi que me levante rapidamente y atrape su cara entre mis manos.

-Estas bien?- le pregunte mientras acariciaba el leve moreton que le habia dejado en el ojo izquierdo.

-Si si, estoy bien- sonrió de manera dulce y pusó sus manos sobre las mias acariciandolas tambien-Supiste manejar la situacion bastante bien-

-No fue asi, me descontrole y les hice daño-

-Él trato de lastimarte tambien asi que basicamente fue en defensa propia-

Ambos reimos pero la verdad es que yo me encontraba bastante nerviosa, en sus muñecas habian quedado las marcas de las sogas que lo apretaron anoche.

-Tratare de ser mas delicada la próxima vez, lo prometo-

Sun sonrió y abrazo mi cintura posando su cabeza en mi vientre.

-La verdad es que le agradaste bastante, nunca nadie se habia atrevido a golpearlo-

Comence a acariciar su cabello mientras este seguia acostado abrazándome.
Estuvimos asi por un par de minutos hasta que ya era hora de cambiarse, los niños no tardarían en llegar.

Con el paso de las horas un pensamiento no dejaba de llegar a mi cabeza, no podia dejar de pensar en Sun, cada cierto tiempo lo miraba y mi corazón se aceleraba bastante... Se sentia bien estar cerca de él.
Pero no podia enamorarme de él, no seria justo para ellos. Atribuí mis sentimientos a la falta de cariño que me rodeaba antes de llegar aquí, no debia ilusionarme... Apenas llevaba aqui tres días, no podia dejar que algo tan peligroso como el amor arruinara todo.

Mi trabajo era bastante bueno, divertido y acogedor, los niños son adorables... Esa vida llena de amor, inocencia e ilusiones que yo envidiaba ellos la poseían, se veian tan puros y amados...
Alguna vez me pregunte si yo tuve esa misma aura de pureza, pero la respuesta siempre era negativa.

Niña abandonada, padre borracho y madre callejera...

Cuando veia a estos niños podía sentir una suave nuve que los rodea, suave y esponjosa.

En cambio si miró mi pasado, a mi niña interior solo la rodeaban arbustos con espinas y alambres con puas.

Sun era todo lo contrario a mi, era ver un radiante sol capaz de alegrar hasta a la persona mas triste, entregando cariño y felicidad a todos los que le rodean... Y aun que tenia su oscuro secreto este no le quitaba brillo a su interior, es mas... Lo hacia aun mas especial.

¿Y que hago yo aqui?

Mire a mi alrededor, tratando de hacer lo mismo que Sun... Pero solo era una mascara para imitarle... Desearía poder entregar amor de verdad, su cariño es genuino... El mío no es mas que una fria y calculada imitación. Y a pesar de que tratara de negarlo, en el fondo lo sabia muy bien.

Una pequeña niña interrumpió mis pensamientos y la verdad agradecí que lo hiciera, mi mente solia jugarme en mi contra.
La niña no parecia tener mas de 5 años, estiro sus brazos hacia arriba y la cargue dandole un par de vueltas.

-Buenas tardes princesita-

La niña río y acarició mi rostro con preocupación, la mire confundida y toque mi cara, estaba húmeda.

Lo que sentimos? (Tn x Sundrop)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora