Chang Bin piensa que ya nada puede empeorar después de la forma en que terminó con su ahora ex novio, pero se equivoca, ha olvidado las llaves de su casa y nadie estará hasta la noche, asume que pasará el día llorando en la acera hasta que ve al chi...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
BangChan lavaba los trastes junto a su madre, lo hacía en silencio, aunque su mente estuviera almacenando muchos pensamientos en torno al día anterior, secó otro plato y lo acomodó. Soltó un suspiro de forma inconsciente, aquella acción llamó la atención de su progenitora.
—¿Y cómo está ChangBin? —La mujer soltó en un tono despreocupado.
BangChan pardeó varias veces ante la sorpresa por la pregunta que le acababa de hacer su madre. Se puso nervioso un poco pensando en que esa mañana había recibido un mensaje del chico diciéndole que había dormido bien, pero él presa del pánico de que viniera un reclamo o exigiera una explicación por lo que sabía que estuvo a punto de hacer, estaba seguro que ChangBin se había dado cuenta que planeó besarlo, tampoco podía olvidar que lo había descubierto observándolo.
—¿A qué viene la pregunta? —respondió nervioso mientras secaba un vaso.
Su madre solo se encogió de hombros y siguió fregando otros más, antes de volverse hacía su hijo.
—Estás aquí conmigo cuando siempre estás con él. Es extraño, ¿no crees?
—Está ocupado —dijo buscando cortar ya la conversación o de nuevo se vería inmerso en una lucha interna como la que había tenido esa mañana.
No sabía si ChangBin estaba realmente ocupado, había dicho eso para evadir dar explicaciones del por qué no estaban juntos como usualmente, siempre pasaban los fines de semana encerrados en su habitación, ya fuera jugando o él trabajando en sus proyectos mientras el menor pretendía estudiar, aunque solía quedarse dormido. Soltó un suspiro, nunca lo había dejado en visto. Pero tenía miedo de ser bombardeado con preguntas que no quería responder.
Hizo una reflexión, ¿en qué momento había empezado a suceder? Recordó cuando se conocieron, fue una petición de la hermana mayor de ChangBin, no dudó en prestarle ayuda al chico, lo había visto pocas veces por casualidad, no sabía si aceptaría su ayuda de buena manera, pero aquí estaban, siendo mejores amigos después de dos meses y ahora fingían ser novios, una sonrisa se formó en su rostro al recordar esos momentos en que pasaban juntos, la calidez de los abrazos del más joven, lo espontáneo que podía ser a veces y lo mucho que lo hacía reír. Muchas veces se perdía tan solo observándolo, pero el menor parecía no notarlo, hasta ayer. Suspiró.
—¿Estás enamorado de él? —Preguntó su madre mientras le pasaba el último plato.
—¿Qué? —La mirada de su madre le dijo que no pensaba volver formular la pregunta porque sabía que la había escuchado a la perfección y claro que lo había hecho—. No, solo somos mejores amigos. —Asintió varias veces para darle fuerza a sus palabras.
El silencio entre ambos permaneció por un tiempo, solo escuchándose el sonido de agua fluyendo. BangChan siguió pasando la toalla sobre los platos para secarlos y luego acomodarlos, estaba concentrando en su tarea que no se percató que su madre se había detenido para mirarlo fijamente, se volvió hacia ella cuando no le pasó ni siquiera una cuchara para secar. Le miraba como si quisiera arrancarle la respuesta de una pregunta que solo ella sabía.
