Perdiendo el miedo.

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Sofia

-Lo dejas o lo tomas - sentenció escondida tras la espalda de Tammy viendo sustada al hombre que abuso de mí - Yo mantendré a...- trago grueso queriendo que las palabras salgan de mi boca, pero me cuestan - A esta cosa - termino rápidamente.

-¿Lo dejas o lo tomas Facundo? - pregunta está vez Tammy apoyando mi respuesta, aunque en ella claramente se logra ver el nervio que también tiene.

Facundo nos mira con sus ojos entre cerrados, con una mirada tan penetrante que me hace erizar mis bellos.

Hace una hora decidí venir junto a Tammy a su despacho para darle la respuesta de su estúpida propuesta, y aunque se oiga ilógico y sin razocinio acepte, acepte cargar a su hijo hasta que él encuentre una solución a todo lo que él mismo ha ocasionado con la condición que me deje volver a casa para continuar con mis estudios.

Tammy me ha dicho que el profesor ha preguntado demasiado por mí y tengo claro que mis inasistencia podrían traerme muchos problemas, como una expulsión por parte de la junta directiva de la universidad.

Facundo se deja caer sobre su silla giratoria antes de pronunciarse - Déjame ver, ¿Ustedes quieren que yo las deje ir y que no harán nada para dañar a ese bebé? - bufa con sarcasmo -¿Y quién me asegura que así será o que no saldrán corriendo por ahí hacía la policía?.

-No lo haremos, lo prometo - respondo

Facundo arquea una ceja fingiendo sorpresa con su mirada.

-Vamos Facundo¿Que ganas con tenerla aquí? - se queja Tammy - Si ella quisiera hacerle daño a tu reputación ya lo hubiese echo con tu familia.

Exacto, gracias amiga, digo en mis adentro.

-Hice una propuesta, pero jamás menciones dejarla ir tan tranquila y peor aún estando en esa condición - dice él señalando con su barbilla mi vientre - Tengo algo mejor para ti Sofía.

Aquí viene otra vez, negociando como si él está en condición de hacerlo conmigo.

Su estúpido egocentrismo parece de lo más relajado como si meditara bien cada letra que saldrá de su boca y en cambio yo, me siento como una estatua de hielo congelada, esperando cuál será su próxima jugada.

-Solo dilo y ya Facundo deja de pensarlo tanto - pide Tammy - Solo causas más miedo del que ya te tienen

Sus labios se estiran en una sonrisa recta pero a la vez tenebrosa y repite con con orgullo -¿Miedo?.

-¡Solo dilo y ya! - exclamó yo sin paciencia alguna.

Ambos se quedan asustados por mi respuesta y por primera vez en esta historia me siento sin miedo a lo que él me pueda hacer.

Él toma una bocanada de aire y al fin dice su propuesta - Dejaré que continúes con tus estudios pero no dejares que regreses a tu casa - suelta.

-¿¡Que!? - exclamamos ambas sorprendidas.

Niego con mi cabeza.

-No, no, no, eso no puede ser cierto - habla Tammy - Ella está diciendo que lo mantendrá mientras tú buscas la solución ¿Que diablos quieres? - reclama mi amiga con voz dura.

-Es solo por seguridad Tammy, yo también saldré perjudicado si alguien se entera de esto - reprocha de igual forma que ella - Entiende que hay muchas cosas en juego para mí también, no puedo arriesgarme a perder todo.

-Sí claro, y que Sof pierda todo, ella si puede porque ella no es abogada, ella si puede porque no camina de trajes finos y caros como tú, es eso¿Ah? - refuta Tammy.

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