[1] Reencuentro

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Hacía poco tiempo desde que todos habíamos decidido dar un descanso al grupo, no se trataba de ya no querer estar juntos; sin embargo, estábamos llegando a un punto donde cada uno
deseaba probar cosas nuevas, descubrir su verdadero yo.

A pesar de ser chicos tan diferentes de una forma u otra terminamos siendo una especie de familia y para mí, siendo alguien con una dificultad tan grande para expresar lo que verdaderamente siento, fue realmente complicado el aceptar que los iba a extrañar, a pesar de que también me emociona todo lo que se vislumbra en el futuro; es decir, tengo treinta años, creo que ya es momento de conocer realmente quién soy.

Después de tomar la decisión, cada uno de nosotros se mudó a su propio espacio, y decidí que después de tantas carencias merecía de alguna manera un lugar acorde a mi nuevo yo, así que compré una casa amplia donde pudiera construir mi estudio y prácticamente vivir el cien por ciento de mi día creando música.

No obstante con el paso de los días comencé a sentir cada vez un poco de más nostalgia, extrañaba salir por las noches y ver a Namjoon enfrascado en un libro, a Hobi practicando alguna especie de baile cada vez más complejo, inclusive extrañaba lo molestos y ruidosos que podrían llegar a ser Jungkook, Tae y Jin y en definitiva extrañaba ver a Jimin, a pesar de que por todas las circunstancias que ocurrieron nos habíamos alejado un poco hacía un tiempo.

Traté de no darle muchas vueltas a ese asunto, ya que, al no ser el anuncio oficial aún, teníamos pendientes las promociones del nuevo álbum y de alguna manera u otra nos encontraríamos y posiblemente este sentimiento dejaría de sentirse tan pesado.

Aquel día el llamado para los ensayos de la presentación inkigayo había sido especialmente temprano ya que por primera vez después de muchos meses ensayaríamos la presentación en vivo de Yet to come, no sabía muy bien como reaccionaría siendo sincero ya que las letras las habíamos escrito en un momento especialmente sensible, sin embargo, también me emocionaba verlos de nuevo en persona.

Los días anteriores había estado enfrascado en una rutina compleja, ya que como parte de mi plan para las nuevas producciones que realizaría me enfoqué en llenarme de cientos de clases que me pudieran ayudar a mejorar bajo la visión del nuevo artista que quería llegar a ser, así que tomaba desde las 6 am clases de baile, canto, piano, guitarra, inclusive pilates, así de irónico como suena, y así podría continuar con una infinidad de las actividades que realizo, pero el punto es que para mi no fue nada complicado llegar a las 6:30 a.m. que era a la hora en la que nos habían citado.

Para mi sorpresa fui el primero en llegar, así que decidí sentarme un rato en la sala de ensayos y busqué una guitarra de las que tenían como parte de los instrumentos del grupo que nos ayudaría. Estaba tratando de lograr un par de acordes cuando escuché ruido en la sala contigua, me imaginé que había llegado Nam o posiblemente Jin ya que eran los más puntuales, así que decidí ir a saludar.

Cuando entré a la sala vi una pequeña y delgada silueta de espaldas, me sorprendió un poco ya que suele ser alguien muy impuntual
y sentí algo de incomodidad, pero traté de restar importancia y saludé de forma normal:

-Hola Jimin- mencioné en un tono algo grave para mi gusto

El chico volteó sorprendido y abrió los ojos de una forma algo exagerada.

-Suga, no sabía que estabas aquí- respondió algo desconcertado- ¿cómo has estado?

-Bastante bien a decir verdad ¿tú como has estado? – cuestioné tratando de parecer normal, aunque por dentro sentía una necesidad continua de salir corriendo

-Bien, ya sabes, estoy tratando de elegir las canciones que van a estar en mi trabajo en solitario, pero sinceramente creo que estoy lejos de concretarlo, siento que algo falta en la producción de las canciones, no lo sé, espero dar lo suficiente- sonríe de alguna forma melancólica

-Entiendo, espero que todo vaya como lo planeas- dije sinceramente

De pronto el silencio se volvió a instalar en la habitación, sentí como si una bruma muy pesada empezara a invadir todo alrededor, realmente no quería estar en aquel lugar solo con él, o sí, quizá era el momento adecuado para...

-Yoongi, creo que necesitamos hablar de lo que ocurrió- soltó sin darme tiempo de procesar muy bien lo que había dicho

Realmente no sabía qué decir, quería ser claro, pero sinceramente había tratado de enterrar tanto el asunto que no me había puesto a pensar cómo debía enfrentarlo, así que tomé aliento y traté de sonar lo más tranquilo posible.

-Creo que no debemos tomarlo tan seriamente, ¿no crees?, entiendo que hemos vivido la mayor parte de nuestra vida juntos y nos perdimos de muchas cosas que pudieran catalogarse como "normales", creo que claramente al ser tan cercanos y querer experimentar más, pudimos haber confundido de alguna manera lo que sentíamos y no tengo nada en contra de mmm... bueno ya sabes, pero creo que debemos enfocarnos en ver hacia adelante.

Al terminar de decir esas palabras sentí un vacío enorme en el estómago, porque no era cierto, porque yo sabía que lo que estaba dentro de mí era algo diferente a la simple curiosidad que pudimos haber sentido lo dos en ese momento, pero después de lo que había pasado yo me puse a pensar en todo lo malo que pudiera acarrear seguir con lo que estaba ocurriendo entre los dos y decidí que no quería complicar las cosas.

Él me miró un largo tiempo y de pronto comenzó a caminar hacia mí, la distancia no era mucha, pero se sintieron eternos sus pasos, se acercó y me sostuvo la mirada sin decirme nada. Yo intenté mantenerme firme, y le devolví la mirada seriamente.

Sentí como sus ojos pasearon por los míos, como intentando descifrar algo, vi como su mirada bajó hacía mis labios recordando y pude notar un sutil movimiento en el que entreabrió los suyos, es como si las palabras que quería decir se hubieran quedado colgadas ahí, pero sin atreverse a salir, quizá no las que quería.

-Tienes razón Hyung, creo que debo restarle importancia, hacer como si no hubiera pasado nada- y sonrió haciendo que sus ojos desaparecieran por un instante

Nuevamente el dolor y la incertidumbre me llenaron, mi primer instinto fue sostener su brazo, como queriéndolo atraer, era el fantasma de un movimiento que recordaba haber hecho antes y que había causado tantos problemas en mi cabeza.

Él me miró fijamente de nuevo, con ese rostro al que realmente no encontraba lógica, de un momento a otro se convertía de alguien tan dulce a un ser sumamente atrayente.

-¿Crees que deberíamos hacer como si no hubiera pasado nada?- preguntó con una voz baja mientras él sostenía el brazo contrario con el que yo lo estaba sujetando y sentí que su rostro se inclinaba más hacía adelante, a escasos centímetros del mío. Sentí como un hormigueo subía por mis piernas hasta llegar al estómago, mi respiración empezó a tornarse más acelerada.

En ese momento escuchamos el ruido de la puerta abriéndose y pasos entrando a la habitación, así que ambos nos sobresaltamos y me eché hacía atrás, tratando de alejarme lo más posible de Jimin.

Al entrar Namjoon nos vio a ambos algo extrañado.

-¿Todo está en orden?- dice con su voz seria

Lo miré exasperado tratando de fingir que exageraba su interpretación de la situación

-Todo perfecto, vamos a trabajar- dije de forma firme

Jimin volteó serio y le respondió

-Todo está claro, vámonos- dijo, lo cual dejó mucho más confundido a RM.

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