Serendipity

[22] Paparazzi

Después de decirle a Jimin que quería que se mudara conmigo, no pude resistir la incertidumbre de su silencio y salí corriendo.

A veces por mucho que trato de enfrentarme a las situaciones que me conflictúan sigo sin poder hacerlo y tiendo a huir, porque no quiero salir lastimado, como tantas veces me ha ocurrido.

Corrí hasta que sentí que mis pulmones explotaban y de pronto me preocupé porque no llevaba una mascarilla o algo que me cubriera y estaba en un lugar donde se notaba más concurrido y yo notaba ciertas miradas sorprendidas, tal vez algunos simplemente se sobresaltaban al ver a un hombre corriendo como loco, pero otros probablemente me estuvieran reconociendo.

Como no quería más escándalo me escabullí en la primera tienda de conveniencia que encontré y compré una mascarilla para cubrir mi rostro y me quedé un rato sentado esperando a que todo mundo saliera del lugar.

Sentí que mi teléfono sonaba un par de veces y vi en la pantalla el nombre de Jimin, pero no me sentía listo para tener una conversación seria con él, ya sea que me rechazara o aceptara, yo había hecho toda una escena y eso me hacía retorcer el estómago de vergüenza.

Cuando mi respiración estuvo un poco más calmada, decidí salir y caminar para ubicar un camino hacia mi casa, por un momento pensé mejor tomar algún taxi privado pero la aplicación de GPS me marcaba unos 20 minutos a mi dirección y pensé que caminar podría ayudarme a despejar un poco la cabeza.

Mientras caminaba volví a sentir mi celular vibrando, pero esta vez al mirar la pantalla no encontré el nombre de Jimin, sino de alguien que verdaderamente no me esperaba.

-¡Suran, cuánto tiempo sin saber de ti!- dije con mucha alegría

-¡Hola Yoon, me alegra mucho escucharte! ¿estás en Seúl?

-Sí, estoy aquí ¿por qué? ¿estás tu también en la ciudad?

-Así es, vine a pasar unos días porque tendré algunas pláticas con unos productores, pero primero quería pasar a ver a mi productor favorito.

-¿Yo?

Escuché que Suran soltaba una risa tras el teléfono, pero al final respondió afirmativamente.

-¿Por casualidad crees que nos podríamos ver ahora? Es algo tarde, pero me apetece ir a comer algo contigo, como la última vez- dijo al fin.

-Creo que ahora me viene bien, necesito distraerme un poco. Mándame la ubicación del lugar y nos veremos ahí.

Al final nos vimos en un restaurante no tan concurrido, pero con comida muy famosa, y al verla me llenó de felicidad porque la consideraba verdaderamente una amiga, ella me abrazó fuertemente antes de entrar al restaurante y yo le correspondí.

Estuvimos hablando durante mucho rato y comentando los planes que teníamos ambos, el tiempo se pasó sumamente rápido cuando después de comer y beber un rato al final me preguntó

-¿Cómo va el asunto Jimin?- cuestionó intrigada.

-Emm... pues... creo que por fin está algo resuelto, quiero decir, oficialmente estamos saliendo.

Ella abrió mucho los ojos de sorpresa, pero después se dibujó una enorme sonrisa en su rostro.

-¡Realmente me alegro por ti!- dijo mientras ponía su mirada hacia el suelo y cambiaba su expresión- ¡ah, es todo una decepción!

-¿Cómo?- cuestioné algo confundido

-Yo... n-no me malentiendas, quiero decir que me alegra mucho que estés con él, pero creo que quizá solamente una pequeña parte de mí mantenía la esperanza de tener una oportunidad contigo, no puedo evitarlo, lo siento.

Me sonrojé de inmediato y me sentí algo nervioso, pero al final la entendí, sino estuviera tan enamorado de Jimin, probablemente sería de ella de quien lo hubiera hecho.

-Lo entiendo Suran, como te dije la ocasión anterior tu eres alguien realmente increíble y atractiva, no puedo evitar pensarlo, pero sabes lo que siento por él.

-Lo sé, no pasa nada. Es genuina mi felicidad por ti. Será mejor que me vaya porque es muy tarde y me siento ya muy ebria.

-Claro ¿te acompaño a tu hotel o algún lugar? No quiero que vayas por ahí sola tan tarde

-No te preocupes, sabes que siempre me mandan dos o tres personas a cuidarme, alguien está esperándome allá afuera.

Al salir del lugar, el ambiente se sentía muy frío, la noche había caído por completo y casi no había nadie en las calles, las estrellas brillaban de forma hermosa y el aire se sentía helado, pero sin ser molesto, más bien refrescante.

Ella me miró durante unos minutos y me tomó de las manos, se acercó lentamente a mi y depositó un pequeño beso en mis labios.

Por instinto me eché hacia atrás y ella se disculpó de inmediato.

-Lo siento Yoongi, estoy muy tomada, perdóname- dijo muy apenada

En ese momento ambos sentimos un flash deslumbrante en la cara, había un paparazzi que seguramente nos había visto entrar al restaurante y se había quedado pacientemente ahí hasta que saliéramos.

-¡Diablos!- grité enojado

Traté de correr hasta donde estaba con una ira llenándome todo el cuerpo, pero él se subió rápidamente a una motocicleta y huyó sin que pudiera hacer nada.

Suran se quedó perpleja y se llevó las manos al rostro, empezó a llorar.