Serendipity

[28] Best moment is yet to come

El sonido de ARMY a veces me recuerda al mar, un estruendo contundente, fuerte, pero a la vez relajante, es lo que hace que todo tenga sentido en mi vida.

Las luces iluminan el escenario por donde estamos a punto de entrar y la emoción se apodera de nuestros cuerpos, no puedo esperar para estar de nuevo en contacto con toda la gente, al lado de mis seis personas favoritas en el mundo.

Nam dice unas palabras como siempre antes de presentarnos en concierto mientras todos nos estrechamos en un abrazo, es el ritual que extrañé cuando me presenté con PSY en su concierto, no cabe duda de que ellos siempre van a ser lo que marca la pieza faltante de mi rompecabezas, no miro hacia el círculo porque todavía no es el final. 

Busan significa nuestro regreso a los escenarios después de estar trabajando cada uno en nuestros proyectos, pero ello lo hace aun más especial porque hemos vivido experiencias diferentes, somos hombres distintos; yo soy alguien totalmente diferente al Yoongi de hace algunos meses, me siento más completo, no solamente desde una perspectiva profesional sino también personal porque tengo a Jimin a mi lado.

Al subir al avión que nos dirigiría a este lugar, Jimin se sentó a mi lado y me tomó de la mano aun cuando Bang se encontraba en el mismo sitio que nosotros, pude ver su expresión horrorizada y como los colores se le subían al rostro, pero a mi novio parecía no importarle, solo tenía esa sonrisa sincera donde sus hermosos labios se ensanchan y sus pequeños ojos desaparece. Me di cuenta de que acababa de llamarlo "mi novio", era la primera vez que lo materializaba de esa forma dentro de mi cabeza y por algún extraño motivo, eso me trajo toda la paz y la valentía que me hacían falta.

-Me gustaría poder decirles a todos que eres mío- me dijo Jimin mientras estábamos recostados en la habitación del hotel donde nos hospedamos para prepararnos antes de la presentación.

Sentí que el estómago se me hacía pequeño, la realidad es que yo también deseaba en lo más profundo de mi ser que todos lo supieran ¿pero y si las cosas salían mal?

-¿Crees que lo tomarían bien tus padres?- le pregunté algo consternado porque por más que nosotros tuviéramos clara la situación, seguíamos viviendo en una sociedad sumamente conservadora.

-Mis padres te aman Yoon, de hecho, ya les comenté un poco de mmm... bueno de nosotros y me gustaría que ahora que estamos en el lugar en el que nací pudieras ir conmigo a visitarlos y presentarte formalmente.

Mis mejillas se encendieron porque ello era algo que jamás me había esperado que sucediera, mi pecho reventó de felicidad.

Cuando salimos al escenario los gritos de ARMY son como una recarga energética para mí, me siento grande y valiente, siento que puedo hacerlo todo. Todos sentimos que estábamos retomando lo que en realidad amábamos, extrañábamos realmente esto.

Escuché a JK cantar mejor que nunca, a Hobi bailar increíblemente, a V expresarse de una forma sumamente segura, Jin estaba emocionado, Nam rapeaba intensamente y mi Jimin estaba bailando en una forma tan increíblemente sensual que no podía contener mis ganas de acercarlo hacia donde yo estaba y arrancarle todo lo que lo cubría.

Él cruza su mirada con la mía mientras cantamos Yet to come, de pronto la letra hace todo el sentido del mundo para mí, totalmente cierto que lo mejor está por llegar, mi pasado fue bueno pero lo que viene será aun más brillante, él hará que sea brillante.

La música termina y se escucha la emoción del público y el estadio está iluminado con todas las luces de ARMY simulando un mar de estrellas que nos rodea, veo su felicidad reflejada en el rostro y me mira directamente a los ojos, veo como con sus labios me dice un te amo silencioso, uno que solamente él y yo entendimos.

Dejo el micrófono en el piso y camino hacia donde esta, él me mira con cara de sorpresa y todos los demás voltean extrañados porque nada de esto estaba ensayado, es el impulso lo que me lleva a sus brazos, yo también quiero que todos sepan que es mío.

Quedo de frente a él y me mira intensamente, tomo delicadamente su rostro entre mis manos y lo beso, ahí frente a los miles de personas del estadio, frente a los millones que nos ven a través de internet, escucho sus gritos de sorpresa y emoción; no importa, nada me importa, sé que lo mejor está por venir.

Fin.