Me siento acorralada, básicamente porque lo estoy, el chico contra el que choqué me hizo estamparme en la pared y ahora me está observando junto al rubio. En este momento me siento muy intimidada y lo detesto.
-Perdón...- le miro y hago de nuevo un amago de irme pero sus manos me empujan de vuelta a la pared.
No hablan, solo me miran fríamente y solo quiero salir de aquí. Luke, el rubio da un paso y coge del hombro al moreno echándolo hacia atrás pero este no parece estar de acuerdo con la idea de irse y se remueve para soltarse del agarre.
-Vámonos Rich- dice calmadamente.
-No- se aleja de su amigo y viene hacia mi, a todo esto no podéis imaginar mi cara
-He dicho que perdón, me tengo que ir ...- estoy demasiado agobiada y como no salga de aquí creo que me dará otro de mis ataques de ansiedad.
-¿Por qué?- no le entiendo.
-¿Por qué que?-
- Que por qué deberías irte- esto es demasiado surrealista.
-No creo que haya sido para tanto- no se si debería haber dicho eso.
-Yo te diré si ha sido para tanto- no,no debería pero ya he empezado,no tengo nada que perder.
-Claro que no ha sido para tanto, solo un leve empujón, si eres tan susceptible no es mi culpa, bueno tengo prisa- no tengo ni mas remota idea de donde he sacado ese valor sin siquiera temblarme la voz, me autofelicito.
Ambos se miran asintiendo y se apartan de mi medio de salida, pensé que me daría una paliza o algo pero que de repente me dejen en paz, no lo comprendo. Obviamente no lo dudo y salgo casi corriendo de la clase.
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Estoy caminando junto a mi amiga hacia la salida, el resto del día ha transcurrido sin incidentes pero estoy alerta ya que no descarto la opción de que esos dos me vengan a pegar o algo.No le he dicho nada a la rubia a mi lado sobre eso, ni tengo pensado hacerlo.-Nos ha invitado Natasha esta noche a su casa, da una fiesta, ¿te vienes?
-Te ha invitado a ti y te ha dicho que me podías llevar por pena, además, es demasiado cliché americano.
-Venga vamos vente.
-No.Igualmente no pinto nada ahí, me quedaría apartada.
-Eres muy plasta pero vale, haz lo que quieras.
-Lo siento pero sabes que no es lo mío, mañana me cuentas qué tal. Adiós.- Me giro hacia la dirección que lleva a mi coche.
Creo que no había mencionado que amo la música, me evado de todo. Empieza a sonar All Time Low por los altavoces del coche y la soledad me invade, no hay nadie por la calle, lo que de verdad agradezco. Disfruto de este rato a solas sin pensar en nada hasta que llego a casa. Me podría plantear ir a esa fiesta con tal de no aguantar a estos personajes.
Al entrar no hay nadie a primera vista y recuerdo el viaje de negocios de mis padres. Agradezco al aire y subo con aire jovial a mi cuarto. Podré fundirme en un buen libro sin la presencia constante de mis padres. Espera, mi hermana.
La llamo para ver si me dejará sola esta tarde pero no contesta. Repito el proceso un par de veces y no obtengo respuesta. Deduzco que se habrá quedado sin batería y que estará con alguna amiga así que me deshago del uniforme, me pongo una camiseta ancha hasta un poco mas abajo del trasero de color negro y bajo al salón con mi libro.****************************
Mi móvil empieza a sonar y me sobresalto pero reacciono y lo cojo. Al tomar el móvil veo q son las 9. Creo q he batido el récord de lectura o algo por el estilo. No miro quién es.-¿Si?
-Emm...hola, ¿Aline?
-Si, ¿quien eres?
-Soy Jade, amiga de tu hermana.
-Qué coño ha hecho.
-Está borracha y se está enrollando con un chico y no sabía que hacer, esta muy rara.
-Esta niña es tonta aggg ya voy, ¿dónde estáis?
Me da la dirección y me veo obligada a ir a por esa idiota. Poco después llego a la plazoleta que me indicó Jade creo recordar y aparco donde puedo. Mi humor no es el mejor ahora mismo y mi paciencia es nula.
Salgo del coche y veo a esa niñata lloriqueando en brazos de un chico de su edad, al menos no es un viejo verde.-Vámonos.
-No.
-Si no quieres que exlote aquí y ahora vamos.
-No.
Ya me ha cansado. La agarro del brazo y tiro hacia atrás pero al no tener fuerza fracaso y por la inercia me impulso hacia atrás. Hay alguien detrás de mi y giro la cabeza para pedir perdón cuando veo que es con el que me había chocado previamente en el instituto.
Bendita suerte, ¿eh?
