CAPITULO 40: PREPARTIVOS

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Un nuevo día iluminaba todo el continente Yuei desde el horizonte, los aldeanos despertaban para empezar a realizar sus actividades, ajenos a todo lo que pasa en las fronteras y palacios de sus gobernantes. El reino cercano a la barrera estaba muy extrañado al ver a varios caballeros salir del reino y dirigirse a las frontera, todo estaba muy confuso para ellos ya que casi nunca veian a los guerreros, si por algo el reino oscuro hacia lo posible para mantener los tratados de paz ya que era un reino algo pacifista.

Mientras tanto en el reino de fuego casi todos los herreros más experimentados tenían la tarea impuesta por el rey Enji de fabricar puntas de flechas usando solo plata pura, cada docena que terminaban de fabricar era llevada por dos guardias del reino oscuro, mientras que en el reino Fénix habían sientos de dragones saliendo del reino, cada uno llevava alrededor de cincuenta guerreros, otros llevaban armas o suministros para la guerra mientras que por tierra viajaban en los corceles más rápidos que poseía el reino.

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Mientras que la aldea maldita de los brujos oscuros, el jefe de la aldea tenía un muy mal presentimiento, desde que su hijo se fue no ha sabido nada de él ni de sus nomus, eso era lo que más lo tenía intranquilo el doctor encargado de crear a los nomus lo había notado pero no se atrevia a preguntar por dos razones, una es que no le gustará la respuesta y la otra porque lo podría matar por chismoso. Apreciaba su vida como para provocarlo, así que solo se concentraba en su trabajo usaba el agua contaminada que pasaba por la aldea y las plantas venenosas que encontraba para el brebaje que servía para mutar el cuerpo del nomu y convertirlo en la mas horrenda criatura, luego usaba los cristales que conectan con el mundo exterior para poder transferir la magia de las criaturas malignas de afuera a los nomu y con un cuarzo de fuego les daba vida, cada cuarzo tenía que ser colocado con sumo cuidado en la cabeza de la criatura porque al mínimo error estos explotarian, una vez hecho usaba cristales magnéticos para controlar su capacidad de razonamiento así solo serían títeres, lástima que solo la magia más poderosa podrá acabarlos.

Cuando la noche cayo el doctor decidió para y descanzar un poco para no sentirse tan fatigado, salió de su cueva y fue donde el jefe. Lo encontró sentado a las afueras de su casa, tenía la mirada perdida como si le hubieran sacado el alma del cuerpo.

- O gran maestro All For One... ¿ocurrió algo? - dijo preocupado el doctor

- Siento que Shigaraki fracaso - dijo son más dejando consternado al otro

- ¿Por qué dice eso maestro? - dijo acercandose al peliblanco que dirigio su mirada a la barrera

- Porque la no he logrado contactar con ellos - dijo mostrandole un prisma de cristal, se podía ver que sus colores eran negros con tonos verdes neón que se movían lentamente - Conosco muy bien a Tomura y se que el contesta rápido mis llamados

- A lo mejor el salir de la barrera los debilitó demasiado señor - excuso para no pensar en que su trabajo duro de haber creado a sus nomus haya sido en vano - No conocemos las condiciones de la barrera

- Es verdad... pero aun asi tengo un mal presentimiento de que algo pasará - miro el prisma y lo dejo en el marco de la ventana - ¿Cuantos Nomus vas? - vio como el doctor sonrio como maniático

- O señor... no es por presumir pero ya voy con veinte listos para seguir sus órdenes - dijo sin cambiar su sonrisa - Salí un rato para no fatigarme tanto... en un rato seguiré con la creación de los nomus

- ¿Aun tienes animales y cadáveres para usar?

- Sí... aun tengo suficientes mi señor, cuando se estén por terminar le avisaré, así no los cadáveres no se dañaran tan rápido

- Bien - dio media vuelta para sentarse a la cabaña - Sí necesitas algo no dudes en venir a verme... pero eso sí no olvides que no debes revelar la ubicación de tu lugar de crear Nomus - advirtió liverando un poco de instinto asecino que hizo temblar al doctor

OMEGAS SALVAJESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora