• Debajo De La Cama Y Dentro Del Armario •

(3) Lo que encontré en mi jardín (3)

— A partir de esta página, lo que encontremos fue letras torcidas las cuales costó descubrir realmente lo que ponía. Advertimos que lo que sigue a continuación no es apto para todos los públicos —

(Diario de Jhon Doe)

— Querido Diario

Tengo que contar lo que ha pasado porque realmente me ha dejado impresionado, poco a poco vi como la planta gracias a mis cuidados crecía, ¡me sentía feliz! nunca antes me había sentido de esta manera, había crecido muy rápido, pero lo que me pareció más curioso, es que había aparecido un capullo, como si de dentro fuese a emerger la más preciosa de las flores, que su aroma fuese a embriagar a toda la calle y los vecinos al acercarse la admiraran queriendo varias de las semillas, eso fue hace una semana.

Pensarás que ahora estoy disfrutando de una preciosa flor que se ha abierto por tanto amor, pero no, eso es lo que me impresiona, desde donde me encuentro sentado escribiendo estas letras puedo observar la planta, he llamado a varios amigos para que puedan observarla pero como yo, ninguno le encuentra explicación, ni siquiera a mis vecinos más jardineros. El capullo ahora es mucho más grande, tiene el tamaño de un huevo de avestruz, pero la cosa es que no se desprende de la mata, por ello e tenido que poner otro macetero con tierra donde pueda ayudarse el capullo y de esta forma ver lo que sucede, pero sigo pensando que es un hallazgo hermoso pienso que será un descubrimiento asombroso, que me harán entrevistas, vendrán a ver mi hermoso jardín y la vida de una nueva planta, de una extraña flor, la vida va a cambiarme, lo presiento, lo siento aquí dentro en mi pecho, alguno de mis amigos me ha mirado con preocupación, pero no me preocupo por nada, la he cuidado con todo el amor del mundo, seguro que ese amor es devuelto en cuanto por fin pueda ver la imagen de mi hermosa criatura.

He duplicado el fertilizante, el agua rebosa en ella pero parece estar sedienta pues en media hora vuelve a verse completamente seca, me he atrevido a tocar con cuidado el capullo notando como este parece una pequeña tela que protege algo en su interior, pero lo más curioso es que no es una tela suave, sino que es como si poco a poco fuese endureciéndose, como eso mismo, como la comparativa que hice con anterioridad, un huevo, como si la cascara de un huevo se estuviera formando, en mi propio jardín, de mi propiedad, pero por más vueltas que se le dé es imposible, es una planta, sería algo antinatural...De verdad que me encuentro nervioso y feliz, por tal descubrimiento y agradezco cada día que pasa a ese querido desconocido por haber dejado en mis manos tan hermosa creación de la naturaleza.