TRUE

Capítulo 11 [Es mi venganza]

Quisiera decirles que el resto de la fiesta lo disfruté solo con la compañía de Dalia y Megan pero les diría una gran mentira. Una hora después de haber subido y habernos terminado la botella Megan recibió una llamada de su novio en la que le decía que la andaba buscando por toda la fiesta, a lo que la reacción de ella fue salir corriendo en busca de su amado.

Ridícula.

Ja, ya te veré a ti en esas.

¿Quién te dijo que hablaras estúpida conciencia?.

Entonces mi hermana y yo nos vimos en la frustrante decisión de si irnos a nuestra casa, o afrontar el asunto. Y adivinen, mi madre parió una mujer guerrera, y la verdad es que ya estaba pasadita de copas, por eso me quedé. Me encontré con Brandon que prácticamente no valía nada en esos instantes, bueno ninguno del equipo de fútbol, de hecho hasta Trevor estaba en muy mal estado.

¿No se supone qué los deportistas no deben consumir alcohol?

Se supone no. Es así.

Trevor al verme nuevamente se lanzó sobre mí llamando la atención de Brandon, quien me lo quito de encima con un manotazo y me empezó abrazar, el muy idiota no me quería soltar. A Derek no lo vi más, supuse que se había encerrado en su habitación, pero supuse mal cuando vi al señor Jones saliendo hecho una furia a acabar con la fiesta a las dos de la mañana.

¿Por qué? Bueno el señor Jones recibió una llamada de la comisaría para que buscará a uno de sus hijos que estaba detenido por conducir con sustancias (en definición estaba borracho). El señor Jones apagó la música y corrió a todo el mundo de la casa, le dijo a Brandon que se cancelaba todo porque Derek se encontraba arrestado, mi mejor amigo que también estaba borracho frunció sus cejas en total desconcierto, pero terminó cediendo a la petición de su padre.

Quisiera hacerles saber que quise ir con ellos en busca de Derek, pero ninguno de los dos me dejaron ir ya que no iba vestida para salir a la comisaría, lo entiendo estaba en bikini y ni siquiera era uno recatado. Termine yendo a mi casa, mamá no estaba porque había salido de viaje de  negocios el día anterior. Daniel estaba lo suficientemente borracho como para sostenerse por si solo, así que Dalia y Megan fueron sus muletas humanas, lo tuvieron que llevar a su habitación y dejarlo tendido en su cama, ya cuando se le pasará la resaca  se cambiaría de ropa.

Megan fue a su habitación, según porque estaba cansada, pero vamos, no le creía ni medio, y si lo estaba era porque había estado follando en alguna parte de aquella casa con Bryan, esos dos..., espero se estén cuidando. Mi hermana subió conmigo a mi habitación, ya que estaba preocupada por mí, por eso no me quería dejar sola.

-Rose tienes que dormir...

-No.

-Ro no puedes esperar hasta que los Jones llegues.

-Claro que puedo.

Mi hermana me quedo viendo con una cara que perfectamente entendí.

-No voy a tomar pastillas para dormir- le dije con autoridad para ver si me dejaba.

-Esta bien, no insistiré, yo si quiero ir a dormir, pero te dejaré esto acá por si decides usarlas- me dejó las pastillas en la mesita de noche al lado de mi cama -Te quiero Ro... Buenas noches- se acercó a mí para darme un abrazo, y luego salió de la habitación.

Yo me encontraba parada en el marco de la puerta de mi balcón, viendo fijamente a la casa de los Jones, recordando la confesión de Derek y su beso... En estos momentos pude haber tenido un ataque de ansiedad por tener mi mente con un mar de emociones, pero no fue así, y se sintió extraño, de verdad esperaba una reacción negativa a esto, que no paso. Solo podía pensar en porque Derek habrá salido de su casa en estado de ebriedad, él no era alguien que tomase mucho, he compartido lo suficiente con él para saberlo, y Brandon me dijo que lo gustaba tomar porque tenía mala copa, por eso se abstenía a hacerlo.