CAPITULO 9

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MARGOT

La semana había pasado muy rápido, había evitado a Harry mucho más de lo que me imaginaba, a veces me mandaba a llamar con Alice pero me hacia la que nunca me llegaban sus recados, era consciente de que me podía echar pero en esos momentos era lo menos importante, el trabajo cada día estaba más difícil mantener todos estos documentos al margen y estar pendiente de las contabilidades era nada fácil, tenía la cabeza dándome vueltas, las cuentas seguían descuadradas y la tal Cloe seguía transfiriéndose dinero sin ninguna razón. Tenía que hablar con ella o con Harry espero que no sea la última opción por favor, tome algunos documentos y salí de mi oficina en busca de la rubia, no me costó mucho encontrarla estaba con otra chica casi de su misma edad riendo de cualquier pendejada que estuvieran hablando, a veces siento que no hacen nada aquí en esta empresa ya van varios días que las encuentro haciendo lo mismo. Me acerco a las dos chicas y carraspeo un poco para que se percate de mi presencia, las chicas voltean y me ven de arriba abajo como un bicho raro, no les prestó atención y hablo con seguridad.

- Señorita Cloe podemos hablar un momento. Espero su respuesta, pero no llega enseguida, Cloe mira a la otra chica que todavía no recuerdo bien su nombre, se acerca a ella y susurra algo a su oído cosa que me saca de quicio empiezo a impacientarme y cuando estaba a punto de hablar nuevamente la rubia se pone de pie con una sonrisa más falsa que sus pestañas.

- Vamos, la rubia me hace un gesto con la mano como quien dice después de usted, la miro con mala cara y empiezo alejarme de ahí, claro percatándome que la pálida me siga.

- Aquí está bien ¿no?, hablo volteando para quedar frente a ella, nos encontrábamos en la cafetería donde Harry me había dicho todas esas cosas, bueno eso no importa ese momento, lo importante es saber por qué la tal Cloe se transfiere tanto dinero.

- Y bien de qué quieres hablar conmigo. Cloe frunció un poco el ceño, cruzo sus brazos y hace una pausa dándome lugar a que hable. 

- Bueno, empecé hablar lo más tranquila que puede, he estado revisando unos documentos de nómina y veo que tu nombre aparece muchas veces, la cara de Cloe se puso roja de un momento a otro y sabía que algo malo estaba haciendo, así que seguí hablando:

- Pero eso no es todo me acerque a ella un poco más y susurre, pero veo que no hay sustentos de ese dinero, así que quiero que me digas por qué has estado transfiriéndote dinero sin autorización. Sus ojos se abrieron más de lo normal y empezó a temblarle todo el lindo cuerpecito, eso si no se puede negar tiene un buen cuerpo.

- Yo, yo la rubia empezó hablar sin decir nada concreto. Pero cambió rápidamente su postura y habló con seguridad.

- ESO NO ES TU PROBLEMA, Cloe apretó los dientes y la rabia era notoria, no omitimos que estaba más roja que un tomate. 

- Pues fíjate que si es mi problema porque yo soy la encargada de revisar que todas las cuentas de esta empresa estén bien, y que estén sustentadas las transferencias que se hacen, la mire fijamente y seguí hablando:

-Y ahora me vas a decir, ¿o no quieres que hable con tu jefe?. No quise mencionar su nombre y esperé a su respuesta.

- Pues este es mi problema y espero que no te metas o ... no la deje terminar y rápidamente hable.

- ¿o qué? Que vas hacer me vas a robar a mí. La mire fijamente su cara destella a rabia y sus mejillas estaban rojas.

- Es mejor que te mantengas alejada de mí, no sabes lo que estás haciendo, la voz de Cloe sonó ruda y amenazante y por un momento me sentí nerviosa, pero mi deber era averiguar por qué está haciendo todo eso. 

- A mí no me vengas con tus cuentos, le dije tratando de que se intimidara también, si no me dices ya mismo voy a ir donde Harry y le voy a contar absolutamente todo. Eso pareció asustarla un poco por que enseguida habló.

POR ALGO TE CONOCÍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora