POR ALGO TE CONOCÍ

CAPITULO 11

MARGOT

Ha pasado 1 semana desde que Liam se marchó, cuando escuchó el nombre de Harry su corazón se partió en mil pedazos, sentí su ira, el desprecio hacia mí era evidente y no puedo juzgarlo. Él conoció la historia que tuve con Harry, él me sacó de ese hoyo en el que había estado por nuestra separación y no le importó sacrificarse para sanar mis heridas, pero Liam no se dio cuenta que mi alma seguía rota y cuando Harry volvió a mi vida fue como si todo cobrara sentido. Me duele haberle hecho todo esto, me duele haber jugado con sus sentimientos, pero lo que más me dolió fue ver su cara horrorizada después de haberle confesado todo, no se lo podía creer, sus ojos rojos y sus venas en su frente me partían el alma pero ya no podía hacer nada, sentía que debía dejarlo ir para que fuera feliz y no siga viviendo engañado por mí, por qué sí se una cosa y es que es mejor soltar y ser feliz que quedarte y vivir para siempre al lado de una persona en la que no confías. Tenía que hacerlo por ambos y así lo dejé ir con mi corazón roto, pero ya era muy tarde para arrepentimientos.

- Adiós Margot, fueron sus últimas palabras antes de salir por esa puerta y haber desaparecido de mi vista.

Debo agradecer a Yulian siempre está conmigo y esta semana de soledad, tristeza y confusión ha estado para mí, me acompaña cada coche y se encarga de dejarme y recogerme en el trabajo.

-Es lo mejor que pudiste hacer Margot. Me dice en voz baja tendiendo la sabana sobre mi cuerpo. Siento mi cuerpo sin fuerzas y aunque Liam ya no esté quiero que sepa que una parte de mí siempre estará agradecida por haberme ayudado y que una gran parte de mi corazón fue suya y lo quise mucho.

Por otro lado, esta Harry que no ha parado de hacerme la vida imposible desde el primer día de nuestro reencuentro.

-No sé cómo puedes decir eso Yulian. Fueras visto su rostro cuando me miró, le provocaba nauseas verme, me despreció y lo que más me duele es que todo fue mi culpa, fui una imbécil por haberme dejado llevar por el idiota de Harry.

- Cálmate Gogan, mañana será un día maravilloso, es tu día de descanso e iremos a pasarla bien vale.

-Vale, vale pero no me digas gogan sabes que no me gusta. Yulian me puso ese sobrenombre desde que nos hicimos mejores amigas junto las últimas partes de mi nombre y mi apellido y formó ese estúpido sobrenombre odio que lo diga por que suena como a goma o algo dulce. Trate de ponerle algún sobrenombre que no le gustará pero no encontré así que decidí llamarla risos por sus hermosos y voluminosos risos a ella le encanta y no me queda más que darme por vencida.

Risos me da un beso en la frente y me dice que todo irá bien, le dedico una sonrisa y se tumba encima de mi hacerme cosquillas.

-Para risos para. Digo entre risas fallando en el intento, ella sigue con su misión de hacerme reír.

-Basta Yulian por favor digo de nuevo. tratando de apartarla con mis brazos e intentando hacerle cosquillas a ella, Yulian se detiene cansada de reír al igual que yo, nuestras carcajadas resuenan por toda la habitación.

- Llevamos dos horas buscando una película Yulian, puedes ayudarme a elegir, digo ya cansada, literalmente llevamos dos horas buscando algo que ver y a Yulian no le gusta nada, tenemos todo tipo de comida alrededor de la cama, según ella era una noche de chicas pero no hemos hecho absolutamente nada en todo lo que llevamos de noche.

Yulian solo come crispetas y arruga su cara cuando trato de seleccionar algo para ver, a la final pongo una película de comedia y terminamos riendo a carcajadas y la habitación termina hecha un desastre, con cajas de pizza por todo lado, crispetas encima de la  cama y no faltaba más, Yulian derramó gaseosa en la cama y tuvimos que cambiar las sábanas, pero todo fue muy divertido me olvide de todos mis problemas, pero no todo puede ser alegría, a medida que la noche iba pasando y dejamos de ver películas las lágrimas empezaron a rodar mis mejillas, enserio era tan difícil asimilar todo.
Los brazos cálidos de Yulian me rodaron rápidamente y su calor corporal me da tranquilidad.
- Estarás bien Mar, todo es cuestión de tiempo, veraz que sanará rápido y ya no dolerá.
Mis lágrimas no cesan y ahora mis ojos ardían, siento que no puedo hablar, las palabras se quedan en mi garganta. Pero logro articular unas palabras que salen de lo más profundo de mi corazón.
- ¿ Ysi ya no sana Yulian?, ¿y si ya no vuelve a sanar?, espero respuesta de mi amiga y  en su triste mirada no hayo ninguna, abrazo muy fuertemente a mi mejor amiga y me aferro tanto a ella que mis ojos se empiezan a cerrar inmediatamente, sus suaves manos se pasean por mi cabello y el arrullo de sus labios me hace caer en un sueño profundo.