FAIRY ELEMENTS

CAPÍTULO 4

CAPÍTULO 4

Hola, siento mucho la demora. La verdad es que no tengo excusas, salvo que soy muy perfeccionista y sólo subo algo cuando me gusta al 100%. Este capítulo esta largo, 10 hojas en Word, es por que en el se enteraran de algunas cosas. También conocerán a algunos de mis personajes favoritos, los hermanos Green. También les informo que estaré subiendo dibujos de los protagonistas a mi Instagram (Hechos por mi) para que vayan viendo la apariencia de cada uno. Son varios. Creo que eso es todo lo que tenía por decirles. EL PRIMER CAPÍTULO TIENE MÁS DE 200 VISITAS!! enserio gracias a todos los que aguantan la espera. Sin más que decir... disfruten del capítulo.

~MishiHoran39

CAPÍTULO 4

Jade abrió los ojos.

Estos estaban irritados, por lo que tuvo que parpadear varias veces para enfocar su mirada. Lo primero que vio fue un alto techo de madera sujeto por tres grandes estructuras en forma de T. Deslizo su mirada hacía su derecha. Literas de metal a 5 metros de distancia cada una, eran simples, con sabanas blancas y una mesita de noche. Casi todas estaban vacías a excepción de una. Un chico unos años mayor que Jade estaba acostado dos literas a la izquierda y la miraba fijamente.

Era guapo. Aunque todos los chicos que había conocido anteriormente lo eran. Tenía el cabello ondulado, castaño y con algunos destellos rubios. Sus ojos eran verdes, como las esmeraldas, ocultos tras unas largas pestañas rizadas. Poseía una mirada picara y cuando le sonrío a Jade unos grandes hoyuelos aparecieron en sus mejillas.

Al fin despierta la Bella durmiente, me preguntaba cuando lo harías. Es molesto estar aquí sin nadie con quien hablar. — su voz era ronca y pausada, como si al igual que Jade, acabase de despertar.

¿Que día es hoy?— su voz salió un poco rasposa, como si llevara tiempo sin hablar.

EL chico le dirigió otra sonrisa de hoyuelos y contesto:

Hoy es martes, cariño. SI te refieres a cuanto llevas dormida te diré que unos dos días, si contamos que llegaste en la madrugada del Domingo.

¿Dos días?, Jade pensó que era muy poco tiempo, había sentido que había pasado mucho tiempo desde la última vez que había abierto los ojos. Lo último que recordaba era el caer al suelo, después todo se había vuelto muy extraño.

Había sentido como alguien la llevaba en brazos, muchas voces se habían sumado a las de Christopher y Edward exigiendo respuesta a la situación. Las respuestas del primero eran cortas y esquivas. Debían de haber transcurrido unos diez minutos antes de que sintiera el algodón contra su piel, manos extrañas habían examinado su cuerpo, manos frías y largas. Un extraño calor se había expandido por todo su cuerpo al contacto con un extraño objeto colocado en su muñeca izquierda, era alguna clase metal, pero este tenía una sensación extraña contra la piel de Jade. No había podido abrir los ojos en todo ese tiempo. Después habían llegado los sueños.

Eran casi las mismas de siempre, Jade las había tenido desde niña y nunca les había dado ningún sentido, pero esa vez había sido diferente. En sus sueños Jade siempre miraba el mundo desde los ojos de otra persona, ella tenía su misma apariencia, tenía el mismo cuerpo menudo, las mismas caderas y busto prominente, el cabello castaño le llegaba hasta la cintura rizándose un poco en las puntas. Su cara tenía altos pómulos y grandes ojos violetas ocultos tras unas pestañas rizadas y cejas arqueadas.