''The kind of smile that would be cruel not to kiss'' - Atticus
Las cosas no podían seguir igual por siempre, lo sabía, ambos lo sabíamos. Solo quedaba esperar al verano y descubrir que suponía eso para nosotros.
"Everything good, everything magica...
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CAPITULO UNO: EL REENCUENTRO
Verano. Normalmente sinónimo de mar, sol y mucho, mucho calor. Para mí, sinónimo de Cousins, los Conklin y los Fisher. Probablemente mis personas favoritas en el mundo.
Solemos reunirnos todos los veranos en la casa de la playa de los Fisher. Cinco niños problemáticos, tres madres descontroladas y los padres, que nos visitan al final del verano, por lo tanto no cuentan realmente.
No recuerdo un año en el que no haya contado los días para volver a ese lugar. Pintar atardeceres con Susannah, leer en el columpio de la entrada por la noche con Laurel, cantar a todo pulmón en el coche con Jeremiah, guerras de almohadas con Steven, comer masa de galletas de madrugada con Belly, ir por las mañanas a comprar muffins con Conrad, y bailar por todo el salón con mi madre.
Es lo mismo todos los veranos. Como volver a casa después de haber estado fuera por un largo tiempo. Y aunque el camino es largo, merece la pena. Al final son ellos. Siempre ellos.
[...]
—¿Gusanitos?
—Y coge también una Coca Cola.
—¿Cansada, mamá? Quizás deberíamos parar un rato, debería haber pensado en que la edad iba a llegar a afectarte en algún momento...
—¿Quieres acaso conducir tú durante seis horas seguidas, sinvergüenza? —respondió ella pellizcando un poco mi brazo, a lo que escapé corriendo al interior de la tienda.
El camino hasta la casa de la playa era algo largo y tedioso, pero estar con Eleanor solía hacerlo todo más ameno. Aprovechábamos las horas para hablar sobre la última película que vimos la noche del sábado, turnarnos para poner canciones, y comer cualquier cosa alta en calorías que ofrecieran las gasolineras en las que parábamos.