En un mundo repleto de corrupción tiene que haber un mediador, y no, no estoy hablando de Dios.
Cuatro personas, cuatro personalidades distintas, cada uno conectado al otro por diferentes motivos.
La primera: Adara Nessa. Peligrosa, letal, fría, cr...
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Adara.
Con la ayuda de Declan y Contad, me trasladaron a la cama de mi habitación para estar más cómoda.
El helicóptero ya se estaba dirigiendo a Paxton para traer a Cleo hasta la cárcel, no iba a perder tiempo para que pudieran hacerle daño. Se viene hoy mismo.
Kavan estuvo de acuerdo, la quiere a salvo y lejos de Paxton, él quiere tenerla protegida tanto como yo.
—¿Cómo está el testigo? —pregunto a Contad que me da de comer una sopa caliente.
Cony llevó a Declan para almorzar mientras yo hablaba con Contad sobre la cárcel.
—Está en la casa de seguridad, le hemos estado mostrando varias fotos de algunos sospechosos y trabajadores de Veron pero ninguno parece ser el correcto.
—Quien sea que haya matado a Dorian, tuvo que haber sido la mano derecha de Veron, el supuesto... Diablo. Nadie sabe quién es realmente, debe ser alguien que use nombres falsos y quizás no deja mostrar nunca su rostro. Puede ser cualquier jodida persona.
Contad me da otra cucharada y abro la boca con disgusto.
No me gusta estar tan débil.
—¿Crees que el segundón y ese tal Diablo sean la misma persona? —niego.
—El segundón se está escondiendo, el Diablo parece estar oculto desde siempre. Son dos personas y dos casos distintos.
—¿Estás segura que no se relacionan?
No digo nada porque realmente no lo sé, es primera vez que estamos tan perdidos en un puto caso que debía ser fácil.
Es solo un jodido civil inculpado de matar a otro civil, pero aparentemente hay algo mucho más profundo detrás que incluye mafia, pandillas, gente que no tenía idea que existía e incluso puede que mi padre esté en medio de todo esto.
—¿Que hay de las llamadas del teléfono de Brandon?
—Lanay ha estado muy ocupada administrando la cárcel, no ha tenido tiempo de seguir intentando descodificar ese número.
Abro la boca para otro bocado.
—Parece que estamos más lejos que cerca de saber la verdad —mis hombros se hunden sin poder evitarlo.
—Haremos todo lo que podamos, Adara. Te lo aseguro —asiento.
Si no podemos averiguar quien mató a Dorian Finnegan, entonces deberé darle una nueva identidad a Declan y mandarlo lejos de Paxton.
Aunque me cueste mucho hacerlo.
—¿Cómo lo está llevando Lan? —pregunto, cambiando el tema.
—Me dijo que le diste permiso para sacar a uno de los de arriba —asiento.
