La reina del invierno

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Frida Smith:

-Bien soldados -murmuré viendo aquel grupo dé hombres ante mi- esto no es como las otras guerras que luchan, esta ves tal vez no tengan tanta suerte como en las otras, pero que algo les quede claro, para mi son solo hombres y soldados, no importa que sean tenientes -mire al teniente- no importa cuanta medallas de honor o cuántos reconocimientos les hayan otorgado, para mi solo son carne y músculo, espero que se hayan despedido de sus familias -empecé a caminar más cerca de ellos- si tienen esposas de ellas, si tienen hijos de ellos, si tienen una prometida -me detuve al lado de Barnes- o si tienen un par de conquistas -lo mire fijamente- espero que se hayan despedido, como si nunca volverán, porqué hay una gran posibilidad de que no vuelvan a ver a esas personas, espero de que la noche anterior hubieran tenido un noche entretenida -seguí caminando- porqué hoy aquí y ahora ya no son más que soldados antes mis ojos, la mayoría me conoce y a los que no, soy __ Smith, Jefa de las armadas, no les daré todo mi historial, pero escuchen esto, si deciden provocarme o decir algo ofensivo acerca de que soy mujer, les meteré diez balas por el trasero, ¿entendió?! -grite más fuerte-

-Si señora! -gritaron todos-

-Irán haya y morirán siendo héroes o cobardes?! -me colocó frente a todos con mi semblante serio-

-Héroes! -gritaron-

-Que así sea entonces -murmuré sería-

(...)

-Aun se puede ir a casa señorita -murmuro un general- no necesitamos a una mujer, menos a una rusa enemiga -suspire molesta y me gire a él-

-El gobierno me puso al mando -dije molesta- el gobierno decidió que yo estuviera aquí, ayudando a detener al enemigo, tal vez si sea una rusa, pero por derecho legal soy ciudadana americana y peleó mucho mejor que usted y si tiene alguna queja dígaselo a quien me puso al mando y a mi me deja de joder la existencia -pase a su lado y me dirigía hacia los soldados- Señores! -todos se giraron a mi- avancen.

(...)

-Tiene sed? -preguntó una voz a mis espaldas que reconocí al instante-

-Por que no duerme Barnes?, solo son dos horas de descanso -murmuré sin girarme-

-Bueno nadie puede dormir cuando está camino a la guerra -murmuro sentándose a mi lado-

-Deberían, y no deberían temerle a la muerte, ella siempre llega -escuché como suspiraba-

-Tal vez pero también son humanos, al igual que usted -me gire a él con un semblante serio-

-¿Que quería Barnes? ¿Ofrecerme algo de tomar? ¿Platicar conmigo?

-Ambas -murmuro viéndome- mire no sé el porqué le caigo mal, se que ninguno le cae bien pero conmigo es más ¿por que?

-No me cae mal Barnes, solo que su reputación no es la más adecuada -volví la vista al cielo-

-Bueno yo no la juzgo por su reputación -aseguró-

-Deje de prestarle atención a lo que decían de mi hace tanto -asegure- ademas que yo me baso con lo que veo, no lo que escucho -murmuré-

-Así que me a visto.

-Es difícil no verlo -asegure-

-Bueno aún que lo parezca, no es lo que de verdad soy -aseguró-

-Y que es Barnes? -me gire a él y sonrío-

-Un buen tipo, alguien que quiere una buena esposa, formar una familia, ser feliz con alguien -rio ligeramente- alguien como mi madre.

-Como era su madre Barnes? Si se puede saber -el sonrió-

-Hermosa en todo los sentidos, buena, perfecta -aseguró- mi madre era una mujer fuerte, gentil, amigable pero persistente, era una de esas mujeres que no se dejaban de los hombres y no creían que las mujeres solo eran para la casa, siempre creyó que las mujeres podían hacer más que los hombres, así era -sonríe- creó que usted le hubiera agradado demasiado.

-Así era la mía -asegure- persistente, fuerte, mi padre me dice que soy igual a ella -el me miro con una sonrisa-

-Bueno su madre debe ser una mujer fuerte -lo mire sería-

-Era Barnes -el me miro triste-

-Lo siento no tiene idea -negué-

-Descuide Barnes -suspire-

-Mi madre también falleció -dijo triste- Cáncer, hace unos años, aún la recuerdo a la perfección -murmuro viendo el cielo- Y la suya?

-Asesinato a sangre fría -susurre- debe conocer mi historial -el me miro- mi padre fue catalogado como traidor, así que muchos lo buscaron, años más tarde cuando yo tenía 5, entraron a nuestra casa, mataron a mi madre, desde entonces convencí a mi padre de que me enlistarán en él ejército, años más tarde o más específica hace dos años me convertí en la Mayor Smith, ahora estoy aquí tratando de mantenerla orgullosa de donde quiera que esté -suspire- Descanse Barnes -me puse de pie-

Cuando me empecé alejar el me detuvo y se puso de pie a mi lado.

-Se que no me creerá pero, después de que ganemos, la invitaré a un cita -lo mire confundida- te dije que mi madre le hubieras agradado.

-Que insinúa Barnes? -el sonrió-

-Que aún que ella ya no esté aquí, cumpliré su última voluntad -aseguró-

-Que era...?

-Tener a una mujer que valga la pena -lo mire directamente a los ojos- y tu eres esa chica -sonríe un poco pero rápidamente borre esa sonrisa-

-Descanse Barnes -empecé a alejarme-

-Descansa futura esposa! -me grito-