EL FUEGO DEL AMOR

16: AMOR

ANNE

El Año Nuevo ha pasado, estamos 24 de enero, no he sabido nada de Adrien, lo cual es mejor, dejé a manos de Robert y mis hermanos, para que se encarguen, ya que eso me puede alterar todo.

Ahorita estoy comiendo una ensalada que me compro Robert, ya que él no me deja comer nada de dulce hace una semana, ya que en fin de año, me sobrepase demasiado.

Estoy en la oficina de Robert, los padres ya le dejaron a cargo la empresa, ese fue su regalo, y al ser único hijo, también.

- Comete el tomate -dice viendo unos papeles

- Como me ves -digo aterrorizada ya que el tiene la vista en la computadora

- No necesito verte, para saber que no te has comido el tomate -dice y reniego- Venga, hazlo.

Como en poco porciones, y lo termino.

- ¡ahora mi postre! -digo extendiendo mi mano

- Ten -me da una bandeja y veo una ensalada.

- ¿es una broma no? -digo

- Nop -dice guiñándome el ojo

- Me dijiste si te comes todo, habrá postre -digo

- Si, pero nunca te dije helado -dice

- Me harás venir el bebé -digo llorando

- No ya me hiciste eso el otro día -dice serio

- me iré!

Me levanto y me marcho de allí, veo que no me persigue y eso me molesta más.

Ya todos saben que estoy embarazada, eso fue tendencia, ya que al saber quien era el padre, todos los latinos comenzaron a entrevistarme, Robert no me dejaba estar mucho tiempo en las pantallas, ya que mi estado no era el correcto.

Aunque en las televisiones me veía como toda una perra empoderada.

Llego a la cafetería y pido un pastel de chocolate con un vaso de leche.

- ¡largo! -gritan

Todos comienzan a salir apresurados, y una sombra se coloca frente mío.

- ¿qué crees qué haces? -dice frente mío

- Comiendo -digo obvia

Me quita la leche y el pastel, lo miro serio.

- dame -digo

- Estás a punto de parir -dice besándome- Sabes a chocolate...

- Imagínate tener chocolate en mis senos -digo susurrando excitada

- No podemos...

- Entonces me iré, a ver quien me las quiere chupar -digo- Si tu no puedes, otro lo hará.

- Ni se te ocurra hacerlo, otro hombre nunca tocará tu cuerpo -dice- ¿sabes que? Trepate a la mesa y abre tus piernas.

Me ayuda y soba mi barriga, mete sus dedos dándome placer, afila su miembro y me lo mete por completo. Y es ahí, donde me llena por completo.

***

- Dios.. -dice besando mis tetas- Deliciosas

- Lo se -digo lujuriosas- hicimos un desastre....

- más tarde lo limpian -dice el

Me ayuda a arreglarme, cuando salimos, nadie se encuentra allí, tengo vergüenza, así que camino con la cabeza bajo.

- No bajes la cabeza, nunca lo hagas, eres Anne Capponi de Dos Santos, la mujer más poderosa de toda Latinoamérica, mi mujer y madre de mis hijos -dice besándome

- ¿hijos? -digo

- Claro... por lo menos 6 hijos -dice pensativo....

- No es nada verdad -digo sarcástica

- Es temprano... primero vamos con el primogénito -dice

- Quiero la niña -digo en puchero

- Tendrás la niña -dice feliz- ven , vamos a mi oficina, quiero hacerte el amor.

Llegamos a su oficina y me hace de nuevo el amor, no lo niego, todos los días me trae a su oficina, contrato a un chef para que yo le pida la comida que se me antoje, claro que sea sano,
tengo mi propia oficina, la cual está conectada con la suya, el bebé tendrá su propio espacio, Robert ha amueblado todo para el ambiente del bebé, Manzo a construir una habitación para el bebé, como también en cada empresa Capponi, hay uno, para los nietos.

- ¿qué piensas? -dice mientras me besa el cuello

- En nosotros -digo gimiendo

- Falta poco, para que nazca -dice besándome

- Mi príncipe -digo y ambos llegamos al orgasmo.

- Nuestro -dice y ambos nos acostamos en el amplio sofá.

Soy feliz.

***

Aquí estuvo Ale