Ansatsu no Oji Hatake Yuma

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Era como estar en el espacio, no sabia donde estaba, no sabia determinar si estaba mirando hacia arriba o hacia delante. Lo que sabia era que en ese lugar se sentia libre, ya no sentia tanta presión y eso le alegraba. Pero sabia excatamente donde se encontraba, era la casa en la que crio a Naruto.

- Yuma-chan, ¿que haces aqui? dattebane- pregunto una voz dulce la cual logro identificar como Kushina Uzumaki. El peliblanco se dio la vuelta y encontro aquel cabello rojizo que tanto habia extrañado.

- ¿Kushina-nee-san? - murmuro Yuma mientras que gruesas lagrimas amenazaban con caer de sus ojos- ¿Que es este lugar?- cuestione mientras se acercaba a la pelirroja la cual lo esperaba con los brazos abiertos.

- Piensa que estas en casa, es tu zona segura, nosotros estamos aqui. Estamos contigo- hablo Kushina acariciando el rostro de Yuma- mira lo guapo que te has vuelto. Tienes los ojos más azules que Minato- elogio Kushina cogiendolo del brazo-¿ nos sentamos y esperamos al resto Yuma-chan? - no habia duda era Kushina Uzumaki la que yacia delante suyo, era la misma sonrisa, el mismo rostro y las mismas palabras que Kushina usaba con el.

- ¿Como es esto? tu falleciste, por culpa del Kyuubi- dijo Yuma con voz debil, dandose cuenta de que hacia mucho que no lloraba.

- Eso te lo dire cuando estes a punto de despertar. Por el momento disfrutemos el tiempo que tenemos Yuma- contesto Kushina sentandose al lado del peliblanco.- Al parecer ya estan llegando - susurro la pelirroja.

- Yuma-chan, has crecido muchisimo- dijo una voz  a las espaldas de ellos dos, el peliblanco giro la cabeza y se encontro con Mirika Nara su primer sensei- Me alegra ver lo guapo y fuerte que te has hecho.- Yuma estaba paralizado, aun no se creia lo que estaba viendo- No vas a abrazar a tu sensei- bromeo Mirika.

El peliblanco salto de donde estaba sentado y se lanzo a abrazar a la jounnin. Una sonrisa habitaba en el rostro de la Nara, ella repartia leves caricias en la espalda y cabeza de Yuma dandose cuenta de lo solo que se sentia. 

- Mirika-sensei, acordamos que llegariamos todos juntos- reprocho Akira Yamanaka la cual sonrio al ver la cabellera blanca- No has crecido nada, aún sigues siendo un enano Yuma-chan- la rubia abrazo a Yuma apegandolo a ella. Era reconfortador para Yuma estar con ellas pero habian gente que queria ver.

- Yuma, ¿quieres de mi bolsa de patatas?- las palabras de Saburo Akimichi resaltaron y Yuma se despego de Akira para lanzarse a llorar en los pies de Saburo.- No fue tu culpa Yuma, estabamos acorralados y no teniamos oportunidad de sobrevivir, me encanto pasar mis ultimos momentos contigo- susurro Saburo dandole un golpecito en la frente a Yuma un gesto cariñoso entre ellos.

- Hatake-chan, mucho tiempo sin vernos- una sombra aparecio al lado de Saburo- Todos los de aqui te hemos extrañado mucho pequeño- Esas palabras eran del indudable Kiyoshi Hyuga quien sonreia en la dirección de Yuma.

- Kiyo- susurro Yuma y a paso lento se acerco a el y unieron sus labios. Yuma y Kiyoshi eran la persona correcta pero en el momento incorrecto. El beso era dulce, un beso que no habian tenido tiempo de darse porque el Hyuga fallecio, era un sueño del cual Yuma no queria despertar.

- Yuma mi niño bonito- llamo Rin, la chica que estaba enamorada de su hermano- Estas casi más alto que yo- dijo en una carcajada la castaña

- Rin-chan- susurro, a la par que Rin besaba la frente de Yuma como cuando era un niño pequeño- dijiste que volverias de aquella mision- murmuro contra el hombro de la femenina.

- ¡Tadaima!- grito cierto rubio que entraba a la habitación en la que estaban. Colgo la toga de hokage en un perchero.

- Minato-nii-san- lloriqueo Yuma mirandolo. No espero un solo segundo y se lanzo a abrazar al rubio quien lo recibio con los brazos abiertos. Despues de todo Yuma era como el primer hijo que tuvieron Kushina y Minato.

- Ay, mi pequeña bola de pelo albina- susurro el Yondaime mientras acariciaba su cabeza- Eres enano, feo y marrón- bromeo Minato haciendo que Yuma hiciera un puchero.

- Y tu un rubio tonto- golpeo Kushina la cabeza a Minato mientras decia esas palabras.- Bueno ya estamos todos, vamos a sentarnos ¿os parece?- sonrio Kushina a la par que aparecia una mesa con los asientos exactos y con mucha comida  de primera calidad.

Comieron todos juntos con mucha felicidad, entre bromas y risas. Recordando los antiguos tiempos en los comian todos juntos celebrando que habian acabado una mision juntos o cuando derrotaron entre todos los chunnin y genin a Mirika y Kushina en un entrenamiento. Los momentos entre todos ellos eran felices y aunque hubieran algunos que destrozaban el corazón de Yuma, siempre se curaban al escuchar la voz del fallecido.

- Oh, cierto, tu pregunta Yuma-  dijo Kushina y todos voltearon a ver al peliblanco- ahora te la contesta Minato y Mirika - asenti y mire a los dos esperando a que uno empezara.

- Empiezo yo- dijo Minato - Todo empieza con tu clan, no el Hatake sino el Kuromane, tu clan fue uno de los fundadores de Konoha y practicamente se extinguio en la segunda guerra ninja. Aparte de tener mucha resistencia, chakra y unas habilidades sanadores increibles, ellos poseian un Kekkei Genkai HITODAMA NO KYUSHEISHU.  Significa el salvador de almas humanas. La razón por la que este clan era tan grande era porque poseian la capacidad de ver a las personas que más queria y que ahora estan fallecidas. Un ejemplo somos nosotros. La habilidad de tu Kekkei Genkai, es poder revivir a una persona a cambio de la mitad de tu vida, es decir si podias vivir cien años, al usar este Kekkei Genkai falleces a los ciencuenta y no puedes hacer nada por evitarlo. La cantidad de almas que puedes almacenas son limitadas, de hecho a ti solo te queda una plaza, que esperemos que nadie la ocupe. - explico Minato y miro a Mirika.

- Ahora mismo lo que puedes hacer es revivir a uno de nosotros, aunque es practicamente mentira la verdad.-Mirika rectifico de inmediato- Es decir si puedes revivir a alguien, pero en este caso hay una excepción. Sabemos que albergas vida en tu interior, asi que puedes usar su Kekkei Genkai para revivir a otra persona y la excepción es que el Kekkei Genkai no afecta cuando eres un feto, solo puedes usar el Kekkei Genkai dos veces en tu vida y cuando eres un feto tu tiempo de vida no esta determinada, asi que por eso puedes revivir a alguien. Eso lo descubrimos porque tu madre Lilith Kuromane revivio a Sakumo y tu a tu hermano  Kakashi. Ellos dos murieron en un ataque cuando ellos dos estaban entrenando, Lilith presencio eso y tu tambien. Asi que basicamente gracias a ti, tu hermano ha vivido 21 años más y los que le quedan- rio Mirika.

Debia escoger a alguien que tendria que revivir.

- Minato, te necesito- todos aceptaron su respuesta  pero aún seguian intrigados por la siguiente persona.

- ¿Quien es la siguiente persona Yuma?- preguntaron todos a la vez.

HOLA HOLAAAAAAA

La ultima pregunta va para vosotros, quien quereis que reviva. 

Mirika Nara 

Kiyoshi Hyuga

Kushina Uzumaki

Saburo Akimichi

Akira Yamanaka 

Rin Nohara

Tengo mucha curiosidad para ver a quien escogeis.

BESITOS MUAJ MUAJ