No quería abrirle, no quiero que nadie me vea así y mucho menos Jason. Me cubrí con las sabanas y me limpie las lágrimas.
Lo que más me dolió, no fue que Adam admitiera que también le gustaba Lisa, al contrario, fue la puñalada por la espalda que me dio Lisa. Esa perra, yo apenas que la estaba considerando mi amiga.
De pronto escuche la manija girar y la puerta abrirse.
OMG! NO LE HABÍA PUESTO SEGURO A LA PUERTA, QUE TORPE
La puerta se cerró.
-Annie, te encuentras bien- dijo Jason sentándose en la cama. Claro que no estoy bien pero no quería que él lo supiera, además de que mi voz de seguro se escucharía quebradiza y triste obviamente, porque bueno lo estoy pero no quiero que él lo sepa y no quiero que me escuche así. No quería hablar no lo iba hacer.
-Puedes contarme lo que sea, confía en mí- dijo y luego se levantó un poco la sabana, estaba intentando quitármelas para poder verme, pero yo no lo iba a dejar que lo hiciera.
-¡Nooo!- grite sujetando más fuerte las sabanas.
-Vamos no puedes quedarte ahí todo el tiempo- dijo tratando de quitarme las cobijas de encima y sacarme de ahí.
-Pero...- dije y después me detuve porque mi voz sonaba realmente mal.
Ya casi terminaba, estaba a una nada de sacarme de la cama mientras que yo estaba sujetándolas lo más fuerte que podía, creo que hasta ya la eh roto un poco con mis uñas.
Esto se estaba convirtiendo en una guerra, muy injusta podría decir yo, porque él es deportista, hombre, fuerte, musculoso y yo solo una chica.
-Me estas lastimando...está bien tu ganas- me rendí y salí de la cama, luego me senté cubriendo mi cara con mis manos y la cabeza baja.
Él se acercó a mí y me abrazó rodeándome con su brazo izquierdo.
-Ya quieres decirme porque lloras- dijo Jason.
-Mmm... yo no estaba llorando- le mentí.
-Ohh, por favor, claro que lo hacías- luego saco un pañuelo en su bolsillo y me lo dio.
-¿Siempre llevas pañuelos?- le pregunte desconcertada, porque bueno, que hombre lleva un pañuelo hoy en día.
-No, lo tome antes de entrar aquí- me respondió.
-¿Y esta usado?- pregunte asqueada con una mueca en el rostro.
-Claro que no- dijo desconcertado mientras reía - ¿y ya me vas a decir porque esta triste?- dijo y luego me tomo la cara con su mano mirándome a los ojos- quiero que me mires, cuando me lo digas.-
- Pero yo no...- dije serrando los ojos con mucha fuerza.
-bueno solo dime- me dijo Jason
-Me acorde que nunca encontraron al perro del novio de Jenny- le mentí, no le iba a decir que estaba llorando por el idiota de...aaghgg no, ya no puedo decir su nombre.
-Claro que no es por eso, me estas mintiendo- dijo poniendo los ojos en blanco.
-Claro que si- dije segura y firme
-Me estas mintiendo- dijo alzando las cejas - tu odiabas a ese perro, siempre te robaba tu comida y mordía tus zapatos.
-Déjame en paz, tú no estás en mi cerebro- dije sonando muy infantil.
-Ya, es enserio- dijo serio
-Bueno es que cuando....cuando...aahhh- trate de decirle pero no puedo ahora que lo intento de decir en voz alta es muy tonto -no puedo.-
-Está bien pero solo quiero que me respondas algo
-¿Qué?
-Todavía te gusta Adam- dijo desilusionado, y en ese momento mi corazón se detuvo.
-¿Y tú como sabes eso? - dije desconcertada y muy apenada.
-Tú y Alice no son muy discretas que digamos- me soltó la cara y bajo la cabeza encorvándose de hombros. Y ahora que le dijo, esto es demasiado incomodo, y él se ve triste, porque esta triste va hacer que llore de nuevo, porque me pregunta eso.
-¿y?-dijo desesperado -no me vas a contestar.
-No- dije por fin - él es todo un cretino - él todavía estaba mirando al suelo y no me respondía nada, eso me enfureció un poco -no como tú- dije tocando su hombro con mi mano. Se le ilumino el rostro y me volteo a ver llevando de nuevo su mano a mi cara.
-¿Enserio?- me pregunto y le respondí con mi cabeza, Jason me miraba fijamente y yo a él.
En ese momento mis problemas y preocupaciones desaparecieron, en lo único que pensaba eran en sus hermosos y brillantes ojos, cuando él bajo la mirada a mis labios, sus labios rozaron con los míos y escuche la puerta abrirse, los dos nos alejamos y miramos a la puerta.
-¡¿Qué están haciendo?!- nos preguntó Alice sorprendida y con una sonrisa en el rostro.
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El chico del que me enamoré
RomanceAnnie es una estudiante de décimo grado, ella es una persona sincera, delgada, con un hermoso cabello marrón, divertida, coqueta, alegre, tímida en ocasiones pero cuando quiere puede ser totalmente atrevida. Alice, la mejor amiga de Annie. Es totalm...