"¡Cómo quisiera confesarme ahora mismo! No quiero esperar más, quiero saber qué sientes por mí. No importa lo que cueste, ni el orgullo, ni la timidez. Quiero ver tu expresión y tus labios pronunciando lo que quiero escuchar. Cómo anhelo un abrazo tuyo, sentir que mi intenso corazón se completa al calor de tu cuerpo". "Cada parte de mi ama todo de ti..."
Impaciente espero el momento del día que paso contigo.
-¿Vamos? -preguntó Mikael.
Celeste dejó su cuaderno y cubrió todo lo que había escrito. Se sonrojó y extendió su mano hacia la de Mikael, él la esperaba con una dulce sonrisa, esa sonrisa que la mataba de a pocos.
-¿Qué escribes? -Mikael tomó el cuaderno y antes de que leyera una palabra Celeste se lo quitó rápidamente.
-Mm, nada... es un trabajo. -mintió.
-Pues te veías muy sonriente haciendo un trabajo.
-Bueno, la verdad es que son mis escritos personales.
-¿Para alguien en especial?
-Eso creo.
Mikael apretó las sonrojadas mejillas de Celeste. Esos pequeños y tiernos detalles la van a matar.
-Con esto será suficiente para estar en las nubes mínimo una semana, ¡es hermoso! -dijo Amy dando saltitos de felicidad.
"Quiero besarle, quiero que en un beso entienda todo lo que he callado, todas las palabras que están atrapadas en este cuaderno. Ahora o nunca. No hay fuerza de atracción más grande que su mirada cuando sonríe".
