Jimin le gusta jugar con las mujeres, ama tener sexo con ellas y ya, incluso cuando tiene "novia", pero aparecerá una chica que hará que este jugador pierda en su propio juego.
Una historia de mi completa autoría.
Contenido +18.
No acepto copias ni...
Me alejo de sus labios para respirar, mis manos aún están en sus mejillas, nuestras respiraciones están agitadas y mezcladas.
—¿Por qué me besaste? -ella me pregunta.
—No pensaba en hacerlo, sabía que estabas casada, así que pensaba simplemente olvidarte, pero hoy ese hombre entra y me dice que estos son tus papeles de divorcio y la emoción de que eres libre y podré conquistarte de nuevo, me puso muy feliz -le sonrío pero ella permanece seria.
—Jimin, simplemente no te creo, me cuesta hacerlo, temo intentar algo y que me dejes un día sin más aviso y yo quedaré de nuevo con el corazón roto -yo acaricio sus mejillas.
—Entiendo y no te voy a presionar, pero solo dame una oportunidad más para probarte mis sentimientos -ella no dice nada cuando un toque en mi puerta nos llama la atención, yo voy hasta el escritorio y le paso la carpeta- Pase.
—¡Jimin! -Suzy entra armando un escándalo como siempre, Chloe sale dejándonos a solas.
—¿Qué quieres, Suzy? -a ella la conocí cuando comencé aquí, es hija del CEO y pues ha tenido una fijación conmigo, pero muchas lo han intentado pero yo ya no puedo, no se me pone duro.
—Sabes lo que quiero, vamos a cenar después de que salgas de aquí, ¿Si? -me agarra del brazo y tocan la puerta y Chloe entra, intento hacer que me suelte pero Suzy solo me sujeta más fuerte.
—Señor, recuerde que dentro de 15 minutos tiene que estar en la sala se conferencias -yo asiento y quito la mano de Suzy de mi brazo.
—Suzy como ya has notado, estoy ocupado y no tengo tiempo, si quiere puedes invitar a Namjoon, él siempre ha querido unirse -le palmeo la espalda y salgo hacía la sala de conferencias para ser seguido por Chloe.
—Pero señor, puede salir con su novia después del trabajo, hoy no tiene nada importante después de las 4pm -dice ella viendo la pequeña libreta dónde tiene mi agenda.
—Ah, si es así, entonces debería salir con ella, ¿No crees? ¿Debería volver a cómo era antes? -la veo morderse el labio inferior- Te dejaré esto en claro, no tengo novia y estoy en proceso de conquistarte así que deja de decir esas cosas o tendré que castigarte.
Por el vidrio del elevador puedo ver cómo lame sus labios, así que le gusta la idea que la castigue, pues no tendré problemas en hacerlo. Entramos en dónde veremos la conferencia y ella se queda de pie a mi lado, la conversación fluye muy bien, cuando ella se acerca para dejar unos papeles en mi lado, con mi mano suavemente acaricié sus piernas pero solo hasta las rodillas, ella me mira pero yo disimulo dándole las gracias y ella sonríe. Eso pienso hacer jugaré con ella hasta que se entregue de nuevo a mí y creo que le pediré que sea mi novia más adelante.
La reunión termina y es hora de ir a casa, apenas termina de guardar sus cosas, me acerco al escritorio de Chloe.
—Señorita, necesito que me siga, es de suma importancia -lo hice sonar como si fuera de trabajo.
Ella se levanta y me sigue, ella me mira de manera extraña cuando llegamos al estacionamiento.
—¿Qué es esto, Jimin? -le abro la puerta del copiloto.
—No se preocupe, es solo que no es en la compañía. Ahora entra -señalo el asiento y ella suspira pero al final termina cediendo.
El camino hacía el lugar dónde quiero llevarla, es totalmente en silencio, ella se aferra a su bolsito como si su vida dependiera de ello, supongo que está nerviosa, llegamos a la torre Namsang y ella se queda mirandome.
—Solo sígueme -la tomo de la mano y vamos subiendo.
Hay reservado todo ese piso, ya tenía la cena, las velas en todo el lugar y la vista de Seúl, luego la llevaré afuera y allí veremos el atardecer y como la noche cae en Seúl.
—Oh, Jimin es hermoso -dice mientras sus ojos recorren el lugar, el cuál está todo adornado.
—No tan hermoso como tú -dije sacando la silla para que ella tomara asiento.
Procedo a traer el carrito con la botella de vino y paso a servirlo, luego tomo los platillos y los voy colocando cada uno en la mesa. Cuando termino tomo asiento frente a ella, se nota que le gusto así que la sonrisa de bobo enamorado no se me quita de la cara.
—¿Te gusta? -ella asiente.
—Todo está muy lindo Jimin, pero no te será tan fácil -dice mordiendo su primer bocado y yo solo comienzo a reír.
—Tranquila, está no será la única cita. ¿Pero me creerías si te digo que eres la primera chica con la que salgo en citas? -sus ojos se enfocan en mí.
—¿En serio? -yo asiento llevando un bocado a mi boca- ¿Y Hanabi?
—Hanabi era mi novia para que ella sintiera que lo era, solo era un título, para mí ella nunca lo fué, nunca lo sentí así y ella sabía que yo me sentía así y me dijo que no le importaba con tal de tenerme -ruedo mis ojos.
—¿Y qué has hecho?
—Desde la última vez que nos vimos, no mucho, terminé mis estudios, tuve que ir al psicólogo, cuidar de mi madre hasta que comencé a trabajar hasta llegar a dónde he estado hoy -ella toma un sorbo de vino- ¿Y tú?
—Pues decidí estudiar, o retomar mis estudios, conocí a mi esposo, ahora ex esposo, éramos felices o así lo creía yo hasta que descubrí que me engañaba con varias, nunca tuvimos hijos, gracias a Dios, porque no me gustaría saber que él es el padre -ella mira por la ventana y luego a mí- Siempre quise un hijo mitad Coreano.
Una sonrisa apareció en mi rostro, ¿Acaso me está diciendo de manera indirecta, que quiere que sea el padre de sus hijos?
—Solo es cuestión de intentarlo...
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