Capítulo 4

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Precaución: esta historia puede contener: suicidio, violación, homicidio, Satanismo, prostitución, acoso, pedofilia y canibalismo. Lee bajo tu propio riesgo, esta historia podría calificarse para mayores de 25 años así que decide bien si quieres leer.

Título: Peligrosas, parte 2

"las mujeres siempre haríamos lo que fuera por obtener un lugar que nos merecemos, por recuperar algo que nos pertenece, una mujer puede usar bien un alfiler para arreglar tu ropa, y también puede dejarlo en tu comida y esperar a que te lo tragues y tu garganta se desgarre, una mujer puede envenenar tu almuerzo y fingir que nada pasó, puede desaparecer sin dejar rastro, puede hacerte creer que ha muerto, incluso que no mataría a nadie, puedes creer que una mujer es débil, que es sumisa, que es inferior, pero dejame decirte, que una mujer es como una pistola cargada sobre una estufa encendida, no importa que, ni quien, ni cuando, siempre puede disparar".

N:— ¿crees que te tengo miedo? — mis ojos no se apartan de los suyos a pesar de que todos los hombres en la habitación me apuntan con sus armas.

L:— tu maldita mocosa, ¿creías que no sabría que vendrías?, conozco lo mucho que te interesa ese collar.

N:— el collar no vale nada, no sé para qué lo quieres.

L:— en tus manos ese collar vale mucho dinero bonita, así que, como ya estás aquí, vamos a venderte con el Collar — la chica cruza sus piernas mientras se acomoda en la silla.

N:— sería muy débil si te dejara hacerlo, pero créeme, soy todo menos débil, soy astuta, peligrosa, y arrastro conmigo más muertos de los que tu has cargado jamás  — toma un sorbo de su trago.

L:— estás muy cómoda, incluso si 8 hombres te apuntan con sus armas — ella ríe.

N:— no le temo a las armas.

L:— puedo notarlo, lastimosamente no irás lejos.

N:— Jhoan, luces

L:— ¿cómo? — Lorenzo la mira con confusión, las luces se apagan y se escuchan disparos, sus ojos siguen fijos a la chica sentada en la silla, su silueta destaca entre los disparos que se imparten en la habitación, cuando las luces vuelven a encenderse solo uno de ellos está de pie y se acerca a ella.

N:— que no entre ningún otro, cuando ellas lleguen, deja que pasen — el asiente a su orden y sale — creo que contratar gente nueva siempre es encantador, son tan amigables, hacen todo por un buen sueldo.

L:— ¿pusiste en contra a uno de mis matones?

N:— ¿Solo a tus matones? — suelta la copa con brusquedad, esta cae al suelo y se rompe haciendo que el se sobresalte — créeme, puedo hacer más que una rebelión entre tus matones, puedo ponerte en contra a tu propia familia — se levanta y azota sus manos contra la mesa amenazándolo con su dedo — tomaste algo mío, te haré pagar por ello.

L:— si quieres el Collar tómalo, no me importa, pero no más, dejame en paz— ella ríe.

N:— cruzaste la línea, y créeme que no te gustará que hay de ese lado — le sonríe con maldad.

Dark QueenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora