Chocolate ᴴᵃʳʳʸ ᵂᵃʳᵈᵉⁿ

13. Gomitas

Habia pasado mas de un mes desde la ultima llamada de su padre y también un mes desde que estaba solo, Jade se habia marchado, y estando a fines de marzo, Bart ya estaba harto de seguir con ese castigo impuesto por su padre al obligarlo a quedarse en Harmony, el lugar era lindo, las personas eran amable (o al menos en una minoría así era), se habia hecho amigo de un posible psicópata, pero preferiría un millar de veces estar en la mansion y poder quedarse dormido en la piscina climatizada, extrañaba esos dias que de la nada despertaba en un flotador y caía al agua al hacer un movimiento brusco, buenos tiempos. Ahora en cambio, despertaba en el suelo am caer del sofa en el que ocasiones se quedaba dormido mientras veia televisión, esto era degradante, o al menos así lo creía él. Y mientras él se quejaba de su estancia en aquel poblado, alguien más se alegraba de que él estuviera allí, y ese alguien se trataba de Harry,  porque desde el primer instante en el que sus caminos se chocaron —literalmente—, su vida en sí habia dado un giro total, y recordaba esa noche como si hubiera sido ayer; se había con aquel motel en su trayectoria hacia la ciudad de Harmony, sujeto con fuerza su pico, estaba listo para acabar con algunas personas con las que se encontrará, su sed de sangre iba aumentando, pero cuqndo  chocó contra aquel joven, esa furia interna se extinguió cuando su mirada se conectó con la de él, esa mirada grisácea lo cautivo, nunca antes habia visto unos ojos tan bellos como aquellos, que de no haber sido por la luz del farol no hubiera notado que eran de ese color. Su cabello rubio resplandecia ante el contacto de la luz, era una bella imagen, como la de un angel.

Claro que esa nocje no se fue de motel sin antes matar a dos o tres personas.

Y desde ese noche en la que accidentalmente sus caminos chocaron, no habia dejado de seguirlo, porque Harry en un principio planeaba matarlo una vez que se diera cuenta que no era nadie en especial, pero fue inutil, se terminó enamorando de aquel joven. Cada cosa en él le fascinaba, si, tenia una actitud de mierda, era algo ninfómano y quiza tenia un orgullo su llegaba hasta el mismo valhalla, sus cambios de look repentinos (ósea, el cabello azul)... Pero, se dio cuenta de lo infantil que tambien podia llegar a ser, porque debajo de todo ese papel de tipico niño rico, había una persona dulce y bondadosa, era malhablado pero a la vez muy optimista. Aunque su exceso de confianza en un principio llagi a ser un ñroblema, proque literalmente se dio la cuelta para confrontarlo en mas de ina ocasión. Casual, sientes que alguien te viene siguiendo y cuando volteas lo saludas. En fin, esa era una se las cosas que más le encantaba de Bart, esa confianza tan característica de él. Y cuando en un inicio lo seguia, planeando en silencio mil y un formas de matarlo, y ahora, lo seguia para asegurarse de que no le suceda nada malo.

Tal y como lo hacia ahora, siguiendolo a todas partes, hasta que como todos los días, Bart se daba la vuelta de mqnera repentina y corria hacia donde él se hallaba oculto, y siempre con la mejor de las sonrisas puesta- ¡Que hijoeputa día mas lindo! ¿No lo cree señor minero? -dijo en tono de broma, llevándose una gomita a la boca, había visto hace unos instantes como las compraba en la tienda de la esquina- ¡Nada le gana a esta mierda! ¿Gusta...? -le extendió el paquete, lo iba a rechazar, pero al ver la mirada grisácea dem joven no pudo negarse, aceptó, se tuvo que dar la vuelta para levantar si mascara y llevarse las gomitas a la boca, y volversela a poner antes de que él le viera- ¿Acaso nunca te quitas el traje? -el mayor nego-Te digo de buena manera, no vayas a pensar otra cosa, pero es que me gustaría verte sin el traje.

Inevitablemente penso en esa otra cosa, y los colores subieron a sus mejillas, agradeciendo con el de arriba por llevar puesta la mascara proque de no see asi ese chico le hubiera visto el rojo que adornaba sus mejillas. El telefono celular del chico sono, él atendió la llamada y viendo que esta daría para rato largo, se despidió del minero yendo de regreso al hotel en el que se hospedaba, olvidándose pof completo del paquete de gomitas que le hania convidado al mayor, pero ahora eso no importaba, estaba mas concentrado en atender la llamada de Liz, era raro que ella llamase, su hermano y hermano hablaban al mismo tiempo, no les entendia nada de nada, lo oyo discutir entre si, y cuanfo quizo darse cuenta de la situacion, ya hadta su tía Estefanía y su tio Earl se habian metido a la discusión. Y no fue hasta la intervención de su padre que todo dio un fin y un comienzo a un nuevo problema-Arregla tu habitación, que estaremos allá hoy por la noche-la voz de su padre era severa lo que causaba que su pedido sonara más a una orden-, cuando estemos alla todo se te sera aclarado-mierda, tenia un muy mal presentimiento de todo esto.

[NOTA DEL AUTOR]

Se que es muuuuyy corto, pero les prometo que es por ina buena razon, ya que em el sigui3nte capitulo se complica todo, y es sumamente nesesario que toso se de en el siguiente, sin mas que decir, besito, besito, chau, chau💕💕