010

1.1K 105 0
                                    

Su mirada viajaba de acá para allá mirando a todos los ninjas que querían ser chunnin hoy.

-¿Cuál creen que es el equipo más fuerte?– Hinako miro a su equipo.

–No lose, es un fastidió...

–No pienses así, Shikadai– ella se colgó de su brazo –Seguro tu me protegeras, ¿verdad?.

Shikadai la vio de reojo antes de suspirar y sonreír.

–¿Necesitas que te proteja?.

–No... Pero eso sería muy caballeroso de tu parte. ¿No lo crees, Chouchou?.

–No imagino a Shikadai protegiendote, Hinako. Más bien, sería al revés.

–¿Ella protegiéndome a mí?– pregunto confundido el Nara.

Hinako río bajo hasta que sintió una mirada penetrante en su nuca, volteo confundida buscando la persona.

–No te preocupes– ella miro de nuevo a Shikadai –No dejen que te intimiden. Solo son simples ninjas.

–Eh. Si...

Su mirada aún estaba mirando a su alrededor para encontrar el perteneciente de esa mirada que la ponía nerviosa.

–¡Hinako!. ¡Aquí!.

Ella giro viendo a su hermano saludándola a lo lejos, y ella imito su acción para empezar a acercarse sin darse cuenta que alguien iba en su dirección.

Y chocó con ella...

–Deberías ver por dónde vas, niña tonta

La uzumaki giro encontrando a ninjas de la roca, uno de cabello verde y negro, otro con el ojo tapado con su cabello y uno medio gordito.

–Ah, lo siento. Fue un accidente. No fue para tanto.

–Yo diré si fue para tanto o no. Será mejor que aprendas a ver por dónde vas.

–Vamos, Hinako. No causes problemas– ella se libero de Shikadai.

–¿Hinako?– ambos vieron al de la Roca –Hija del Hokage. Que lo seas no significa que sea blando contigo, aquí nadie te protegerá como una princesa.

–Ya veremos quién protege a quien, niño raro.

Ambos se acercaron demaciado enviándose miradas asesinas, eran la atención de todos los gennin.

–¿Alguien los separara?– pregunto Inojin.

–No debes interponerte en la pelea de una mujer, Shikadai– comento Chouchou.

–¿Por qué me lo dices a mí?. No iba a hacerlo.

(...)

–¿Cree que estoy lista?.

–Por favor. Has entrenado conmigo, niña– Jiraiya sacudió su cabello –Estas más que lista.

–Es que... Estoy nerviosa. ¿Y si fallo en la primera prueba?. No quiero decepcionar a mí equipo.

–Y no lo harás. Confía más en ti, Hinako. Se positiva.

–Tiene razón. ¡Tiene razón, viejo pervertido!. ¡Debo confiar más en mí y ayudar a mí equipo en todo lo que pueda!.

–¡Esa es la actitud!.

–¡Oigan ustedes dos, bajen de allí!. ¡Mirones!.

–¡Corre niña!.

Ambos bajaron del techo de los aguas termales y a los segundos empezaron a ser perseguidos por el encargado.

–¡¿Por qué me cito aquí para hablar, viejo pervertido?!.

Mujer problemática [Shikadai Nara]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora