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Steve notó el cambio de actitud en Eddie en ese momento, su personalidad alegre y carismática pareció apagarse luego de su encuentro con Jason.

Durante la consulta con el doctor estuvo sentado mirando por la ventana mientras su tío hablaba casi todo.

En resumidas cuentas, Eddie estaba bien. Su brazo había evolucionado correctamente por lo cual no había razón para que siguiera usando el cabestrillo, pero tampoco debía hacer demasiada fuerza.

Steve prestaba atención a las órdenes del médico, pero una parte de él no podía dejar de notar que Eddie estaba perdido en su propio mundo. Incluso cuando los tres hombres salieron del hospital para llegar al auto de Steve, Eddie seguía sin decir ni una palabra.

-Que bueno que todo salió bien, hijo.- El tío de Eddie le dio un apretón en el hombro y le abrió la puerta para que subiera al auto. Eddie le dedicó una pequeña sonrisa antes de obedecer.- Steve, muchas gracias por todo, en serio. Ahora ya no te molestaremos más.

-¿De que habla?

-Bueno, ya que Eddie está mejor puede volver al tráiler, en serio agradezco muchísimo lo que hiciste por nosotros. Eres un gran amigo.

Steve quiso replicar pero no tendría sentido. Eddie estaba bien y era capaz de cubrir sus necesidades básicas por si solo, no había ningún motivo para que se siguiera quedando con él.

Ningún motivo aparte de lo que el corazón de Steve le suplicaba.

Durante el transcurso del viaje nadie dijo nada, el auto se mantuvo en silencio exceptuando la tenue música que salía de la radio.

Steve sentía su estómago apretado mientras más cerca estaban del parque en donde vivía Eddie, no quería dejarlo ir antes de tener la oportunidad de hablar con él.

-Si no le molesta, podría dejarlo a usted e ir con Eddie a mi casa para ayudarlo a preparar sus cosas.

-¡Oh, muchacho, no es necesario! - El señor Munson le dio una sonrisa agradable. - Ya arregle con un amigo para poder pasar por sus cosas en la mañana, así no tendrás que hacer dos viajes.

Claro, bien pensado.

Steve se maldecía internamente, tratando de encontrar la forma de hacerle notar a Eddie que quería hablar con él, pero el menor no lo miraba.

Cuando bajaron del auto el tío del menor se despidió de Steve con un abrazo apretado, volviendo a darle las gracias por sus favores. Steve le dijo que no tenía nada que agradecer. El señor Munson lo invito a cenar con ellos, pero Steve ya tenía un compromiso previo con Robin, por lo que tuvo que declinar. El señor Munson les dio un poco de privacidad entrando a su tráiler y dejándolos solos en medio de la tarde.

Eddie se quedó apoyado en el auto, mirando directamente a los ojos de Steve, con una mirada que hizo al mayor estremecerse.

-Oye, gracias, ya sabes, por todo lo que hiciste.

Steve sonrió de medio lado, miro a sus alrededores para cerciorarse de que no había nadie cerca y se inclinó hacia Eddie, rozando sus labios.

-No lo hice desinteresadamente, tendrás que pagarme de alguna manera.

Steve esperaba que Eddie le siguiera el juego, porque así era más fácil dejar fluir la conversación que quería tener, pero en cambio, Eddie junto sus labios en un corto beso y lo rodeo.

-Bueno, será en otra ocasión. Gracias por traernos, Harrington.

Y sin más entro en su tráiler y dejó a un muy confundido Steve fuera.

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Había pasado un día desde que había abandonado la guarida de Steve, y sentía su ausencia como algo físico.

Inefables - SteddieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora