String (Libro 3 Dinastía Indestructible)

Capítulo 11

Selene

Reprimo las lágrimas durante toda la noche, no dejan de reproducirse en mi cabeza los gestos de Zeth, se culpa pero fue el único que estuvo para mí aunque no del todo pero al menos no actuó toda la vida como si no existiera

Me muevo para acomodarme pero no encuentro una posición la cual me lo permita. Me froto la cara harta de la situación, no voy a llorar porque hacerlo en las noches solo asegura caer en algo que nunca se puede controlar. Lo viví por años en los cuales las noches en las que sollozos eran los protagonistas de mis desvelos, esa sensación de ahogo con diminutas fuerzas por contener y resistir a modo de no darte cuenta lo destruido que estás, es agotador

Esa quemazón de la garganta por el grito que quiere salir, la necesidad de soltar lo guardado... todo eso se convirtió en algo que no quiero volver a sentir ni vivir.

Pero estar desde hace tres horas que regresamos en la cama sin poder dormir me sabe a amargo, no puedo escapar de algo a lo que me condenaron ni mucho menos deseo estar en manos de Ferenc Horváth otra vez, ese tipo tiene la manía de hacer que hasta los colores se vean grises, que pierdan esa alegría. Prefiero estar aquí, o viajar a esos lugares recónditos en los que casi caigo al precipicio.

Camino fuera del dormitorio a buscar un té a la cocina, o al menos despejar la cabeza, necesito tener paz en mi mente para dejar de sentir que estoy siendo prisionera de mis propios pensamientos. Es agobiante la capacidad que tiene la cabeza de encerrarnos en un mundo que nos atemoriza.

Actuo en automático tomando una taza con el agua caliente que vierto en esta para luego colocar la bolsita de té que muevo perdida en un lugar fuera del plano terrenal. No me gusta fingir que todo está bien, nunca lo ha estado desde que mamá murió. Me sentí excluida, menospreciada en una familia a la que no dejaron que me integrara como deseé.

Los recuerdos del último día que vi a mi madre llegan de golpe, su cabello cubriendo mi cara, su olor a cariño, a ese amor que dejé de sentir hacia a mí. Sus brazos presionando contra ella evitando que me tocaran las balas que se desataron. Todo me reduce a una simple moneda de cambio que no le importa a nadie pues a la primera oportunidad de pasarme una deuda que no me corresponde, lo hicieron. Ni siquiera pensaron en que... llevo su sangre

Pero es algo que ya acepté, no represento nada para ellos.

Me limpio la mejilla, sacudo mi cabeza alejando los recuerdos, son solo las torturas que continuarán por siempre, hasta ...

__ ¿Que sucede? - la voz del amo me trae de regreso a la realidad, camina con lentitud a mis espaldas - ¿Sigues pensando en el hubiera?

No digo nada

__ ¿En esa idea de que la felicidad debe permanecer todos los días y cada segundo para ser verdad? - se sienta enfrente - Una idea un poco errónea para una persona que vivió, vive y seguirá viviendo en el infierno de su mente - coloca los brazos sobre la isla de la mesa - ¿Aún ves el mundo como un lugar en donde llegará un príncipe azul en un carruaje y te dirá que vayan juntos a vencer al dragón para salvarte de su furia?

No digo nada, se rasca la unión de su ceja sin dejar de verme

__ No creas en el amor, Selene - suelta de golpe - El amor es la única mentira en la que las personas deciden creer por sí mismas, saben lo que conlleva seguir y aún así lo hacen a pesar del desastre en el que se puede convertir en el futuro - se levanta yendo por su propia taza tomando una bolsa de té también - Has sido entregada al dragón, uno que no pensará nunca en como te sentirás, las lágrimas no sirven para su pago y sabes que las deudas solas no se saldan

__ Nunca dije que quería la vida resuelta - digo con un poco de molestia

__ Nunca dije que lo habías dicho - se vuelve a sentar con su taza - Pero actúas como si un día llegará ese alguien que te dirá "toma te doy el mundo" - trago grueso - No creas más tonterías, Selene. Si sigues así te darás un golpe de realidad en el que te dolerá el alma misma. Enfócate en las soluciones que debes encontrar y no en el problema en sí. No preguntes ¿Porqué pasó? - su mirada choca con la mía directamente - Pregúntate ¿cómo lo soluciono?